Movimientos en la cima: Los Megafondos dejan la alianza climática de la ONU y otros apuntes

Parece ser que algo empieza a moverse por las altas esferas. A finales del año pasado, Jacob Rothschild (fallecido recientemente y vinculado al fondo Black Rock), anunciaba que los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU no se iban a aplicar, al menos no todos. Hablaba el jefe, dicho y hecho, JPMorgan Chase y Black Rock, los grandes fondos de inversión a nivel mundial, anunciaron el mes pasado su distanciamiento sobre la participación en la alianza climática de Naciones Unidas, creada para «combatir el calentamiento global» mediante acuerdos de sostenibilidad.

JP Morgan Chase explicó, a través de un comunicado oficial, que abandonaría el grupo inversor denominado «Climate Action 100+». Black Rock, por su parte, junto a State Street, han señalado que las «iniciativas climáticas de la alianza han ido demasiado lejos», motivo por el cual, se han mostrado preocupados y reticentes a la hora de seguir invirtiendo en la alianza.

Black Rock ya ha cerrado su negocio estadounidense de Climate Action 100+, trasladando su participación en la alianza internacional a un reducido grupo de acciones dirigidias a la descarbonización.

State Street ha señalado que la salida de la alianza se debe a que los compromisos que se acordarán en la fase 2 del Climate ACtion 100+ «entraban en conflicto con las políticas de inversión internas de la emrpesa».

Climate Action 100+ se fundó formalmente en diciembre de 2017 en el seno de Naciones Unidas, como una manera de poner de acuerdo a los principales fondos del sector privado a nivel mundial. La iniciativa ha entrado recientemente en la denominada «Fase2», que ofrece más formas de participar a los inversores.

Según apunta la Gaceta.es, el contexto político actual ha cambiado con respecto al de 2017, cuando se fundó la alianza. Nos encontramos ahora con el denominado movimiento anti EGS (Enviromental, Social y Governance, por sus siglas en inglés), que cada vez tiene más fuerza en Estados Unidos y que en Europa, puede ser visible ya en las revueltas de los agricultores.

Es, en definitiva, la protesta cada vez más extendida contra el globalismo impuesto por la conocida «Agenda 2030» que se plantea a través de medidas como el «Pacto Verde», tan denunciado por los agricultores, ganaderos y pescadores.

No ha sido el único y “sorprendente” anuncio, recientemente, cada vez más países se suman a la crítica a Israel por su genocidio en Gaza, de hecho, según Andrei Devyatov (coronel retirado de la inteligencia del Ejército Ruso), Putin, quien hace poco se reunió con Hamas, rompiendo su silencio, y ha ordenado a Rusia pedir el alto el fuego en la ONU, se habría rebelado a la organización Jabad Lubavitch, poderoso grupo de presión sionista (que tiene entre sus aliados y/o adherentes a personalidades como Donald Trump, al menos mientras fue presidente de USA, o Robert Kennedy Jr, además de al propio Putín hasta hace poco, y entre sus marionetas, a Volodimir Zelensky y al argentino Javier Miei) al que hasta hace poco se adhería. Al parecer, los signos de esta rebeldía serían, además de su última posición pública a favor de Palestina (rompiendo su tradicional silencio a este respecto) y de la solución de los dos estados para la región, haberse negado a asistir a la celebración del Hanukka en la sede de esta importante asociación; dicha asistencia simbólicamente significa un acto público de adhesión (o incluso sometimiento) a este lobby, desde el punto de vista de la criptopolítica, con lo que al rechazar la invitación, supondría una afrenta. También es indicador de rebelión haberse reunido con Emiratos Árabes, Irán y Arabia Saudí y estar impulsando los BRICS+ con países árabes. Según el propio Devyatov, el atentado en Moscú de marzo de 2024, habría estado orquestado por dicha sociedad en represalia a la rebeldía de Putín

Los países del BRICS+, según el geoestratega y responsable del proyecto IIRSA (un devastador y ecocida proyecto de infraestructuras en América Latina, a la altura de aberraciones como el tren maya o las carreteras andinas que tienen previsto perforar dicha cordillera para permitir el paso de las mercancías industriales capitalistas) Andres Nievas, serán los impulsores del nuevo imperio: una suerte de federación de consulados regionales imperiales, al mando cada uno de un sátrapa que rinda obediencia al Imperio Británico, imperio que está decidido a dejar caer la unipolaridad estadounidense y a su hasta ahora brazo armado para sustituirla por un imperio desglobalizado y descentralizado, con hegemonía China. Parece ser que Putin también se opondría a esto, no por filantropía, sino por no querer ser cónsul de ningún emperador y buscar la autonomía del, por él y sus patrocinadores, deseado Nuevo Imperio Ruso, en convivencia con el Británico.

Otro de los síntomas que demuestran que algo está cambiando es también cómo Ucrania empieza a ser abandonada a su suerte pese a la retórica belicista europea. Varias fuentes indican que el reyezuelo de Francia, Macron, fiel empleado de la banca Rothschild, estaría dispuesto a entra con su ejército en Ucrania pero no para reconquistarla y pelear con Rusia, sino para una repartición del reino de la marioneta Zelenski, entre Rusia y la UE.

Cómo afectará todo esto al Tratado de Pandemias que nos están preparando los próceres de la OMS, ¿saldrá adelante o ya no será necesario? Porque hay que recordar que pese a que haya enfrentamientos imperiales y entre élites, la Cuarta Revolución Industrial nos la vamos a comer, sí o sí, bajo un formato u otro, con una u otra gestión, salvo que las masas se amotinen y digan basta, lo cual de momento parece algo difícil, pese a haber algunos signos de esperanza. El gobierno mundial posiblemente también nos lo comamos con patatas, quizás no en forma de gobierno central único y unipolar, sino en forma de federación articulada por la ONU, con el beneplácito de las nuevas potencias y las mega corporaciones, o tal vez en alguna otra variante pero parece que el asunto tira para adelante. ¿Qué sucederá? Pase lo que pase, no tengan miedo y crean en sí mismos, dentro del individuo consciente está la verdad.

TerraIndomita

Fuentes

Bea Talegón (https://diario16plus.com/los-grandes-fondos-de-inversion-abandonan-la-alianza-climatica-de-naciones-unidas/)

Andrei Devyatov (http://www.verdadypaciencia.com/2024/03/andrei-devyatov-la-sincronizacion-de-la-politica-con-la-voluntad-del-cielo-y-los-operadores-del-plan-de-salomon.html)

Andres Nievas (https://terraindomita.blackblogs.org/2024/01/22/el-tablero-multipolar-y-los-brics-un-instrumento-clave-para-establecer-el-nuevo-orden-mundial/)