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Desmantelar la OMS

El relato del Pangolín y el control de daños

En estas últimas semanas, las nuevas noticias en torno al complejo industrial farmacéutico se agolpan en las bandejas de entrada de las múltiples redes sociales del equipo de Grupo de Control. No hay tregua. Los eventos de especial relevancia se arremolinan violentamente como si de un tornado se tratase, y cuesta dar abasto a tanta última hora. Unas noticias que para los consejos editoriales de los medios de comunicación de nuestro país no merecen un pequeño espacio en las páginas interiores de los periódicos. Ni un sólo digital se hace eco.

Por ello, aunque sea una labor ardua la que tenemos por delante, es deber ético informar sobre lo que acontece, y hacerlo asequible al lector que se acerque por primera vez a esta colosal trama de engaños, propaganda y medidas totalitarias, impuestas al calor de una urgencia pandémica cuya pertinencia y verosimilitud cada día resulta menos defendible desde la racionalidad. Una trama con cientos de ramificaciones, que conecta los intereses del globalismo filantrópico con el poder político, el poder militar y el poder financiero mediante técnicas de ingeniería social y de control de masas.

Y para que toda esta trama resulte exitosa, es fundamental contar con el poder legitimador de la Organización Mundial de la Salud (OMS), un organismo con apariencia pública, que permita a la opinión pública pensar que todas las decisiones que se toman son por su bien. Pero no adelantemos acontecimientos. Dejaremos el análisis del Tratado de Pandemias para la segunda parte de esta editorial, ese texto por el que la OMS pretende arrogarse la soberanía mundial en Salud Pública con toda opacidad y con una urgencia que, a la vista de los acontecimientos, resulta muy sospechosa. También en la segunda parte trataremos el fastuoso aparato de propaganda y censura que ha crecido en paralelo a la trama, y que es la correa de transmisión por la que el engendro filantrópico globalista llamado Foro Económico Mundial (WEF) disciplina a la opinión pública.

Pero para entender la dimensión del monstruo mediático y político al que nos enfrentamos, es fundamental acercarse el origen de esta escalada liberticida en la que nos encontramos. Y esta búsqueda de la génesis del ataque sin precedentes contra la convivencia y la democracia liberal nos lleva indefectiblemente a Wuhan. 

Por ello, comenzaremos la narración fijando nuestro objetivo sobre lo que acontece en el Subcomité del Congreso de los EEUU que investiga el origen del SARS-CoV2 y los llamados “proyectos de ganancia de función (GOF)”. Una comisión en la que el tono general de las intervenciones de los ponentes ha ido creciendo en intensidad y vehemencia, en un crescendo sostenuto digno del mismísimo Stravinskyal que cada día se suman más instrumentos. Para los que hemos seguido las actividades de esta comisión, resulta reconfortante comprobar el cambio de actitud de muchos de los congresistas, fundamentalmente en el lado demócrata, que si bien en un principio se empleaban con tibieza en sus preguntas a los declarantes, ahora están determinados a ser más incisivos.

Es evidente que algo ha cambiado en el ánimo de la comisión, y al cuento del pangolín se le está poniendo cara de Watergate con las elecciones a la vuelta de la esquina. Cierto es que toda la comisión desprende un ligero aroma a teatralidad, en que algunos de los congresistas escenifican cierta sorpresa e indignación sobre hechos que algunos conocemos desde hace más de tres años. Y como en cualquier obra de teatro, un buen villano permite vertebrar la tensión narrativa en torno a su figura. El elegido para  representar este infame papel es un científico de nombre Peter Daszak. 

El Dr. Daszak, a la sazón presidente de EcoHealth Alliance, es el villano perfecto, por varios motivos. En primer lugar debido a las actividades de su empresa y su posición en ella. EcoHealth Alliance es una organización con apariencia de oenegé, que servía hasta 2023 de empresa pantalla, de la que la administración estadounidense se valía para destinar fondos públicos a proyectos de ganancia de función en laboratorios de varios lugares del globo, entre ellos, Ucrania y, de manera muy significativa, en el Instituto de Virología de Wuhan (WIV).

Los proyectos de ganancia de función consisten en dotar a patógenos comunes (p.e. virus de la influenza), de mayor patogenicidad o conseguir que resulten más infecciosos mediante ingeniería genética, con el objeto de crear eso que se llama en la jerga científico-militar “contramedidas médicas”, esto es, vacunas para la enfermedad derivada de la infección por estos patógenos. Según sus detractores, el concepto de ganancia de función no es más que un sofisticado eufemismo mediante el cual poder evadir la Convención sobre la Prohibición del Desarrollo, la Producción y el Almacenamiento de Armas Bacteriológicas (Biológicas) y Toxínicas (CATB). Para sus valedores sin embargo, supone una herramienta de incalculable valor con la que poder anticiparse a futuras pandemias y desarrollar fármacos adecuados de manera ágil. Sea como fuere, el debate en el seno de la comunidad científica de Estados Unidos y del resto del mundo occidental al hilo de este concepto derivó en el decreto de una moratoria de financiación por parte de la Administración Obama allá por 2014, precisamente por tratarse de proyectos de alto riesgo, con potencial de crear problemas de salud pública graves en caso de fuga de laboratorio, e incluso en el peor de los escenarios, derivar en una amenaza bacteriológica en un eventual enfrentamiento geopolítico con alguna potencia rival.   

EcoHealth Alliance recibía fondos del Departamento de Defensa (DoD), del Pentágono, de la Agencia de Defensa de Investigación Avanzada (DARPA) o de la Agencia de Reducción de Amenazas (DTRA), además de varias agencias de inteligencia asociadas a la CIA. En el ámbito de la salud, recibía fondos del Instituto Nacional de Salud (NIH) dirigido por Francis Collins, del Instituto Nacional de Enfermedades Alérgicas e Infecciosas (NIAID) dirigido por Anthony Fauci o del Centro de Control de Enfermedades de Atlanta (CDC).

Como pudimos saber gracias a la entrevista que realizamos en Grupo de Control al que fuese vicepresidente de EcoHealth entre los años 2014 y 2016, el Dr. Andrew Huff, existía una determinada desviación entre los fondos recibidos y los proyectos a los que se asignaban, por lo que, cuando EcoHealth o cualquiera de las otras organizaciones de esta índole concurrían a una determinada subvención de alguna de estas agencias gubernamentales, generalmente el proyecto estaba ya desarrollado o en vías de hacerlo.

Allá por Noviembre de 2021, el diarioThe Intercept, publicaba una información relativa a un proyecto de ganancia de función, cuyos fondos provenían precisamente del dinero de los contribuyentes estadounidenses con la intermediación de EcoHealth, desarrollado en el Instituto de Virología de Wuhan (WIV) en colaboración con científicos estadounidenses y chinos. Motivado por esta filtración a la prensa y por la evidente relación con el origen de la pandemia, el Mayor Joseph Murphy, un mando del ejército del propio DARPA, expresó su preocupación en un informe que acabó siendo publicado íntegramente junto con el propio proyecto de EcoHealth, de nombre Defuse. El proyecto, cuya financiación fue rechazada en origen por el propio DARPA debido a su peligrosidad, describía trabajos de virus recombinantes quimera en un virus similar al SARS, que habrían sido utilizados para infectar colonias de murciélagos en las cuevas de la provincia china de Yunnan, aerosolizando sobre las mismas un pretendido antídoto en forma de vacuna. El modelo de virus correspondería al coronavirus de murciélago RatG13, sobre el que habrían trabajado en este sentido varios científicos asociados al proyecto, entre ellos el científico y profesor de la Universidad de North Carolina, Ralph Baric, junto con la Dr. Shi Zheng Li, viróloga china apodada “batwoman” por sus años de investigación con coronavirus de murciélago, que dirigiría la investigación en uno de los laboratorios del Instituto de Virología de Wuhan (WIV), entre varios otros.

¿Y qué es lo que llamó la atención del Mayor Murphy? A juzgar por su informe, fue la peligrosidad del proyecto. La similitud entre el RatG13 sobre el que Baric y singularmente Shi Zheng Li habrían estado trabajando años atrás para aplicar ganancia de función y el SARS-CoV2 resultaba llamativa a los ojos de un científico versado en la materia. Sin embargo, sólo el SARS-CoV2 presentaba un sitio de corte de furina en la proteína spike del virus, inédito hasta la fecha en sarbecovirus como el SARS- CoV2, por lo que tenía la capacidad de acceder al núcleo de la célula humana conectando con su receptor ACE2, pudiendo así replicarse y crear infección en humanos.

Un estudio publicado en Frontiers in Virology allá por febrero de 2022, que comparaba el genoma del SARS-CoV2 con otros coronavirus, encontraría una coincidencia de casi el 97% con el genoma del RatG13 en el que trabajaron Baric y Zhengli, siendo este el coronavirus que, de largo, mayor coincidencia genómica presentaba de todos los estudiados. También se localizaría una sospechosa singularidad en una porción de la secuencia del SARS-Cov2 de 19 nucleótidos, precisamente en el sitio de corte de furina, que encajaba al 100% con una porción de una secuencia patentada por la empresa Moderna en 2016, la misma empresa que, a la postre, resultaría una de las encargadas de producir las vacunas contra el COVID-19. El estudio citado cifraba la posibilidad de que semejante coincidencia se diese de manera natural en una entre tres billones. Una entre tres billones resulta una posibilidad suficientemente remota como para permitirse al menos dudar de la narrativa hegemónica del salto zoonótico, máxime conociendo los trabajos de Baric, allá por 2005, le llevaron a desarrollar la técnica no see´um, gracias a la cual se podrían ocultar las huellas de manipulación genética en patógenos.  

Sin embargo, estos hechos pasaron sin pena ni gloria, permaneciendo relativamente ignotos para el grueso de la opinión pública, difuminados entre el terror pandémico y la coerción ejercida sobre la población a cuento de las  inoculaciones. Entre llamadas a la marginación de los no vacunados y normativas cambiantes e incongruentes, las masas alienadas pasaban los días ajenos al incipiente resquebrajamiento de la columna vertebral del cuento del pangolín. Pese a estos sorprendentes hallazgos, las sospechas sobre la posible relación de estos proyectos de ganancia de función o sobre la verosimilitud de la autoría del proyecto Defuse quedaron en suspenso, al menos en Europa, donde el argumentario monolítico pandémico no dejaba lugar al debate. En EEUU poco a poco la calma chicha iba dando paso tímidamente a ciertos movimientos en el ámbito político. Ron De Sanctis, gobernador republicano por Florida, plantaba cara a los mandatos vacunales de la Administración Biden, y el mapa de EEUU se dividía entre los estados en que obligaban a la gente a inocularse productos experimentales y los estados en los que no. De manera insospechada, muchos líderes republicanos se erigían en defensores de la autodeterminación médica, mientras que la inmensa mayoría de líderes demócratas se plegaban al discurso que convenía al complejo industrial farmacéutico. En Europa, sin embargo, la rendición al pensamiento pandémico era total. Altas tasas de vacunación, medidas coercitivas y draconianas, multas, pasaportes vacunales, escarnios públicos, propuestas de retirada de acceso a la sanidad universal o incluso de la patria potestad a los padres que no quisieran inocular a sus hijos. Una verdadera locura que ni siquiera el tremendo shock pandémico puede explicar. 

Mientras tanto, el relato del pangolín empezaba a dar ciertas señales de agotamiento, y el principio del fin se cernía sobre sus guionistas. La encomiable labor jurídica de la organización US Right to Know (USRTK), presentando querellas contra las diversas agencias implicadas en la cuestión de los orígenes del COVID, empezaba a dar sus frutos. Gracias a todas sus querellas y a las subsiguientes Actas de Libertad de Información (FOIA) que comenzaron a presentarse en torno a noviembre de 2020, poco a poco hemos podido conocer las comunicaciones y los emails de todos los implicados, tanto en la trama de encubrimiento como en los proyectos de ganancia de función y el WIV. También hemos podido conocer la relación de todos estos hechos con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y un entramado de entes globalistas vinculados a ella que han hecho uso de este tipo de investigaciones a fin de desarrollar programas de vacunación.  Mención especial en lo que al esclarecimiento de los hechos se refiere, merece el valor demostrado por el que fuese vicepresidente de EcoHealth, Dr. Andrew Huff, al que tuvimos el privilegio de entrevistar en Grupo de Control, que jugándose su prestigio personal e integridad física, ponía patas arriba el debate público sobre esta cuestión con su testimonio ante el Congreso y el Senado en septiembre de 2022, destapando las actividades más que discutibles que EcoHealth Alliance llevaba a cabo, así como su relación con el complejo militar industrial y farmacéutico. Peter Daszak, presidente de EcoHealth, empezaba a desprender aroma a chivo expiatorio.  

Y es que, como ya he mencionado, Daszak es el villano perfecto alrededor del cual articular una narrativa de control de daños creíble, que es a lo único a lo que en esta ponzoña moral a la que llaman democracia podemos aspirar. Además de las actividades de la organización que hemos esbozado someramente, y de su relación con la comunidad de inteligencia, se puede situar a Daszak en todos los diferentes escenarios de la trama. Los emails publicados por razón de las sucesivas FOIA han revelado un Daszak ciertamente muy proactivo. En primer lugar, y así ha quedado acreditado en su declaración ante el Congreso del pasado día 1 de Mayo, Peter Daszak tuvo conocimiento del primer caso de SARS-CoV2 en China, que le fue filtrado, según sus propias palabras, por un científico chino cuyo nombre no ha trascendido, según Daszak porque el gobierno chino estaba deteniendo a científicos que “colaboraban” con agentes extranjeros. Esta información resultó de vital relevancia para que la comunidad internacional pudiese empezar a presionar al gobierno chino, que a regañadientes reconocería una semana más tarde que efectivamente se trataba de un caso de un coronavirus nuevo, con coincidencias genómicas con el SARS, al que se bautizaría con el nombre de SARS-CoV2. Según Daszak declaró en el Subcomité, en cuanto lo supo lo puso en conocimiento de sus allegados, y se publicó en PubMed, una publicación de referencia en el ámbito de la virología y la investigación organizada por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EEUU (HHS). 

Gracias al libro publicado por otro de los implicados en la trama, el actual Jefe Científico de la OMS, Jeremy Farrar – que por aquel entonces era director del Wellcome Trust, un contubernio filantrópico relacionado con la farmacéutica GSK y muy implicado en proyectos de la OMS – supimos de la gran actividad telefónica que mantuvieron tanto él como Daszak y Fauci con el grupo de científicos llamados a jugar un papel muy relevante en los hechos que a continuación relatamos. Ellos eran Robert Garry, Edward Holmes, Angela Rasmussen, Kristian Andersen o Andrew Rambaut, entre otros. Según el propio testimonio de Jeremy Farrar, hicieron uso de teléfonos prepago para no dejar rastro de sus contactos, cosa muy sorprendente si pensamos que su relato de los hechos quedaría plasmado negro sobre blanco en su libro de título “Spike”. Al tiempo que Farrar y Fauci mantenían conversaciones de alto nivel con responsables de los CDC chinos como su director, George Gao, varios de los científicos anteriormente enumerados se aplicaban con vigor en presionar a sus homólogos chinos, con el fin de que el genoma fuese publicado cuanto antes, siendo el propio Andrew Rambaut el encargado de hacerlo el día 7 de enero de 2020, presumiblemente tras una filtración.  

En esos primeros instantes, las diferentes teorías sobre el origen del SARS-CoV2 enfrentaban a gran parte de la comunidad científica, con insultos cruzados entre prominentes virólogos en redes sociales. Tocaba atajar el debate, y por ello Daszak y Fauci se repartieron las tareas. Fauci se encargaría de  blindar la teoría de la zoonosis, mientras que Daszak concitaría el apoyo de sus allegados en aquella famosa carta publicada en The Lancet, que vería la luz el 19 de febrero de 2020, en la que se tildaba de teoría de la conspiración toda aquella teoría que sugiriera que el COVID-19 no tenía un origen natural. Entre los firmantes de la carta, varios ilustres de la distopía pandémica. Christian Drosten, el impulsor de los protocolos de detección diagnóstica con la técnica PCR, piedra angular sobre la que reposaba toda la legitimidad de las medidas que se tomarían con posterioridad, Jeremy Farrar, al que ya hemos presentado someramente, y nuestro estimado Luis Enjuanes, ese simpático investigador jubilado del CSIC, que trabajosamente sacaba adelante la famosa vacuna española que nunca vio la luz, con la ayuda de su grupo de pizpiretos becarios. Los becarios de Enjuanes, por cierto, se convertirían durante los meses subsiguientes en toda una brigada de defensa de la zoonosis en redes sociales, vilipendiando y despreciando a todo aquel que se atreviera a poner en duda la narrativa del pangolín. Otra anécdota curiosa que se desprende de una de las múltiples FOIA que han ido surgiendo es que Daszak sugirió a Ralph Baric, Shi Zheng Li y Linfa Wang, los científicos encargados del desarrollo del proyecto Defuse, que no firmaran la carta, para disimular el colosal conflicto de interés que en realidad la motivaba. 

Al tiempo, Fauci y Farrar se aplicaban en su tarea de dotar de un corpus teórico a la narrativa. Para ello contaría con la ayuda de la guardia pretoriana de Fauci, Kristian Andersen, Robert Garry, Edward Holmes y Andrew Rambaut, que firmarían conjuntamente el famoso “Proximal Origin of SARS-Cov2”, un paper que ha envejecido bastante mal a la vista de los acontecimientos. Tan es así, que la revista Nature ha retirado la publicación de su repositorio de publicaciones. También gracias a sendas FOIA, pudimos saber que ni siquiera los firmantes de ese “estudio” contemplaban la zoonosis como opción más plausible. Para la posteridad de la infamia pandémica quedará la expresión “friggin´ likely”(condenadamente probable), con la que Kristian Andersen se refería a la posibilidad de que el virus procediese de un laboratorio. El virólogo británico afincado en Sidney, con fuertes vínculos con China, sería todavía más contundente, afirmando lo siguiente: “Seamos realistas, a menos que hubiese un denunciante del WIV que desertara y viviera en Occidente bajo una nueva identidad, NUNCA sabremos qué pasó en el laboratorio”. Pocos meses después de escribir el “Proximal Origin”, texto de referencia de la narrativa zoonótica, Kristian Andersen recibiría una subvención del NIAID de Fauci por valor de 8,9 millones de dólares. Roma no paga traidores, pero el NIAID al parecer sí. Cabe destacar una ausencia muy significativa en esta trama, que incluye a ínclitos representantes de prácticamente todos los organismos de salud pública de la administración estadounidense, a excepción del Dr. Robert Redfield, que por aquel momento era el jefe de los CDC de Atlanta. Quizás la determinación expresada a Anthony Fauci en indagar todas las vías posibles no le hizo merecedor de su confianza. En marzo de 2023, Redfield apuntaba ante el Subcomité del Congreso como origen más probable del SARS-CoV 2 la posibilidad de una fuga de laboratorio lamentándose de haber sido excluido en aquellos momentos de febrero del 2020 de las deliberaciones que dieron lugar al “Proximal Origin”. 

Por si le faltase algún elemento a este vodevil, a finales de junio de 2021, un biólogo evolutivo del Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson, de nombre Jesse Bloom, que intentaba reconstruir las secuencias del genoma del virus basándose en 34 muestras de los primeros casos en Wuhan, descubrió que los 241 archivos con datos de secuencias genómicas publicados en la base de datos del NIH habían sido misteriosamente borrados. Sorprendido por semejante hallazgo, Bloom se puso en contacto con Anthony Fauci y Francis Collins. Collins organizó una reunión de Zoom a la que invitó a Kristian Andersen y Robert Garry, a los que ya hemos mencionado anteriormente. Para cuando la reunión tuvo lugar, Jesse Bloom ya había publicado en preprint su hallazgo, por lo que quedaba el registro. Por las notas que tomó Bloom de la reunión, hemos podido conocer el tremendo impacto que tuvieron sus hallazgos en el desarrollo de dicha reunión. El ambiente se crispó súbitamente cuando Bloom compartió el resultado de sus indagaciones. En sus notas se narran gritos cruzados entre varios participantes y una gran tensión. Fauci, al parecer se lamentó por el contenido de la descripción en el informe de Bloom, porque daba la impresión de que científicos chinos habrían eliminado subrepticiamente los archivos de la base de datos. No conviene olvidar que para poder borrar secuencias en la base del NIH, es necesario contar con la aquiescencia del propio NIH, lo que añade una sombra de sospecha sobre su implicación en el suceso. 

Siempre según las notas de Bloom, Andersen habría intervenido muy alterado señalando que este hallazgo podría dar alas a teorías de la conspiración, comprometiendo así el prestigio de científicos como él. Jesse Bloom afirmó en sus notas que Andersen llegó a proponer eliminar el preprint de la base de datos de BioRxiv, dado que como evaluador del sistema, tenía la posibilidad de hacerlo él mismo. Collins y Fauci expresaron su disconformidad con la propuesta de Andersen y solicitaron a Bloom que lo tuviese en consideración, se entiende que para que constase en sus notas. Posteriormente, Andersen declaró que lo contenido en las notas de Bloom respecto a su oferta era falso. Se puede dudar de la veracidad de lo afirmado por Bloom en sus nota, por lo que este extremo quedaría al albur del juicio personal de cada uno sobre la confianza que puedan generar los distintos testimonios, de no ser porque Bloom, astutamente se podría decir, invitó a otro biólogo evolutivo de su confianza a la reunión, el Dr. Sergei Pond, que pudo dar fe de la veracidad de lo contenido en las notas de Bloom. De su estudio se desprenden además otras conclusiones que socavaban la verosimilitud de la narrativa del pangolín, ya que permitía inferir que el virus ya llevaba cierto tiempo circulando, por lo que situar el paciente cero en el mercado húmedo de Wuhan era poco menos que aventurado. Posteriormente hemos tenido pruebas de presencia del virus en varios lugares alejados entre sí, en Italia en agosto de 2019, o en las aguas fecales de Barcelona en marzo de este mismo año, meses antes de la declaración oficial del primer caso de Covid-19 en Wuhan. 

Este suceso, que pasó ciertamente desapercibido para el gran público, no supuso en el momento la demolición inmediata de la teoría de la zoonosis, generalmente aceptada por la gran mayoría de medios de comunicación, pero si auguraba la lenta descomposición del relato a la que asistimos hoy. La posición monolítica de Daszak y Fauci iba sufriendo una erosión lenta y agónica, y como en un barco con el casco agujereado, su capacidad de achicar agua se fue mermando paulatinamente a lo largo de los últimos dos años. Consta, a título de ejemplo, que Daszak se aplicó con vehemencia en su intento de retirar un estudio publicado en el repositorio del NIH por el virólogo argentino Ariel Fernández, en el que se demostraba que el SARS-CoV2 era producto de un trabajo de ganancia de función, relacionado con el RaTG13 estudiado por Baric y Zhengli. Ello hacía más plausible una hipótesis, despreciada por los pretorianos de Fauci y Daszak, por la que presuntamente tres mineros fallecidos a consecuencia de una extraña neumonía allá por 2012 mientras realizaban labores de limpieza en la mina de Mojiang, sita en la provincia china de Yunnan, pudieron haber haber muerto precisamente a consecuencia de la infección por RaTG13. Desde entonces, el crédito de los valedores de la narrativa zoonótica no ha dejado de caer. Una de las primeras estocadas recibidas se la asestaría un hombre del sistema, que trabajase en el pasado para el Fondo Monetario Internacional encargado, entre otras misiones de relevancia del desguace de la Rusia post perestroika, Jeffrey Sachs. Sachs dirigía al grupo de expertos de la comisión de The Lancet encargada de estudiar el origen del SARS-CoV2 en China. Si bien del estudio se desprendía que tanto la vía de la zoonosis como la de la fuga seguían abiertas, Sachs se atrevió a afirmar públicamente que, a su juicio, la opción más probable era la fuga de laboratorio. Un duro golpe, sin duda. Ni más ni menos que The Lancet, el mismo medio en que vería la luz la carta organizada por Daszakpublicaba el 31 de mayo de 2022 un estudio firmado por varias decenas de científicos en el que se sentenciaba que las dos opciones, a saber, la teoría zoonótica y la de la fuga, debían permanecer abiertas. Ya no era una “teoría de la conspiración” sino una hipótesis plausible. 

Desde entonces, en un cuentagotas lento pero incesante, varias agencias y departamentos de la administración  de EEUU han ido apuntalando la opción de la fuga de laboratorio, hasta convertirse en la opción más probable a ojos de la opinión pública estadounidense, dejando a Daszak, Fauci y sus muchachos al pie de los caballos, sumidos en una crisis de descrédito creciente por la cual quizás alguno de ellos pueda acabar respondiendo penalmente. Primero fue el Departamento de Energía (DoE) allá por febrero de 2023, que señalaba la fuga como opción más probable. Luego se sumó el FBI (Oficina Federal de Inteligencia), apenas dos semanas más tarde. En septiembre de 2023, pocas semanas después de que Kristian Andersen compareciese frente al Subcomité para responder sobre las cuestiones que hemos narrado en este editorial, conocíamos por el testimonio de un agente de la CIA, que del grupo de siete agentes que investigaban el origen del COVID, sólo uno de ellos respaldaba la hipótesis de la zoonosis, por lo que a los seis restantes se les ofreció una compensación económica a cambio de modificar su posición al respecto. Al conocer esta información, el presidente del Subcomité, Brad Wenstrup, representante republicano por Ohio, ordenó a la CIA hacer públicos todos los informes, comunicaciones y listas de pagos relacionados con esta investigación. Quizás debido a la presión constante de algunos congresistas a título individual, o al peso de las múltiples FOIA que han ido cayendo como losas, en las últimas semanas hemos conocido que la posición tanto del FBI, como de la CIA con respecto del origen del SARS-CoV2, consiste en culpar a China del escape de laboratorio, responsabilizando a Daszak y a EcoHealth de llevar la investigación a los laboratorios de Wuhan. 

Sea como fuere, el villano Daszak parece ser el elegido para interpretar en papel de chivo expiatorio. Bien es cierto que ha comprado muchas papeletas, eso es innegable. Su declaración del pasado 1 de mayo ha supuesto el pistoletazo de salida del que será el frente pandémico por el que discurrirá parte del debate de las próximas elecciones previstas para noviembre. Por un lado, los demócratas no pueden permitir que los republicanos socaven su credibilidad a costa de este asunto, pero tampoco pueden permitir que se levante el velo del todo y que se conozcan todos los proyectos similares que se están financiando a través del programa PREDICT, en el que colaboran con la OMS y varios engendros filantrópicos globalistas, y que el hilo acabe llevando a la empresa de Hunter Biden, Metabiota, y sus biolaboratorios de Ucrania. Por otro, los republicanos, más activos en indagar pero con una acusada intención de revigorizar el concepto trumpista del “virus chino”

A Daszak se le hizo visiblemente cuesta arriba la declaración. Tres horas en las que negó, minimizó, descontextualizó y se remitió a futuros envíos de documentación. Lo que se conoce en el argot futbolístico como achicar balones. Además, como aperitivo, se hizo pública en un artículo de KatherineEban para Vanity Fairla declaración de Ralph Baric, el padre presunto de los trabajos de ganancia de función sobre el virus RaTG13, justo antes de que Daszak declarara. Es evidente que la coincidencia en los tiempos no es azarosa y responde a una clara estrategia de comunicación. En su declaración, Baric afirmaba haber avisado a Daszak de que los trabajos de Defuse no se podían realizar en un biolaboratorio de nivel de seguridad 2 (BSL-2), y que se precisaban de un BSL-3. Cierto es que en los borradores de Defuse, donde se podían leer los comentarios de los científicos que participaban en su redacción, consta un comentario en el que Baric advertía de que al DARPA no le iba a hacer ninguna gracia que el proyecto se desarrollase en un BSL-2, por mucho que se ahorrasen costes. En ese borrador, Daszak admitía que ciertos detalles, como los roles en la investigación, o incluso el lugar de realización, se podrían decidir cuando se consiguiese la subvención. En el Congreso, Daszak zanjó la cuestión arguyendo que no hay caso ya que el proyecto finalmente nunca se realizó, cuestión que se ha demostrado falsa. La otra preocupación de especial relevancia para varios miembros del Subcomité, es la relativa al hecho de que EcoHealth hubiese entregado las memorias de gasto de las subvenciones correspondientes a dos años concretos de ejercicio, el cuarto y el quinto. Según Daszak, se intentó aportar la documentación al servidor, pero el intento fue rechazado por el sistema informático. Sin duda, una excusa infantil de perro que se come los deberes. Y es que, aunque resulte difícil de creer, EcoHealth ha seguido recibiendo dinero del NIH hasta 2023

Otro candidato a cargar con parte del mochuelo es Anthony Fauci, acosado del mismo modo por solicitudes de libertad de información (FOIA) diversas, con todas sus comunicaciones intervenidas y con el cerco estrechándose en torno a sus colaboradores directos, su factotum en el NIH, el Dr. Francis Collins, y uno de sus asesores, el Dr. David Morens, que a mayor abundamiento, ha sido citado a declarar el día 22 de mayo para responder, entre otras cuestiones, sobre los emails que se cruzó con Daszak en los que sugirió utilizar el correo personal en sus comunicaciones para así evitar las FOIA. Las noticias se agolpan y el tempo de la obra se acelera. En el momento en el que escribo estas líneas, el Subcomité emite una citación para que declare Jeffrey Sturchio, un asesor de comunicación de Daszak, por presuntamente ayudarle a obstruir la investigación. La declaración de Fauci tendrá lugar el próximo día 3 de junio, y si bien es cierto que ver a Fauci declarar en el Congreso se nos hace ciertamente familiar, ésta promete ser singularmente cruenta, mucho más si cabe que todas las anteriores. 

En cualquier caso, no es momento de lanzar las campanas al vuelo. No animo en absoluto al lector de esta editorial a ser excesivamente optimista. Esta campaña no responde ni remotamente a una búsqueda de la verdad genuina, sino simple y llanamente a una política premeditada que cumpla la doble función de servir de control de daños por un lado, y de presionar al gobierno de China por el otro. Fuera del foco principal permanecen otras cuestiones, a saber, el Evento 201 de Gates y el World Economic Forum, las decenas de proyectos de ganancia de función que se siguen financiando, personajes como Peter Hotez, Jeremy Farrar, el propio Secretario General de la OMS y la relación de esta trama con la fabricación e inoculación masiva de vacunas y la estrategia del terror pandémico.

One Health (Una Sola Salud)

One Health (Una Sola Salud), inspira de cabo a rabo el Tratado de Pandemias y las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional (RSI) que estuvieron a punto de aprobarse en la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud [materializnándose, finalmente, en una pequeña, pero importante, modificación del RSI y un abandono temporal del tratado, que quedó en un borrador a tratar en un futuro]. Si bien Daszak y EcoHealth son parte importante de la estrategia One Health, como veremos en el próximo capítulo, ni remotamente son los únicos responsables.

Ganancia de Función y patentes

Si lo que se pretende es tener un conocimiento más exhaustivo del desarrollo histórico de la ganancia de función, resulta de muy recomendable lectura el libro del abogado y experto en patentes, David E. Martin, de título “ The Fauci COVID 19 Dossier en el que pormenoriza la evolución histórica del desarrollo de patentes alrededor de los proyectos de ganancia de función, creciendo de manera paralela a eso que se llama en el ámbito militar “guerra biológica”. Como era previsible al ser publicado, el libro de Martin fue tildado por los verificadores de hechos del régimen globalista como “teoría de la conspiración”. Sería ésta, sin duda, una “teoría de la conspiración” ciertamente peculiar, habida cuenta de que todos los elementos que demuestran su veracidad provienen de fuentes abiertas y públicas. Sólo se precisa seguir el rastro de patentes, estudios científicos, productos farmacéuticos y beneficios, para comprobar con los ojos propios la sospechosa coincidencia temporal de ciertos eventos. Sin ánimo de fusilar el libro de David E. Martin, un libro muy profuso en documentación, a modo de aperitivo, aportamos a este editorial una serie de enlaces que permitan al lector establecer algunos hitos importantes. Entre sus actores principales, los ya conocidos, Fauci, Baric, Collins, en colaboración con agencias gubernamentales como el NIH o el NIAID. No por casualidad, el NIH cuenta en su haber con una larga lista de 138 patentes, cuyos beneficios económicos resultaban tan opacos que incluso el GAO (Oficina del Gobierno de Estados Unidos de Responsabilidadllegó a reclamar al NIH  que aportase datos sobre el destino y uso comercial de las patentes que pretendidamente habrían generado más de 2.000 millones de beneficios desde 1991 hasta 2019. El propio Fauci consta como dueño de varias patentes, registradas durante los años de su mandato, cuyos beneficios Fauci afirma haber donado a organizaciones de caridad, aunque no haya constancia documental que respalde tal afirmación.  

Entre las primeras patentes que llaman la atención de la larga lista que enumera el libro mencionado, se encuentra una patente propiedad de la empresa Pfizerregistrada con el número U.S. Patent 6,372,224, presentada en 1990, que describe una vacuna basada en aminoácidos para la proteína Spike de un coronavirus canino. Aquella vacuna nunca funcionó, una tónica persistente en los productos génicos de esta índole a lo largo de su historia. Nunca una vacuna contra un coronavirus había funcionado hasta la fecha, y nunca ha funcionado después. Esta patente coincide en el tiempo con la subvención nª AI 23946, concedida en 1986 por el NIAID de Anthony Fauci a la Universidad North Carolina Chapel Hill. Este proyecto dirigido por Ralph Baric, al que a estas alturas de narración huelga presentar, culminó en la patente  presentada en 2002 US7279327B2 , en la que se describía una técnica para “producir coronavirus recombinantes” de modo que estos fuesen “más infecciosos y tuvieran una replicación celular defectuosa”. Derivada del mismo proyecto, en el año 2001, Baric recibió otra subvención del NIAID para un proyecto que habría arrancado un año antes bajo el título Genética inversa con una construcción de ADNc infeccioso de coronavirus. La patente mencionada anteriormente fue presentada el 19 de abril de 2002, pocos meses antes del primer caso notificado del virus SARS. En 2003, con la pandemia de SARS ya declarada, se aislaba el virus, dando lugar a la patente nº US7220852B1  propiedad de los CDC de Atlanta, que abría la veda para la explotación industrial de contramedidas médicas, así como test diagnósticos. Y como muestra, un botón: desde 1999 a nuestros días, la industria farmacéutica ha registrado más de 5.100 patentes relacionadas con fármacos para el SARS y sus variantes. Sin duda, un suculento negocio. Motores y tormentas.  

Como podrá comprobar el lector, la cadena de coincidencias no es en absoluto excepcional. De hecho, se puede afirmar sin ningún género de duda que todas las pandemias declaradas en las últimas dos décadas (SARS, MERS, H1N1) han venido precedidas de investigaciones en ganancia de función sobre virus casi idénticos a los descritos en los sucesivos brotes. Desmerece, sin duda alguna, el poder profético que se ha otorgado a algunos simulacros pandémicos, como el famoso Evento 201 organizado por el World Economic Forum y la Fundación Bill y Melinda Gates allá por septiembre de 2019, en el que se vaticinaba un brote pandémico de un coronavirus similar al SARS. Hablaremos de ello en el próximo capítulo. Como hemos señalado anteriormente, no es objeto de este editorial hacer un análisis exhaustivo del discurrir de la industria de creación de virus quimera y la consiguiente producción de vacunas contra esos virus, paralelamente a eso que se ha dado en llamar “Guerra biológica”. Para el lector avezado y con tiempo de investigar, comparto aquí este informe de la Oficina Contra la Proliferación del Ejército del Aire de EEUU, dependiente del Departamento de Defensa, en el que podrá leer cómo se han ido desarrollando de la mano las industrias de la guerra biológica y la de las vacunas. Mención especial merece la reseña que se hace del uso de las terapias génicas como arma en la página 19 del informe.  

Ya ilustrada someramente la relación de causalidad entre los trabajos de ganancia de función y algunas de las pandemias declaradas en este siglo, volvemos a poner el foco sobre los antecedentes de la pandemia del SARS-CoV 2.

Algunos de sus actores principales (Fauci, Baric) siguieron involucrados en este tipo de experimentos. Sin embargo, nuevos jugadores entraron en la partida. Nos referimos, claro está, a los Daszak, Farrar, Zheng Li, Wang, Andersen, etc.. , que supieron percibir las necesidades del incipiente mercado de las “catástrofes” biológicas, y aprendieron a desviar ingentes cantidades de dinero público hacia este mercado emergente. Sólo había que saber contárselo bien a los inversores, en este caso, el Estado. Sirva de ejemplo este artículo de 2013, firmado por varios ilustres de la narrativa pandémica, a saber, Aleksei Chmura, de EcoHealth, Linfa Wang del WIV, Ben Hu (al que algunos investigadores atribuyen ser el paciente cero de la pandemia del SARS-CoV 2), dirigidos por Daszak y Zheng Li, en el que se afirmaba haber conseguido el “aislamiento y caracterización de un coronavirus similar al SARS de murciélago que utiliza el receptor ACE2”. Este artículo, como otros del mismo jaez, reportaban en aquellos momentos suculentas subvenciones para seguir con las investigaciones de ganancia de función, disfrazadas de búsqueda de coronavirus con potencial de salto zoonótico. Dos años después de esa publicación, Zheng Li y Ralph Baric presentaban este estudio, en el que se alertaba de la existencia de colonias de coronavirus en las cuevas de murciélagos de Yunnan con potencial de infección en humanos. Como ya comentamos en el capítulo anterior, la filtración del Proyecto Defuse demostraría que el potencial para infectar a humanos del SARS-CoV2 conectaba precisamente estos hallazgos con los trabajos de ganancia de función, ese sitio de corte de furina insertado entre S1 y S2 que permitía al virus penetrar en el núcleo de la célula a través de sus receptores ACE2 y replicarse, de modo similar al que se describe en este estudio, del cual extractamos una porción de su tenor literal que creemos habla por sí solo:  “(…)Utilizando el sistema de genética inversa del SARS-CoV2, generamos y caracterizamos un virus quimérico que expresa la spike del coronavirus de murciélago SHC014 en una columna vertebral del SARS-CoV adaptada a un ratón. Los resultados indican que los virus del grupo 2b que codifican el pico SHC014 en una columna vertebral de tipo salvaje pueden utilizar de manera eficiente múltiples ortólogos de la enzima convertidora de angiotensina II (ACE2) humana del receptor del SARS, replicarse eficientemente en células primarias de las vías respiratorias humanas y alcanzar títulos in vitro equivalentes a los epidémicos. cepas de SARS-CoV. Además, los experimentos in vivo demuestran la replicación del virus quimérico en el pulmón del ratón con una patogénesis notable (…)  

No conviene olvidar que este estudio se desarrollaba estando todavía vigente la moratoria que pesaba sobre la financiación de los proyectos de ganancia de función decretada por la Administración Obama. Sin embargo, este alarmante estudio venía firmado, a título de investigador principal, por Ralph Baric, profesor de North Carolina Chapel Hill, beneficiario habitual de grandes sumas de dinero de diferentes agencias gubernamentales. Como hemos podido saber en las últimas semanas, la subvención concedida en 2014 a EcoHealth gozaba de exención, por haber sido ésta concedida antes de decretarse la moratoria. Los trabajos siguieron de manera ininterrumpida hasta que en 2017, se derogó la moratoria, por lo que se volvieron a financiar este tipo de proyectos con dinero público. Sin embargo, la respuesta al estudio de Baric no se hizo esperar, ilustrando elocuentemente el agrio debate que tenía lugar al hilo de estos experimentos en el seno de la comunidad científica. Un artículo de un editor de la revista Nature metía el dedo en la llaga del estudio de Baric, consultando a varios expertos en la materia que manifestaban sus reservas, cuando no su total desaprobación, sobre este tipo de investigaciones. 

“El único impacto de este trabajo es la creación, en un laboratorio, de un nuevo riesgo no natural”

De esta manera tan contundente se expresaba en el citado artículo el profesor de Bioquímica de la Universidad de Rutgers, Richard Ebright. Pocos años después, Ebright, junto con Bryce Nickels, compañero en Rutgers, protagonizaría un violento cruce de acusaciones que ha llegado coleando a nuestros días, precisamente con los autores del Proximal Origin,Andersen y compañía, al hilo de su estrategia de encubrimiento de la fuga de laboratorio.  

Y de nuevo, las casualidades hacían su acto de aparición estelar. El 2016 además es un año especialmente prolífico en este sentido. Este año, el 14 de marzo, ve la luz este paper firmado por Baric y Zheng Li, cuyo título, tan elocuente como ominoso, reza del siguiente modo: WIV1-CoV similar al SARS listo para emerger en humanos. Nótese que el virus “listo para emerger” lleva el nombre del Instituto de Virología de Wuhan. Muy lógico, considerando que era allí donde se desarrollaba el virus quimera a partir del cual se hacían los experimentos in vivo que permitían inferir la posibilidad del salto zoonótico. Sin embargo, según el paper, quedaba una pequeña cuestión sin resolver. Un incómodo cabo suelto que ha dado lugar a toda clase de esfuerzos y escorzos intelectuales posteriores para justificar la zoonosis. El virus, según afirmaba el paper, tenía una capacidad “limitada” de infectar a humanos, y para que el virus pudiese saltar definitivamente con potencial para crear una pandemia, se precisaba de un hospedador intermedio con mayor coincidencia genómica con los humanos que el murciélago. Es aquí donde entran en escena pangolines y perros mapache, que trufaron tanto el Proximal Origin de Andersen como el posterior intento a la desesperada de revestir la narrativa zoonótica de aspecto científico, dirigido por Edward Holmes, cuyo contenido fue filtrado a The Atlantic antes siquiera de que el paper, en el que se pretendió sustanciar la panoplia de especulaciones sobre perros mapache en el mercado de Wuhan, viera la luz. Un notable esfuerzo narrativo sin duda, en que se confunden deliberadamente los conceptos de “indicio” y “evidencia”, ya que evidencias, lo que se dice evidencias, no hay. 

También en 2016, apenas dos semanas después de que el paper de Baric y Zheng Li fuese publicado, tendría lugar el registro de esta patente de Moderna, cuya secuencia de proteínas encajaba sospechosamente con la secuencia del virus, precisamente en el sitio de corte de furina que presuntamente habilitaba al virus a introducirse en el núcleo de la célula y comenzar a replicarse. Ya saben ustedes, cosas del azar, que es caprichoso. Stephane Bancél, a la sazón CEO De Moderna y extrabajador de la farmacéutica BioMérieuxcontestaba de esta manera al ser preguntado por esta “coincidencia”. Ya ven ustedes. Al CEO de Moderna no le resultaba en absoluto ajena la posibilidad de la fuga de laboratorio. Y es que Bancél es, a nuestro juicio, uno de los grandes tapados de esta historia, quedando al margen de los focos de manera frecuente, pese a su llamativa trayectoria y sus sorprendentes declaraciones. Como hemos señalado, este científico francés, había formado parte de la compañía BioMérieux, con un papel clave en la puesta en funcionamiento de varios laboratorios en el Instituto de Virología de Wuhan. Precisamente cambio de trabajo en el año 2013, cuando la compañía Moderna recibió una subvención de la Agencia de Estudios Avanzados de Defensa (DARPA), precisamente para desarrollar terapias génicas basadas en la tecnología ARNm, justo dos semanas antes de que Daszak y Zheng Li publicasen el hallazgo de las colonias de coronavirus con potencial de salto zoonótico. Como pueden comprobar los lectores, los tiempos tienden a coincidir. Con toda seguridad se preguntarán ustedes sobre la pertinencia de que una compañía farmacéutica desarrolle terapias génicas por encargo del Departamento de Defensa. Para contestar a esa pregunta, les remito al informe sobre guerra biológica compartido con anterioridad, en el que se detalla como los pretendidos avances biomédicos discurren en esa difusa frontera entre lo militar y lo médico. Ya saben ustedes, los motores y las tormentas.   

Quizás sea también fruto de la casualidad, o de la maledicencia de los amigos de las teorías de la conspiración que tanto se afanan en unir los puntos, pero estas declaraciones de Bancél en el Foro de Davos de 2022 sobre la capacidad de su empresa en la producción de vacunas en 2019 llaman mucho la atención. No añadiremos nada más para no condicionar a los lectores. Así lo expresaba Bancél

Entonces la gran noticia versus 2020, donde estamos hoy, es que tenemos capacidad de fabricación. Como sabe Seth, cuando ocurrió la pandemia, Moderna había fabricado 100.000 dosis en 2019 para todo el año. Y recuerdo que entré en la oficina de fabricación y dije: ‘¿Qué tal si fabricamos mil millones de dosis el año que viene? Y me miran un poco raro y dicen: “¿Qué?” Y yo digo: ‘Sí, necesitamos fabricar mil millones de dosis el año que viene, habrá una pandemia”.

¿El señor Bancél sabía que habría una pandemia en febrero de 2019, diez meses antes de la declaración oficial del primer caso? Si bien es cierto que el CEO de Moderna no habla de una pandemia de coronavirus, lo cierto es que cuanto más se indaga en los hechos que conforman esta truculenta historia, más certeza se tiene de que las casualidades, o bien no existen, o bien son en realidad causalidades. Sea como fuere, la patente de Moderna ya mencionada, dio lugar a esta otra registrada poco después, que sería la base de la vacuna de ARNm ganadora de la Operación Warp Speed, organizada en mayo de 2020 por la Administración Trump, con el objeto de elegir las mejores candidatas a vacunas contra el COVID-19. A mayor abundamiento, la base tecnológica que sustentó la patente es la misma que la de la vacuna de Pfizer, lo que ha dado lugar a una demanda de Moderna contra Pfizer, precisamente por vulneración de la propiedad intelectual. ¿De dónde sacas tus vacunas? Del mismo lugar del que sacas las pandemias. 

A estas alturas, la mitología contenida en el clásico imperecedero “El Señor de los Anillos” del filólogo británico J.R.R. Tolkien, ha pasado a conformar la cosmovisión posmoderna de prácticamente tres generaciones de occidentales, gracias, en gran medida, a la versión cinematográfica dirigida magistralmente por Peter Jackson. El libro narra la epopeya de un humilde hobbit, llamado a liderar a un grupo heterogéneo de hombres, enanos y elfos en su misión trascendental de llevar el anillo único de poder hasta el volcán del Monte del Destino de Orodruin, en las oscuras profundidades de Mordor, y allí destruir el anillo en el mismo fuego que lo viese nacer. El anillo, forjado por el Señor Oscuro Sauron para su uso y maligno disfrute, tenía la capacidad de subyugar a los habitantes de la Tierra Media. Su creación tenía una inscripción en lengua negra que rezaba como sigue: “Un Anillo para gobernarlos a todos. Un Anillo para encontrarlos, Un Anillo para atraerlos a todos y atarlos a las tinieblas”. El anillo, que le fue arrebatado por Isildur, dotaba a quien lo poseyera de ciertas capacidades que lo hacían extremadamente atractivo. Entre otros superpoderes, dotaba de invisibilidad al que se lo pusiese, prolongaba su vida o permitía conservar la apariencia. Sin embargo, el anillo tenía sus contraindicaciones. No tenerlo habiéndolo tenido podría hacer enloquecer a cualquiera infradotado moralmente, despertando sus más bajos instintos, dominados por el terror, y además, el don de la invisibilidad no era más que el señuelo por el cual Sauron podía localizar el anillo y tratar de atraerlo hacia sí. Quizás haya lectores de este editorial, aquellos que estén más familiarizados con la epopeya de Frodo y su compañía del anillo, a los que les resulte sencillo encajar la analogía pretendida. A los que todavía no la vislumbren, quizás en los próximos párrafos la puedan ver algo más nítida.  

Tratado de Pandemias y las más de 300 enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional (RSI)

Nos ponemos pues el traje de faena y empezamos a desentrañar lo contenido tanto en el Tratado de Pandemias, que finalmente no será aprobado en esta ocasión, como en las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional (RSI). No conviene lanzar las campanas al vuelo ni mostrar excesiva alegría porque el Tratado no salga adelante, ya que muchas de las pretensiones iniciales del Tratado pretenden ser validadas por la vía del Reglamento. Obviamos en este análisis todo el tortuoso proceso de borradores y enmiendas que ha tenido lugar a lo largo de los dos últimos años. Si tienen interés en conocer los cambios que se han ido sucediendo desde el primer hasta este último y definitivo borrador que se pretendía votar a finales de mayo, les remito a alguno de los programas que hemos dedicado en Grupo de Control, o alguna de las entrevistas que realizamos a Cristina Armas, abogada canaria que, a nuestro juicio, es quien con mayor rigor jurídico ha estudiado este asunto en España. Con respecto a los cambios en el texto, existe una clave fundamental para entender la estrategia de la OMS. En lo que supone una clara maniobra de trilerismo legislativo y en orden a colmar sus pretensiones iniciales, muchos de los artículos del primer texto pandémico simplemente han abandonado su lugar original, para acabar conformando el paquete de más de 300 enmiendas propuestas al Reglamento Sanitario Internacional (RSI). Porque, sí, han leído bien, se votaron más de 300 enmiendas al RSI a la vez que se votó el Tratado. Al fin y al cabo, votar un Tratado implicaría un tortuoso camino de aprobación y debate en las distintas cámaras legislativas de los diferentes estados, no siendo así en el caso del novado reglamento, cuya aprobación tendría efecto jurídico vinculante desde el mismo momento de ser aprobado. Aquí un somero resumen de los puntos, a nuestro juicio, más relevantes:    

El Tratado sobre Pandemias se aplicaría todo el tiempo, no sólo durante las pandemias. Lo pueden constatar leyendo el  artículo 2 del Tratado. El Tratado sólo contempla dos escenarios, periodo de pandemia y periodo interpandemias, lo que supone el fin de la normalidad tal y como la concebíamos. Al final, resultó que aquello de la nueva normalidad consistía en esto, en vivir en un estado permanente de incertidumbre, que propicie la anuencia de los ciudadanos, permanente expectantes al nuevo patógeno destinado a dotar de contenido a ese engendro conceptual llamado “Enfermedad X”, del que hablaremos más adelante. Por fortuna, en esta ocasión este artículo en concreto, no verá la luz finalmente.  

La introducción del concepto “Una Sola Salud” (One Health), lo que supone capacidad para ejercer control sobre la salud de las personas, los animales y los ecosistemas. Un Sola Salud para gobernarlos a todos. Lo pueden leer en los artículos 1 y 5 del Tratado. Este es, a nuestro juicio, el concepto más preocupante de todos, la clave de bóveda de toda esta estructura de colusión pornográfica entre el cártel farmacéutico y los estados. Este asunto, que entronca directamente con todo lo expuesto en los anteriores capítulos de este editorial sobre ganancia de función y la industria de las pandemias, será objeto de análisis en un apartado propio de este editorial. Este aspecto no se verá refrendado de momento, aunque seguirá inspirando las líneas de trabajo de la OMS.

No sería necesario que una emergencia de salud pública sea real, bastará con que sea posible. El Director General de la OMS tendrá autonomía para declarar una emergencia de salud pública “potencial”. Llama la atención el uso del lenguaje, con palabras como “probable” o “riesgo para la salud pública. Ello incluye posibles emergencias climáticas, en clara inspiración One Health. Lo pueden encontrar en el RSI, y no en el Tratado, en los artículos 1 (léase la definición de “emergencia pandémica” y “riesgo para la salud pública”), 2, 5 y anexos 1, 12 y 49. 

Los Estados verían su opinión limitada sobre una emergencia sanitaria declarada por la OMS, incluso si esta ocurre dentro de sus fronteras. Esto implica una evidente e intolerable pérdida de soberanía. Suma y sigue. Lo pueden leer en los artículos del RSI nº 1, 12, 17, 42, 48, 49, 50. 

Los Estados tendrán que ajustar su legislación interna a lo contenido en las enmiendas al RSI, y el Tratado, lo que implica la creación de una Autoridad Nacional para el RSI, una suerte de ministro del gobierno de la OMS en el Ministerio de Sanidad, encargado de hacer ese ajuste legislativo y de velar por el buen hacer de los gobernantes en todo lo que se refiere a las competencias que la OMS pretende arrogarse para sí en esta estrategia bífida de Tratado y Reglamento. Lo pueden encontrar en el RSI, en los artículos Artículo 1 (definición de “Autoridad Nacional del RSI), 4, 15, 16, 42, 54, 59.3, y en el Tratado en el art.3.

La OMS tendrá el poder de ordenar a España adoptar confinamientos, restricciones de viajes, exámenes médicos forzosos y vacunas obligatorias, así como aislamientos y cuarentenas. Ya saben de sobra los lectores que todas esas medidas que han demostrado nula eficacia en términos de Salud Pública, que resultan a todas luces nocivas y que sólo sirven para crear más desigualdad, por no mencionar los efectos adversos producto de las medidas, condenados a permanecer apócrifos, sepultados bajo toneladas de  propaganda. Pueden leerlo en el RSI, en sus artículos 1, 15, 16, 17, 18, 23, 24, 42, 49.

Vuelven los pasaportes vacunales, los famosos green pass, aunque cambian su nombre. Los “documentos sanitarios”, son el eufemismo usado en esta ocasión para definir “un sistema global de certificados sanitarios relacionados con pruebas, vacunación, profilaxis y recuperación”. Unos pasaportes vacunales que, por cierto, no demostraron ser útiles en absoluto en lo que a contener la propagación de la pandemia se refiere. Sólo hay que ir a la hemeroteca y comprobar que, fue precisamente cuando se decretaron estos pasaportes cuando la mayor tasa de contagio se conoció en Europa. Llámenlo Omicron, si gustan. Al fin y a la postre, los medios de intoxicación tuvieron que reconocer que no se trataba de una medida de salud pública sino simple y llanamente una medida dirigida a coaccionar a la población, en virtud de la cual pretendidamente mejorar la cobertura vacunal de los productos experimentales de ARNm, conculcando a su paso varios derechos constitucionalmente amparados y segregando a la población por estatus vacunal. Una medida que recordaba peligrosamente a medidas de corte similar tomadas durante los años de la Alemania nazi, cuando uno de los argumentos utilizados para justificar el hacinamiento de los judíos en ghettos, consistía precisamente en la atribución falsa de que este colectivo transmitía enfermedades, del mismo modo que se acusó recientemente a los no vacunados de transmitir el SARS-CoV 2. Más tarde, supimos de boca de Janine Small, una trabajadora de Pfizer que fue enviada a declarar en la Comisión COVID del Parlamento Europeo en sustitución de su CEO, Albert Bourla, que sus productos ARNm nunca fueron diseñados para prevenir la transmisión, lo que despojaba de todo sentido la medida, máxime cuando ya por aquel entonces había quedado demostrado que los vacunados contagiaban del mismo modo que los no vacunados. Sea como fuere, los medios de intoxicación de masas tuvieron que buscar otros argumentos para justificar la medida, como que el pasaporte mejoraba el consumo y elevaba el PIB, ya que los vacunados se sentían más seguros y eso estimulaba la economía. Vivir para ver. Todo lo referente a esta cuestión lo pueden encontrar en el RSI, en los artículos 18, 23, 24, 27, 31, 32, 35, 36 y 44 y en los anexos 6 y 8.  También en este sentido de control de coacción, la información médica personal deberá ser proporcionada a la OMS y ésta podrá revelarla a otros. Cabe preguntarse a quiénes, aunque nos lo podemos imaginarLo pueden encontrar en el RSI, en los artículos 1 (véase el concepto “vigilancia”), 5 y 45, y en el Tratado, artículo 4.

La OMS podrá ejercer control de la información, restringir y controlar la libertad de expresión en redes sociales, controlar la desinformación y mala información, controlar la investigación y el desarrollo y censurar el debate científico. Se entiende pues, la urgencia mostrada por los entes globalistas en aprobar el Tratado y el Reglamento, habida cuenta de las nuevas informaciones que se desprenden de la investigación dirigida por la Subcomisión del Congreso de los EEUU, que demuestran las constantes presiones ejercidas por la Administración Biden sobre las compañías de redes sociales, como Amazon, Meta, Twitter o Google. Paradójicamente, mientras en EEUU se conduce una investigación para destapar estas presiones, en Europa la censura de contenidos contrarios a las narrativas hegemónicas sufren una censura y persecución inéditas, en virtud de la Ley Europea de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés), por la cual estas empresas están obligadas a perseguir, censurar y desmonetizar todos aquellos contenidos que no resulten veraces al entramado de verificadores de hechos, articulados en torno a la matriz internacional Poynter Institute, instituido hoy en un auténtico poder jurisdiccional privado, en lo que supone a todas luces otra vulneración flagrante del artículo 20 de la Constitución Española, que prohíbe de manera expresa la censura previa, entendida ésta como la censura de contenidos sin que medie una autorización judicial. Este extremo, sin duda es merecedor de un artículo monográfico. Todo lo referente al control de la información que pretende la OMS lo pueden encontrar en el RSI, en el anexo 1 sobre Capacidades Básicas y en el Tratado, en los artículos 1.13, 9 y 18.  

Los fabricantes de vacunas quedan exonerados de toda responsabilidad ante los Estados, y serán éstos lo obligados a indemnizar a los afectados y establecer planes estatales de compensación. Esto implica conceder carta de naturaleza a una práctica que, por otro lado, ya venía ocurriendo de manera paralegal. En su momento, allá por octubre de 2022, en Grupo de Control analizábamos el contrato, por aquél entonces apócrifo, por el que la señora Von der Leyen habría comprometido con Pfizer sumas mareantes de dinero público a cambio de 10 dosis de producto por cada europeo, a razón de 20 euros la dosis aproximadamente. El texto de aquellos contratos ni siquiera pudo ser auditado por los propios parlamentarios, que se encontraron con un texto lleno de tachones. En un ejercicio de gran cinismo, por parte de la Comisión se arguyó que los tachones protegían pretendidos derechos de propiedad industrial. Con el tiempo supimos que esa exoneración de responsabilidad había sido la tónica general en todos los contratos firmados por la empresa Pfizer con todos los Estados con los que negociaron suministros de vacunas, justificados en la supuesta urgencia pandémica. El Tribunal de Cuentas Europeo, que afeó a Von Der Leyen esta opacidad y que no se hubiesen respetado los Reglamentos concernientes a la licitación pública de contratos de suministros, en un informe emitido en septiembre de 2022, reclamó que se hiciesen públicos los mensajes intercambiados entre Von Der Leyen y Bourla en el proceso de negociación, cuestión a la que Von Der Leyen respondió negativamente, afirmando que los había borrado. Este asunto sigue sub iudice, lo que no ha supuesto impedimento alguno para que la actual Presidenta de la Comisión Europea se presente a las elecciones europeas convocadas para el próximo junio, en las que Von der Leyen aspira a revalidar su cargo. Lo relativo a esta cuestión lo pueden leer en el Tratado, en su artículo 13.  

Y por último, La OMS exigirá a los estados miembros que recorran sus zonas rurales en busca de patógenos. Lo pueden ustedes leer en los artículos 5 y 46 del Tratado.Quizás ahora se entienda mejor el anuncio a bombo y platillo por parte de la Ministra de Ciencia e Innovación de la creación de un nuevo biolaboratorio donde estudiar “los patógenos más peligrosos”. A la vista de los hechos que ya hemos expuesto ampliamente, quizás no resulte la mejor idea.  Más adelante, en próximos capítulos de esta serie hablaremos de los accidentes de laboratorio, y de cómo se hace luz de gas sobre estos eventos para que no trasciendan a la opinión pública.  

One Health y PREDICT. La fábrica de pandemias. 

Quizás, para el gran público, la Iniciativa One Health resulte en cierta medida ignota y puede que incluso innovadora, pero es una iniciativa que ya lleva muchos años en desarrollo. Ahora simplemente asistimos a su materialización en un proyecto legislativo que obligue a los estados a cumplir con su agenda. Pero no conviene dejarse guiar por la apariencia, porque si hay algo en que el globalismo ha demostrado gran pericia, es precisamente en el uso del lenguaje elegido para imponer relatos. One Health, surge de las ideas de un reputado veterinario, el Dr. Calvin Schwabe, que acuñó el término “Una Medicina”, abogando por un enfoque unificado contra las zoonosis que utilizase tanto la medicina humana como la veterinaria, allá en el año 1964. Este movimiento fue lentamente tomando forma hasta que en septiembre de 2004, la Universidad John Rockefeller organizase un simposio en el que se articularon los conocidos como “12 Principios de Manhattan” (por el lugar en que se encuentra la Universidad Rockefeller), que darían lugar a la creación de la Comisión One HealthSegún su página web, de la que extraemos su tenor literal, sus objetivos declarados son “conectar’ a quienes trabajan para One Health en todo el mundo para facilitar las relaciones y colaboraciones sinérgicas necesarias en todos los niveles académicos, gubernamentales, políticos y de investigación. Crear oportunidades para que las disciplinas e instituciones relacionadas con la salud humana, animal, vegetal y de los ecosistemas trabajen juntas en colaboraciones transformadoras, y educar al público sobre la importancia y la necesidad urgente del enfoque One Health. Esto incluye profesionales establecidos y estudiantes de todas las disciplinas (desde Antropología hasta Diseño Arquitectónico, Biología/Química, Científicos de los Alimentos, Medicina, Psicología, Sociología, Zoología, etc.), sectores de producción agrícola y alimentaria, proveedores de atención médica de los ámbitos humano y animal, políticas. y los legisladores.”. Desde entonces, la iniciativa One Health se ha desarrollado ampliamente a lo largo y ancho del globo, instalándose efectivamente en más de 500 centros, repartidos entre universidades e instituciones de salud pública. 

El eco en todos los entes globalistas es notable, demostrando que se trata de una acción coordinada y liderada por ellos. Así se refiere a ello la página web oficial del World Economic Forum: 

La Organización Mundial de la Salud ha declarado dos emergencias de salud pública de importancia internacional en tres años y está instando a los países a adoptar el enfoque Una Salud. El enfoque One Health integra modelos predictivos y vigilancia utilizados en el control de enfermedades y el cambio climático para combatir las enfermedades infecciosas”. 

Análogamente, el Banco Mundial expresa la derivada económica de la Iniciativa One Health, que abrazan de manera entusiasta en los siguientes términos:  

“(…)Hay argumentos económicos sólidos a favor de One Health: el costo de la prevención es moderado en comparación con el costo de gestionar y responder a las pandemias. La estimación global del Banco Mundial de los costos de prevención guiada por los principios de Una Salud oscila entre 10.300 y 11.500 millones de dólares al año, en comparación con el costo de gestionar las pandemias que, según la estimación reciente del Grupo de Trabajo Conjunto sobre Finanzas y Salud del G20, asciende a unos 30,1 mil millones de dólares por año. Nunca ha habido un mejor momento para adoptar One Health (…)”  

La ambición indisimulada de la Iniciativa One Health es la de tener potestad sobre el desarrollo combinado de políticas en tres ámbitos fundamentales. En primer lugar, el ámbito del control de enfermedades, en el que entra en juego el control de enfermedades emergentes con potencial de salto zoonótico, coordinado en torno un programa llamado PREDICT del que hablaremos más adelante en este capítulo. Por otro lado, el control de políticas relacionadas con el clima, lo que abre una espita importante en virtud de la cual se empieza a coquetear con el concepto de confinamientos climáticos, por no mencionar la relación evidente con las políticas energéticas y de control de la calidad del aire. Por último, también se pretende tener control sobre la política alimentaria y agrícola, cuyos primeros coletazos hemos podido observar a colación de la nueva ley Europea de Restauración de la Naturaleza y sus consecuencias sobre las explotaciones agrícolas y ganaderas de nuestro país. En diciembre del 21, en pleno shock pandémico, se firmaba un texto conjunto entre estas 4 organizaciones, a saber, la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización Mundial para la Salud Animal (OIE), la OMS y el Programa para el Medio Ambiente de las Naciones Unidas (UNEP), con el objeto de definir conjuntamente la iniciativa One Health. Recogemos parte de su tenor literal a continuación: 

“One Health es un enfoque integrado y unificador que tiene como objetivo equilibrar y optimizar de manera sostenible la salud de las personas, los animales y los ecosistemas. Reconoce que la salud de los seres humanos, los animales domésticos y salvajes, las plantas y el medio ambiente en general (incluidos los ecosistemas) están estrechamente vinculados y son interdependientes. El enfoque moviliza múltiples sectores, disciplinas y comunidades en distintos niveles de la sociedad para trabajar juntos para fomentar el bienestar y abordar las amenazas a la salud y los ecosistemas, al tiempo que aborda la necesidad colectiva de agua, energía y aire limpios, alimentos seguros y nutritivos, tomando medidas. sobre el cambio climático y contribuir al desarrollo sostenible”. 

A estas alturas de narración queda bastante clara la intención de estas organizaciones globalistas, en principio dependientes de las Naciones Unidas, de desarrollar políticas conjuntas con los estados en el sentido expresado. A priori podría parecer un gran esfuerzo cooperativo entre estados que genuinamente quieren mejorar la vida de la gente. Nada más lejos de la realidad. Son muchas las fundaciones filantrópicas que hacen suya la Iniciativa One Health, y simplemente pretender enumerarlas todas derivaría en un ejercicio absurdo de redundancia, ya que los argumentos exhibidos son literalmente un calco de unas a otras. Sirva de ejemplo lo contenido en la página web de la Fundación Bill y Melinda Gates, sin lugar a dudas la fundación que hoy día ejerce el mayor liderazgo y poder de influencia en el ámbito médico, climático y alimentario, ocupando el puesto que otrora ostentaba la Fundación Rockefeller, no precisamente porque la Rockefeller haya delegado su labor histórica de condicionar todo lo referente a la investigación farmacéutica, sino simplemente porque el poder desplegado por Gates no tiene precedentes. En el próximo capítulo de esta serie trataremos todo lo referente a la financiación del entramado por el que, a través de la OMS,  se ejerce la necesaria presión política sobre los estados para colmar las ambiciones globalistas. En definitiva, un modelo de conflicto de interés, en el que los filántropos presuntos esconden tras de sus aparentes buenas intenciones, miles de millones en inversiones en materia energética, en lo que al desarrollo de transgénicos se refiere o en la fabricación de vacunas y medicamentos. 

PREDICT y la Enfermedad X  

Quizás algún lector se haya maliciado en algún momento cómo es posible que grandes prebostes del capitalismo filantrópico como Bill Gates, entre muchos otros, a coro con la escolanía de politicastros que pulula la OMS, sean capaces de predecir con tal precisión y lujo de detalles explosiones pandémicas, como ya ocurriese con el infausto Evento 201 . El pasado febrero, durante el aquelarre anual de la plutocracia filantrópica global en Davos, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Gebreyesus, presentaba en sociedad eso que se ha dado en llamar Enfermedad XLa Enfermedad X pretende ser un nombre hipotético, un espacio conceptual a priori vacío, sobre el que colocar el patógeno que más posibilidades tiene de provocar una “emergencia pandémica”. Nótense las comillas, estratégicamente colocadas para ajustarse en todo lo que sea posible al lenguaje utilizado por la OMS y sus “socios”. Sin embargo, pese a tratarse de un patógeno hipotético, ya hay laboratorios creados ad hoc para diseñar fármacos que puedan paliar la “emergencia pandémica” hipotética que aseguran ocurrirá más pronto que tarde. ¿Y cómo es posible que se estén diseñando fármacos para un patógeno que todavía no existe? Quizás algunos lectores, en alguno de los capítulos precedentes de esta serie, habrán encontrado la referencia de un programa llamado PREDICT. Este programa es la piedra filosofal de todo el modelo One Health que permite al globalismo prepararse para la próxima pandemia. Pero no se lo contaré yo, sino sus propios protagonistas. 

Según la página web de PREDICT, contenida en la página web de la Universidad California Davis (UC Davis), PREDICT es un proyecto del programa Amenazas Pandémicas Emergentes (EPT) de USAID, se inició en 2009 para fortalecer la capacidad global para la detección de virus con potencial pandémico que pueden moverse entre animales y personas. PREDICT ha hecho contribuciones significativas al fortalecimiento de la vigilancia global y las capacidades de diagnóstico de laboratorio para virus conocidos y recientemente descubiertos dentro de varios grupos de virus importantes, como los filovirus (incluidos los ebolavirus), los virus de la influenza, los paramixovirus y los coronavirus.” 

Sobre las actividades de PREDICT, la página de UC Davis nos cuenta que las actividades de PREDICT apoyaron la preparación para las amenazas pandémicas emergentes y la Agenda de Seguridad Sanitaria Mundial, principalmente en África y Asia. Una década después, más de 30 países de todo el mundo cuentan con sistemas más sólidos para detectar, identificar, prevenir y responder de forma segura a las amenazas virales. PREDICT inició One Health Surveillance, un enfoque colaborativo transdisciplinario para comprender el riesgo de enfermedades infecciosas en la interfaz animal-humano. La fuerza laboral capacitada por PREDICT, que incluye especialistas en enfermedades zoonóticas y científicos de laboratorio en más de 60 laboratorios nacionales, universitarios y asociados, es uno de losmejores recursos de respuesta para ayudar con la detección y respuesta seguras al COVID-19 y otras amenazas biológicas emergentes”.  PREDICT, siempre según los propios datos aportados en su página web, cuenta con 6.800 personas capacitadas para One Health Workforce en más de 30 países y 60 sistemas de laboratorio mejorados con capacidades bioseguras de detección de enfermedades zoonóticas”. 

Quizás, el hecho de que PREDICT y One Health muestren semejante unidad de acción, llegando a ser indistinguibles, resulte al lector preocupante, en virtud de lo leído hasta ahora en esta investigación. Y no es para menos. La lista de “socios” de PREDICT tampoco permite albergar ninguna tranquilidad. Según su web, PREDICT está dirigido por UC Davis One Health Institute y sus socios principales incluyen agencias como USAID, la OMS, FAO, EcoHealth Alliance, Metabiota, Wildlife Conservation Society, el Instituto Smithsonian y Labyrinth Global Health.”. Sobre EcoHealth hemos hablado largo y tendido, aunque a efectos de mejorar la percepción del lector de su relación con One Health, echaremos un vistazo a su página web. Aquí pueden ver algunos de los “socios” declarados de EcoHealth, entre los que se encuentran varias multinacionales farmacéuticas como J&J, agencias gubernamentales como el NIH o los CDC, agencias globales como la FAO (Organización de la ONU para los Alimentos y la Agricultura), prominentes universidades como Princeton, Johns Hopkins o la propia UC Davis, y otras organizaciones filantrópicas. No son todas las que están ni por supuesto están todas las que son, dado que, aunque no aparezcan en la lista de socios, muchas organizaciones filantrópicas como la Fundación Bill & Melinda Gates entre muchas otras conceden de manera recurrente generosas sumas de dinero a EcoHealth. 

Tampoco resulta excesivamente relajante conocer la implicación de USAID en el programa. Cualquiera que cuente con un mínimo conocimiento sobre USAID, la Agencia de Estados Unidos de Ayuda Internacional al Desarrollo, habrá leído sobre sus actividades de inteligencia en países de medio mundo. USAID es una agencia dependiente del Departamento de Estado, creada en 1961 por el Presidente J.F. Kennedy, cuya génesis responde precisamente, y de manera apenas disimulada, a un lavado de cara de las archiconocidas actividades de injerencia de la CIA. Para ello se instituyeron varias agencias a la par que el USAID, como la National Endowment for Democracy (NED), siempre bien escoltadas por organizaciones filantrópicas como el Albert Einstein Institute (AEI) o la sempiterna Open Society de George Soros, entre otras. A este entramado cooperativo entre agencias gubernamentales y organizaciones filantrópicas se le atribuyen actos de injerencia en muchos lugares del planeta, de manera singular en casi toda America Latina, como se recoge en este artículo, o el papel central jugado en ese fenómeno denominado revoluciones de colores ocurrido a principios de siglo en países de Europa Central, como Ucrania, Serbia o los países del Norte de África y Oriente Próximo como Túnez, Libia, Egipto o Siria. El asunto de las revoluciones de colores, y sus nefastas consecuencias en los países en que se han desarrollado, bien merecerían dedicar un libro entero. Cabe mencionar que USAID fue expulsada en 2012 de Ecuador por el entonces presidente Rafael Correa.

Entre los socios de PREDICT, al margen del consabido y elocuentemente documentado papel de EcoHealth Alliance, merecen especial mención las compañías Metabiota y Labyrinth Global Health, dos compañías con muchos vínculos entre sí como podremos comprobar en las próximas líneas. Sin ánimo de ser exhaustivos, Metabiota es una empresa, que en 2014 estaba participada en un 13,4% por Rosemont Seneca Technology Partners, empresa propiedad de Hunter Biden, ínclito vástago del Presidente de los Estados Unidos, Joseph Biden. Metabiota operaba en biolaboratorios en Ucrania en colaboración con una empresa de nombre Black & Veatch, y fueron señalados por el gobierno ruso precisamente por la peligrosidad que entrañaban esos biolaboratorios. Desde los fact-checkers asociados al oráculo de la prensa libre, el Poynter Institute, se negó por activa y por pasiva esta participación. Sin embargo, si una cosa buena tienen los Estados Unidos, es que son muy dados a registrar todos los pagos que se hacen a organismos asociados al gobierno. El dólar es el dólar. Gracias a ello, allá por marzo de 2023, nuestra investigación nos llevó a navegar por la página oficial de pagos del Gobierno de los EEUU, donde encontramos estos interesantes pagos registrados a una docena de laboratorios en Ucrania a través precisamente de Black & Veatch. Entre ellos, destacaba un pago concreto, de 369.511 dólares muy curioso, a través de Black & Veatch, una empresa de ingeniería también asidua a las subvenciones de diversas agencias gubernamentales. Este pago, con número de registro 19-6192, consta cargo de Labyrinth Global Health, en cuyo concepto de pago se señalaba un inquietante “SME MANUSCRIPT DOCUMENTATION AND COVID 19 RESEARCH”, fechado el 12 de noviembre de 2019. No deja de resultar llamativo este registro de pago, en el que se afirma haber estado investigando sobre el Covid-19, seis semanas antes de que el primer caso oficial de infección por SARS-CoV2 fuese notificado por las autoridades chinas. Otro ejemplo más de la asombrosa capacidad profética de la plutocracia filantrópica. Esta relación de la familia Biden con los biolaboratorios en Ucrania supone un punto de fricción política que, sin duda, va a resultar de gran influencia en el desarrollo de la campaña electoral estadounidense que tendrá lugar en noviembre de este año. Una fricción a la que se suma el escándalo que supuso que trascendiera a la opinión pública la relación de Hunter Biden con la empresa gasista Burisma Holding, propiedad del oligarca Igor Kolomoiski, a la sazón principal patrocinador del dictador ucraniano Zelensky, en la que Hunter Biden ejercía de factotum de los intereses de la familia durante los años en que Joe Biden era Vicepresidente de la Administración Obama. Para la posteridad quedan las palabras proferidas públicamente por Joe Biden, cuando jactanciosamente afirmaba haber conseguido que el Presidente Poroshenko (al que literalmente calificaba de “hijo de puta”) cesase fulminantemente al Fiscal General de Ucrania, Viktor Shokin, precisamente por abrir una investigación contra las actividades ilegales Hunter Biden en Burisma. 

El modelo de conflicto de interés se repite miméticamente en todo aquello en lo que el cartel filantrópico mete sus manos. Los reguladores, las políticas de salud de los estados, las políticas agrícolas, el gasto farmacéutico y un largo etcétera. Un evidente desvío de fondos públicos sistemático, en el que la plutocracia ha encontrado una mina de ingresos inacabable, y cuyos designios se pretenden dirigir, y no precisamente para nuestro bien. Y el primer paso es el control por la vía del Tratado: Un Tratado para gobernarlos a todos, como en el libro inmortal de Tolkien, que finalmente no resultará aprobado en esta ocasión, por falta de consenso y debido a las prisas con que se pretendió aprobar, aunque a falta de tratado, buenas resultan las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional. Veremos si estas consiguen aprobarlas. De nosotros depende tener la suficiente capacidad crítica y espíritu combativo para oponernos a estos abyectos intereses

Poco o nada sabemos de la posición concreta de España con respecto de ambos textos legislativos, más allá del cerrado apoyo que ha expresado nuestra ínclita Ministra de Sanidad. Aprovechaba la ministra sus escasos minutos de intervención en la Asamblea para expresar que España hará todo lo que esté en su mano para alcanzar cuanto antes un Acuerdo de Pandemias basado en el consenso, un Tratado que complemente un Reglamento Sanitario reforzado. Esta es la primera noticia que hemos podido conocer sobre la posición de España, y gracias a esta intervención conocimos por fin quién conforma el equipo negociador. Junto con la Ministra, observamos a un sonriente Fernando Simón, encantado de la oportunidad que se le concede. Como vemos, la infamia pandémica ha supuesto para algunos una interesante manera de promoción personal. A Fernando Simón no se le puede conceder ningún mérito durante la gestión pandémica. En principio minimizó el riesgo, con la célebre frase “serán dos o tres casos”. Una vez desatada la histeria, abandonó su posición de “prudencia” para abrazar exactamente la posición contraria, llegando a afirmar en cualquiera de sus millones ruedas de prensa que “la letalidad del virus era del 10%“.

Ausencia total de debate público

Antes de entrar en el objeto de nuestro análisis, no queremos pasar por alto alguna cuestión importante de la vergonzante intervención de nuestra Ministra en la Asamblea de la OMS. Se vanagloriaba nuestra ministra del “interés con que la sociedad civil había seguido el proceso en todas sus fases”. A nuestro juicio, que un cargo electo mienta de manera tan descarada en un foro como la Asamblea General de la OMS, debería ser susceptible de reproche penal. No es de recibo que una ministra falte de manera tan evidente a la verdad en representación de todos. No ha habido ningún “seguimiento de la sociedad civil”, ni nada que remotamente se parezca, y la ministra lo sabe, porque ha sido la responsable última del apagón informativo al respecto. Y debate, lo que se dice debate, no ha habido ninguno, al margen de la honrosa excepción que supone el debate publicado el pasado jueves 23 de mayo por La Clave Cultural, en el que nuestra compañera Bea Talegón, junto con la histórica comunista Ángeles Maestro, enfrentaron con gran rigor y firmeza las posiciones del oficialismo, encarnadas en Federico de Montalvo y Ángel Gil, a la sazón miembros del famoso Comité de Expertos el primero, y del Consejo Asesor de Vacunas el segundo. Un debate del que podemos inferir algunas cuestiones. 

En primer lugar, los representantes del oficialismo demostraron nulo compromiso con sus propias posiciones. Ni conocían el texto del tratado, ni conocían las enmiendas al Reglamento, nunca habían escuchado hablar de la ganancia de función ni de los experimentos financiados por EEUU en Wuhan. A mayor abundamiento, es que ni siquiera eran conscientes del proceso de investigación que se está llevando a término en la Subcomisión del Congreso de EEUU al hilo de estos experimentos y su investigación. Se limitaron a negar su mera existencia. Decía Hannah Arendt que si no existe un consenso mínimo sobre los hechos, difícilmente se podrá conformar una opinión pública propiamente dicha. Quizás cabría esperar algo más de todo un Presidente del Comité de Bioética, que es el cargo que ostentó Federico de Montalvo durante la pandemia. Sería deseable conocer una posición sobre la ganancia de función. Hay argumentos a favor de la ganancia de función, que yo desde luego no comparto, pero son argumentos al fin y al cabo, y cabría haber esperado que de Montalvo esgrimiese alguno. ¿Cómo se debate con alguien que directamente niega hechos ciertos y constatables? ¿Cómo se debate con alguien que etiqueta de “terraplanista” a quien sólo señala hechos probados? Un escenario al que nos hemos visto forzados como sociedad, que no merece el calificativo de debate público, entendiendo éste como un diálogo de contraposición de ideas y opiniones en virtud de hechos. Es ciertamente frustrante, y lo peor de todo es que ni siquiera cabe desear nada mejor. Este es el nivel, y esperar otra cosa no puede conducir más que a una misantropía melancólica de difícil salida. Por tanto, no, no ha habido “seguimiento de la sociedad civil”, ni nada remotamente parecido. Muy al contrario, lo que ha reinado sobre cualquier otra premisa es la opacidad, la ocultación, y por supuesto, como ya viene siendo habitual, la política de hechos consumados tan propia de estos tiempos que corren, en que se firman tratados sin mediar debate o se desvían miles de millones de dinero público por mera volición presidencial, para mayor gloria de dictadorzuelos liberticidas como Zelensky. Es el signo de los tiempos.  

La cúspide de la pirámide: Conflicto de interés en la OMS 

También permanece ajeno a la opinión pública el hecho que es objeto de este análisis. Es probable que la mayoría de los lectores quizás puedan considerar que la OMS es un organismo internacional de naturaleza pública dependiente de Naciones Unidas. Y sobre el papel se supone que así es. Pero como veremos a lo largo de este análisis, bajo ningún concepto se puede considerar semejante cosa.

Imagine el lector una pirámide de copas sobre la que se derrama champán, empezando en la cúspide, que al colmarse, deja fluir el líquido hacia capas inferiores. Esta teoría del “derrame” se suele usar para justificar que una reducción de tributos a las grandes fortunas, acaba por “derramar” mayores ingresos a las capas más bajas de una sociedad concreta.  Por analogía, podemos observar que este es precisamente el funcionamiento del sistema de salud pública global, en el que las farmacéuticas y el capitalismo filantrópico son los encargados de servir el champán que poco a poco va colmando las copas de los diferentes niveles en esta pirámide de salud pública, conformándose un modelo de conflicto de interés colosal . Y en la cúspide de la pirámide se encuentra la OMS, como brazo político de la plutocracia globalista.  

Si bien, la Constitución de la OMS señala a los Estados como los sujetos de derecho encargados de ratificar con su voto las actividades de la organización, lo cierto es que, en la práctica, hoy día este pretendido modo de funcionamiento ya no es más que una ilusión. Y ello deriva fundamentalmente de su modelo de financiación. El propio Tedros Adhanom, Director General de la OMS, reconocía en esta 77ª Asamblea Mundial que el modelo de financiación se había revertido desde los años 80, en el que las donaciones “voluntarias” no representaban más que el 20%, siendo entonces el grueso de la financiación puramente dependiente de las aportaciones directas de los Estados Miembros. Hoy día, como señalaba Tedros, la situación es diametralmente opuesta. Según los datos de la propia OMS, en el bienio 2020/2021, las contribuciones voluntarias representaban el 86% de los ingresos totales de la OMS. El mayor donante privado era la Fundación Bill y Melinda Gates (592 millones de dólares), seguida por GAVI, también coordinada por Gates (413 millones de dólares). Las aportaciones de estas dos organizaciones suponían algo más del 16% del total de las aportaciones. Un pequeño apunte sobre GAVI que es importante no perder de vista. Es relativamente poco conocido el hecho de que GAVI no aporta en realidad fondos propios, sino dinero que recaba de los Estados, manteniendo para sí la capacidad de decisión sobre el destino de esos fondos, en lo que supone un claro desvío de dinero público a intereses privados. Siguiendo con el análisis de la financiación de la OMS, la Open Society Foundation de George Soros aportaba en este periodo 265 millones de dólares. Entre la lista de donantes se puede encontrar un nutrido grupo de las farmacéuticas más importantes. A efectos de economía no procederemos a una tediosa enumeración de todas ellas, aunque sirvan a modo de ejemplo los casi 200 millones que aportaron entre GSK, Roche, Sanofi, Seqitur y Novartis

En el bienio 2021/2022, esta tendencia no sólo no se frenó, sino que se agudizó. Las contribuciones voluntarias se situaron en el entorno del 88%. Entre Bill Gates y Gavi aportaron algo más del 20% del total de las aportaciones. La Fundación Gates aportó en este periodo 829 millones de dólares. La Alianza Gavi aportó el 7,39%, en torno a 480 millones. La Open Society Foundation aportó unos 171 millones de dólares. La aportación de las cinco farmacéuticas anteriormente citadas alcanzó el entorno de los 250 millones de euros. De nuevo, esta lista no pretende ser exhaustiva, y se quedan muchas organizaciones en el tintero, organizaciones algunas de ellas con un papel central en la implantación de medidas draconianas de salud pública durante la pandemia. Tal es el caso del Wellcome Trust, dirigido entonces por el ya mencionado en anteriores entregas, Jeremy Farrar, al que dedicaremos un amplio análisis en el capítulo dedicado a desmontar la narrativa de terror de la pandemia. En el documental “Trust Who”, en el que se analiza la relación de la OMS con la industria farmacéutica, Germán Velásquez, ex alto cargo de la organización, denunciaba reuniones a puerta cerrada de las farmacéuticas con otros directivos de la OMS elegidos por las propias farmacéuticas durante el transcurso de las reuniones de la OMS. Sorprendentemente, ese documental tan crítico, emitido en el programa Documentos TV de TVE, desapareció del catálogo en septiembre de 2020. El señor Velásquez ha reiterado su denuncia en diversas apariciones radiofónicas y en otros medios de comunicación, en las que advertía del peligro que entraña la creciente influencia de las farmacéuticas o de las fundaciones filantrópicas como la Fundación Bill y Melinda Gates sobre la OMS. También, en una entrevista que realizamos a ex alto cargo de la OMS en el área de epidemiología y prevención de pandemias, Christian Perronne, para el programa Grupo de Control , nos hablaba en los mismos términos de la estrecha relación existente entre la industria, la Fundación Bill y Melinda Gates y la OMS. Una relación basada en el conflicto de interés que tampoco nos debería de sorprender, ya que en 2009, la OMS ocultó la relación de varios de sus expertos asesores durante la pandemia de la gripe A con las farmacéuticas Roche y GSK, a la sazón fabricantes de los antivirales Tamiflu y Relenza contra el H1N1, favoreciendo que los Estados gastasen ingentes cantidades de dinero en medicamentos que finalmente no se usaron. Es evidente que, en el caso de la Gripe A, se magnificó la amenaza de pandemia con objeto de generar suculentos beneficios para las farmacéuticas. Y lamentablemente, parece que este no es el único caso en el que algo semejante ha ocurrido. 

A priori, podría valorarse como algo positivo que tantas organizaciones privadas se muestren  dispuestas a donar estas fastuosas cantidades en beneficio de la salud pública global. Pero el diablo, como suele decirse, se encuentra en los detalles. La cara B de las aportaciones voluntarias es que los donantes tienen la capacidad de decisión sobre el uso para el que se destinan los fondos. Y es que, a poco que se indague sobre el interés del capitalismo filantrópico y la plutocracia global en África, acaba uno topándose con una extensa pléyade de proyectos de ingeniería genética, desarrollo de fármacos e investigación en cultivos transgénicos. Ya saben los lectores, One Health. La cantidad de ejemplos similares resulta inabarcable. A título meramente ilustrativo, véase esta inversión de 40 millones de euros de la Fundación de Gates para investigación en vacunas ARNm en varios países de África. Por ello, son muchos los autores que consideran que África se ha convertido en un laboratorio de dimensiones gigantescas, en el que la industria farmacéutica prueba sus productos en humanos. Quizás recuerde el lector aquella magistral película de título “El Jardinero Fiel”, protagonizada por Ralph Fiennes y Rachel Weisz, en que se narraba la historia de una activista por los derechos humanos que era asesinada por una compañía farmacéutica, cuando investigaba la administración ilegal de fármacos experimentales en niños nigerianos. Aquella historia de pretendida ficción en realidad se hacía eco de un caso real, un escándalo que trascendió a la opinión pública, por el que la empresa Pfizer fue condenada por provocar la muerte de 11 niños y dejar a varias decenas discapacitados, debido a los ensayos de su medicamento contra la meningitis Trovan. El gobierno nigeriano demandó a Pfizer, reclamando 2000 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios, aunque finalmente se llegó a un acuerdo extrajudicial por la suma de 75 millones de euros. Ya ven ustedes, peccata minuta. Un escándalo que muy probablemente no sea más que la punta del iceberg. Por ello, quizás resulte comprensible que varias naciones de África se hayan mostrado contrarios a la aprobación del Tratado de Pandemias propuesto por la OMS. 

Reguladores farmacéuticos: Ser o no Ser

El siguiente nivel de la pirámide de copas es el de los reguladores farmacéuticos, encargados teóricamente de velar por la seguridad de los fármacos que se comercializan. La opinión pública tiene, en líneas generales, la percepción ciertamente errónea de que los reguladores realizan una ardua tarea de fiscalización de los productos y que nada sale al mercado sin que haya sido exhaustivamente probado. Pero ya hemos visto que eso no es realmente así. Ensayos clínicos terminados antes de tiempo, datos indeseados que se eliminan deliberadamente para presentar resultados positivos, efectos secundarios que se ocultan, funcionarios de los reguladores a los que se soborna, etc… En la aprobación de algunos fármacos por parte de los reguladores, se dan todos los elementos aquí citados. Tal es el caso del Vioxx, por poner un ejemplo más o menos conocido, en el que la terminación acelerada del ensayo clínico con objeto de ocultar daños cardiovasculares pasó desapercibida para los reguladores, que varios años después acabaron retirando el medicamento del mercado. Este caso, y varias decenas de casos similares, se encuentran profusamente documentados en el libro del experto en farmacovigilancia, Peter Götzsche, de título “Medicamentos que Matan y Crimen Organizado”.

Para que este tipo de hechos luctuosos tengan opción de ocurrir, se precisa que varias circunstancias concurran al mismo tiempo. En primer lugar es importante que los reguladores omitan su deber de vigilancia. Ello no se produce por pura maldad de los empleados de los reguladores, como es natural, sino por varios factores combinados, entre los que destaca sin lugar a dudas el fenómeno que se ha dado en llamar de puertas giratorias,que puede suponer un menoscabo en el buen funcionamiento en la labor del propio regulador si sus empleados albergan la tentación de mostrarse más benévolos a la hora de fiscalizar a una determinada empresa, a la vista de la posibilidad cierta de trabajar en ella algún día y así ver multiplicarse por cinco su salario. Es cierto que el regulador estadounidense (FDA) parece más propenso a que sus miembros pasen en corto espacio de tiempo a figurar entre los miembros de los consejos de administración de grandes farmacéuticas, o como directivos de divisiones relacionadas con su ámbito de conocimiento, pero ello no es del todo cierto. La Agencia Europea del Medicamento también sufre el mismo problema. Es una tónica general en los organismos europeos, como señalaba en este informe la Defensora del Pueblo Europeo, y es un hecho bastante preocupante en términos democráticos. También, en este artículo publicado por Peter Doshi, editor jefe del British Medical Journal, se describe y documenta con extraordinaria precisión este fenómeno de “puertas giratorias” en el regulador estadounidense. 

Otra cuestión de relevancia capital que propicia el descontrol regulatorio en la comercialización de fármacos es el de la propia financiación de los reguladores. Según un estudio recientemente publicado por elBritish Medical Journalel modelo de financiación de los reguladores dista mucho de ser óptimo para la función que se le supone a estos organismos de apariencia pública. La naturaleza de los reguladores farmacéuticos ha de ser la de fiscalizar los estudios que presentan las farmacéuticas en orden a obtener la aprobación para uso comercial de sus fármacos. A la luz de los datos publicados en BMJ, la diligencia debida por los reguladores queda seriamente  en entredicho, toda vez que no permiten suponer que puedan realizarse con independencia y rigor. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) recibe el 89% de su presupuesto directamente de la industria. El caso del regulador australiano (TGA) es todavía peor, siendo su presupuesto dependiente de la industria en un 96%, y tanto el regulador británico como el japonés dependen en un 86% de las farmacéuticas. Paradójicamente, el regulador menos dependiente de la industria es el estadounidense, cuyo presupuesto depende en un 65% de la industria. Los datos son suficientemente elocuentes, y no es necesario hacer ningún esfuerzo valorativo extraordinario para afirmar que los reguladores, entendidos éstos como organismos públicos cuya función sea la de fiscalizar la actividad de la industria, no existen como tal. Lo que tenemos, o mejor dicho, padecemos en su lugar es un engendro de apariencia pública que convierte a la industria en juez de sus propios actos. Los reguladores no regulan nada, y la  farmacovigilancia como tal no existe, ya que los ensayos son dirigidos por empresas subcontratadas por las farmacéuticas. Son  las llamadas Organización de Investigación por Contrato, conocidas por su acrónimo CRO,por sus siglas en inglés. Este modelo de empresas bien daría para un capítulo propio, pero simplemente a título ilustrativo compartimos la siguiente reflexión: ¿Qué incentivo encontraría una empresa subcontratada en decirle a una determinada farmacéutica contratante que su producto no está presentable para salir al mercado? La pregunta es retórica, evidentemente. No existe ningún incentivo, más bien al contrario. Es habitual encontrar que las CRO participen en la ceremonia de la confusión, en el conflicto de interés que todo lo enturbia, anulando la función de los reguladores.  

La clase médica: cooperadores necesarios.

Para que las farmacéuticas tengan la capacidad de presionar a los gobiernos es indispensable que los médicos prescriban los medicamentos. Por ello, la acción de relaciones públicas de las farmacéuticas siempre ha tenido en la diana a este colectivo. No sólo por la importancia de la prescripción, sino por su labor de reforzador de opinión en los medios de comunicación. Cada día es más frecuente ver a médicos en programas de televisión y radio hablando sobre las bonanzas de un determinado fármaco, aunque sin duda ha sido gracias a la pandemia que la figura del médico como líder de opinión ha sufrido un crecimiento exponencial. Lo que resulta menos habitual, por no decir totalmente inusual, es ver al presentador del programa solicitar al facultativo información sobre sus potenciales conflictos de interés. Y es que, como veremos a continuación, los conflictos de interés, fundamentalmente en grados más altos de la jerarquía de la profesión médica, son la norma de comportamiento. Según una encuesta realizada porIpsosen 2021 en 28 países, los dos colectivos profesionales que mayor confianza generan son precisamente los médicos en primer lugar, con un 64% de grado de confianza y sólo un 10% de desconfianza, y en segundo lugar, los científicos con un 61% de confianza y también un 10% de desconfianza. Por contra, los menos valorados son los políticos (10%) y los ejecutivos de publicidad (14%). En España es todavía mayor el grado de confianza, que asciende a un 71%, del mismo modo que la percepción general sobre los políticos caía a un 7%. Por ello, no es casual que los políticos se hayan parapetado detrás de “expertos” y de la “ciencia” a la hora de comunicar sus políticas de salud pública durante la pandemia.

Este grado de confianza en términos generales en el colectivo médico contrasta con lo expuesto a lo largo de esta investigación. Ello demuestra que la opinión pública no está informada respecto de las prácticas de la industria farmacéutica y el recurrente soborno de facultativos. Un caso verdaderamente paradigmático que ilustra a la perfección el modus operandi de la industria es el caso de Novartis, en que se acusaba a la compañía de sobornar a más de 4.500 médicos en Grecia para que prescribiesen medicamentos cuyo precio de mercado estaba inflado. El caso de Novartises un ejemplo paradigmático de una práctica que no es en absoluto novedosa, ni particular de un determinado país. En España, aunque el modelo es sofisticado y quizás sea discutible definirlo como soborno, el planteamiento es similar. Médicos considerados por la industria como líderes de opinión son incluidos en programas de charlas organizados por la industria farmacéutica, por las que son remunerados, en las que los gastos de hotel, transporte y dietas corren a cargo de las farmacéuticas, tanto de los ponentes como de los asistentes a los mismos. Además, los ponentes, generalmente personas de referencia, jefes de servicio de hospitales públicos, reciben generosos emolumentos por sus ponencias, diseñadas para hablar positivamente de un determinado producto que la farmacéutica organizadora pretende poner en el mercado o mejorar sus ventas. Nada muy diferente al modelo por el cual los ejecutivos de Purdue Pharma consiguieron que miles de médicos en Estados Unidos comenzasen a recetar OxyContin para usos no oncológicos, provocando así una catástrofe de salud pública cuyas consecuencias están hoy día lejos de poder atajarse.

Otro sistema utilizado por la industria para fidelizar a “reforzadores” de opinión del sector médico, consiste en su inclusión en ensayos clínicos recibiendo pagos por cada paciente incluido. Este es otro método, bastante utilizado, que además no suele estar incluido en los listados de transferencias de valor de las farmacéuticas. Una tercera vía de financiación suele ser la financiación de las propias sociedades médicas. Este aspecto resulta especialmente interesante para el objeto de este estudio, ya que estas sociedades médicas a menudo envían notas de prensa recomendando el uso de ciertos productos, o aconsejan al gobierno, ya sea central o autonómico, sobre la compra de ciertos productos. Desde 2016, debido a la presión ejercida por ciertos sectores políticos tras el escándalo de la “falsa pandemia” de la gripe A y la consabida implicación de altos cargos y consejeros de la OMS, las farmacéuticas en España, asociadas en lobby, decidieron impulsar un Código de Buenas Prácticas que no es más que una declaración de buenas intenciones, una suerte de autorregulación sin valor jurídico que no vincula a sus miembros. Pese a la vaguedad de la medida, la mayoría de los médicos se mostraron en contra de la misma.  

Según una investigación realizada por Civio, en el año 2017, las farmacéuticas gastaron 182 millones de euros en transferencias de valor a médicos, de los cuales 1,6 millones fueron a parar a las cuentas corrientes de 18 de ellos, que es lo que conocemos como “reforzadores de opinión” (según la terminología de Edward Bernays, considerado por muchos como el padre de las relaciones públicas modernas). De modo similar, las sociedades médicas recibieron en España una cantidad de 130 millones de euros. Un sistema de fidelización de médicos que es legal, aunque ciertamente discutible, que además resulta bastante rentable al parecer. Según un estudio de ProPublica del año 2014 señala que los doctores que reciben emolumentos de alguna farmacéutica tienden a prescribir en mayor medida sus medicamentos. La prescripción es de un 20% entre los que no reciben ningún pago, ascendiendo a un 30% entre los que reciben más de 5.000 dólares. Esta es una de las causas de que el negocio farmacéutico sea el más rentable del mundo, con una valor de más de 700.000 millones de dólares, por delante de las armas, el petróleo o la banca.  

También los legisladores en materia de salud pública se ven afectados por esta manera de proceder del cártel farmacéutico. Resulta lógico, incluso deseable, que los gobernantes acudan a pedir el consejo de asesores independientes y expertos en la materia para valorar la toma de medidas concretas. ¿Pero qué ocurre cuando esos mismos asesores reciben dinero de empresas cuyos productos se valora adquirir? Como afirma la asociación No Gracias, una organización civil dedicada a velar por la integridad y transparencia en las políticas de salud pública, todos los miembros del comité asesor de vacunas contra la COVID-19 de la Asociación Española de Pediatría habrían recibido pagos de la industria farmacéutica durante el año 2020, hecho que se repite en mayor envergadura en el 2021 como hemos podido comprobar en la investigación que llevamos a cabo para el programa Grupo de Control, en la que escrutábamos los portales de transparencia de las cuatro empresas implicadas en la fabricación y venta a los gobiernos de vacunas contra la COVID-19, a saber, PfizerGSKAstraZeneca y Janssen, datos que se pueden contrastar en los diferentes portales de transparencia de dichas farmacéuticas.  

Y es que no sólo son los médicos los que reciben “transferencias de valor” de parte de las farmacéuticas. También las asociaciones médicas quedan comprometidas mediante donaciones millonarias, resultando finalmente en una mera correa de transmisión de los intereses de la industria. Esta manera de proceder, lejos de remitir, se está consolidando. Según los datos de Farmaindustria, reflejados en este artículo publicado en Cinco Días, la industria farmacéutica habría batido su propio récord en 2023 de pagos destinados a formación o ayudas a la investigación, desembolsando 667 millones en estos conceptos, lo que supone un 14% más que el año anterior. En EEUU, la situación parece todavía más crítica y el conflicto de interés de los facultativos es una cuestión generalizada. Según este interesante estudio publicado en JAMA, el porcentaje de médicos que reciben pagos directos de la industria se encuentra en el entorno del 60% de media. Los patólogos serían los especialistas menos financiados (un 40% de patólogos recibe pagos) y los cardiólogos el colectivo con el que la industria se muestra más “generosa” (un 71% de los cardiólogos recibe pagos).  

En resumen, la necesidad de la industria de vender sus productos conlleva una presión enorme a los profesionales de la medicina, haciendo del conflicto de interés una norma del sector. El papel de los médicos en lo concerniente a nuestra investigación es de especial relevancia, ya que son, en gran medida, los encargados de generar confianza, entre sus propios colegas singularmente, y en la opinión pública de manera general, a través, fundamentalmente, de los medios de comunicación.  

El secuestro de la medicina basada en la evidencia. 

Hacemos referencia en el título de este epígrafe a una expresión usada por el profesor de medicina y datos biomédicos de la Universidad de Stanford, John P.A. Ioannidis, en su estudio titulado “La Medicina Basada en la Evidencia Ha Sido Secuestrada”Ioannidiscuya posición crítica con respecto del modo en que se estaban tomando decisiones sobre salud pública durante la pandemia le valió la censura en muchas plataformas de redes sociales, publicaba un metaanálisis sobre la calidad de 1394 revisiones sistemáticas de estudios publicados y revisados por pares entre Enero de 2013 y junio de 2014, de la base de datos de estudios sistemáticos de la prestigiosa ColaboraciónCochrane, máxima referencia en este ámbito profesional de conocimiento. Del mismo se desprendían unos datos que resultan cuando menos preocupantes. Sin ánimo de ser exhaustivos, los datos concluían que la calidad de la evidencia obtenida para los primeros resultados primarios era en un 13,5%  de los casos alto, un 30,8% moderada, un 31,7% bajo, y en un 24% muy baja. Incluso cuando se consideraron todos los resultados enumerados, solo el 19,1% tuvo al menos un resultado con evidencia de alta calidad. De los que tenían buena calidad de evidencia, sólo 25 tenían ambos resultados significativos y una interpretación favorable de la intervención. En definitiva, menos de un 2%. Sin embargo, de los 1394 ejemplos, el 96% afirmaban tras su revisión por pares haber obtenido resultados significativos.  

En la revisión relativa a los 185 estudios que analizaban la posible relación de los medicamentos antidepresivos con una posible mayor tasa de suicidios, se demostraba que el 29% de los mismos tenían autores que eran empleados de las empresas fabricantes, 147 (79%) estaban esponsorizados por la propia industria o alguno de sus participantes tenía vínculos con la industria. Conclusiones: sólo 58 de los 185 incluyeron alguna apreciación negativa sobre la relación entre suicidios y antidepresivos. Los metaanálisis que tenían entre sus participantes a algún miembro de la industria, tenían 22 veces menos probabilidades de incluir alguna apreciación negativa.  En un estudio de 2018 también dirigido por Ioannidis, en que se analizaba la transparencia de los datos ofrecidos en los estudios, de los 149 estudios elegidos aleatoriamente, un tercio de los mismos no incluía información sobre la financiación. En la misma línea de falta de transparencia, sólo uno de los 104 artículos con datos empíricos incluía un enlace a un protocolo de estudio completo y ninguno ofrecía los datos en crudo sin procesar, fundamentales para la replicación del estudio y una revisión por pares eficaz. 

Estos son sólo dos ejemplos que señalan evidencias de falta de rigor, transparencia, y por supuesto de veracidad, pero ni por asomo son los únicos. De manera similar se expresaba en este estudio, en el que se señala una situación similar en la investigación española. Cabría preguntarse entonces a qué responde exactamente la falta de fiabilidad de la ciencia médica. En nuestra opinión es el propio modelo el que falla. Los individuos, ya sean investigadores o periodistas de divulgación médica, se ven sometidos a la presión ejercida por una industria ávida de beneficios rápidos, y ello actúa en detrimento del rigor científico y de la fiabilidad de los datos. Por eso, aunque la percepción de la opinión pública mayoritaria permanezca completamente ajena a esta realidad, como se afirma en el título de este artículo de Ioannidis, “la mayoría de los hallazgos en investigación publicados son falsos”. ¿Cómo si no se puede explicar que este investigador de la Universidad de Córdoba fuese capaz de publicar un estudio de investigación cada 37 horas? Y ese es precisamente el problema de la investigación en el ámbito universitario: que si no publicas, mueres.

Los medios especializados: un modelo de propaganda.

Como vemos, el modelo de información científica, de manera análoga al de investigación , se trata de un modelo que prima la cantidad sobre la calidad, la rentabilidad sobre el progreso científico genuino y el sensacionalismo o la posverdad sobre la veracidad y la transparencia. Y en ello, una parte bien significativa de la responsabilidad la ostentan los medios de comunicación, ya sean estos generalistas o singularmente los medios especializados. Sobre los medios generalistas y su abyecto papel en la “gran narrativa” hablaremos largo y tendido en una próxima entrega de esta serie.  Sin embargo, no queremos dejar pasar la oportunidad de compartir la reflexión que hacía Gonzalo Casino en este artículo. Casino afirmaba que la “comunicación” ha ido sustituyendo al “periodismo” en las secciones de ciencia y salud de los medios, debido en parte a que la crisis del periodismo de principios de siglo, las sucesivas reducciones de plantilla en la adaptación al nuevo entorno digital, derivó en una falta de especialización de sus redactores, de modo que se convirtieron en mera correa de transmisión de las notas de prensa de las propias empresas farmacéuticas. Es por ello que no se puede hablar de verdadera información de salud, sino simple y llanamente propaganda interesada o marketing. En el caso de los medios especializados, la situación resulta, sí cabe, aún más preocupante. Si bien en los medios generalistas hemos establecido una relación de propiedad cruzada, siendo los accionistas de las empresas farmacéuticas y de los propios medios en gran medida los mismos, en los medios especializados el interés es directo, ya que la financiación de los propios medios proviene de la industria. Así lo demuestra este artículo del British Medical Journal (BMJ) en un estudio realizado en 2014 sobre la financiación de los medios especializados en Estados Unidos. De las 713 publicaciones elegidas para el estudio, más del 50% recibía pagos generales de la industria, y un 19% recibía pagos en concepto de pagos para investigación. El estudio concluía que los editores de estas revistas debían revisar el modelo, ya que podría resultar en una falta de confianza de la opinión pública en sus publicaciones. 

Un modelo delictivo

Todo el escenario descrito hasta ahora favorece que las farmacéuticas campen por sus respetos, consagrándose un modus operandi que no puede ser definido de otro modo que delictivo. Compartimos este esclarecedor estudio publicado en la ya mencionada revista JAMA, en que se recogen sistemáticamente todas las sentencias y multas impuestas a empresas farmacéuticas en EEUU entre los años 2003 y 2016. En los resultados del estudio se concluye que, de las 26 empresas analizadas, 22 tenían historial delictivo, lo que supone un 85%. No es una manzana podrida sino un cesto repleto de ellas. La empresa que más multas acumulaba por sus prácticas era GlaxoSmithKline (GSK) con 27 y casi 10.000 millones de dólares, seguida por Pfizer con 18 y casi 3.000 millones. También llama la atención que la duración media de los delitos cometidos por estas dos empresas era de más de 7 años en el caso de GSKy de casi 6 años en caso de Pfizer, lo que viene a confirmar la ineficacia de las administraciones a la hora de controlar estas prácticas, que cómo sabemos, no sólo suponen un perjuicio económico grave para los Estados, sino en muchos casos, un peligro de primera magnitud para la salud pública, como en los casos ya mencionados del OxyContino del Subsysfármacos responsables de una verdadera pandemia de adictos a los opioides que deja tras de sí la escalofriante cifra de medio millón de muertos por sobredosis en Estados Unidos.  

Disciplinar a los honrados

Siempre hay quien no comulgue con las prácticas mafiosas del sector. Honrosos casos de personas que hacen su trabajo con diligencia y con verdadera vocación de servicio público. Sirva de ejemplo paradigmático el calvario judicial al que se fue sometido el experto en farmacovigilancia, Joan Ramón Laporte, a cuenta de sus opiniones vertidas sobre el ya mencionado Caso Vioxx. Más recientemente, Joan Ramón Laporte fue invitado a participar en  la comisión de investigación sobre vacunas del Congreso de los Diputados , en la que ofreció una visión crítica sobre las mismas. Puede comprobarse en este titular cómo los medios no fueron precisamente amables con Laporte, etiquetado aquí como “un negacionista en el Congreso”. Tildar de negacionista a una eminencia en su ámbito de la magnitud de Laporte, sería análogo a tildar a Albert Einstein de “terraplanista” . Sin ningún género de dudas supone un absoluto dislate. No resultará una sorpresa este trato por parte de medios como La Sexta o El Mundo. Es burdo pero vamos con ello. Otro caso paradigmático de maltrato al disidente es el del ya mencionado Germán Velásquez, antiguo cargo directivo de la OMS, que denunció ataques físicos de encapuchados por su posición pública de crítica abierta a la industria farmacéutica y sus prácticas, plasmadas en el llamado Libro Rojo de la OMS.  

Más recientemente, fue bastante sonado el caso de Brook Jackson, una trabajadora de Ventavia Research Group. Ventavia es una CRO (Organización de Investigación por Contrato) que dirigía los ensayos clínicos fase III de la vacuna de Pfizer contra el Covid-19. Brook Jackson denunció graves irregularidades en los ensayos, que incluían falsificación de datos, falta de seguimiento de  casos o la revelación de la condición de placebo a los participantes, rompiendo el doble ciego y viciando de nulidad todo el ensayo. Lo que encontró Brook Jackson como premio a su honestidad y su diligencia profesional fue un despido, seguido de una campaña de desprestigio por todos los medios posibles. Del mismo modo que le ocurrió a Jackson, los médicos que tienen el coraje de denunciar efectos adversos pueden sufrir también en sus propias carnes el ataque de su propio sector. Recientemente, The Telegraph publicaba un artículo con este elocuente titular. Según The Telegraph, médicos del Sistema Nacional de Salud del Reino Unido, remitieron a denunciantes al Consejo Médico General (GMC, equivalente al Colegio de Médicos en España) para “intimidar” a los denunciantes, según el propio GMC. Según la profesora Dame Carrie MacEwen, presidenta del Consejo Médico General (GMC), el sistema para evaluar la aptitud de los médicos para ejercer se está utilizando como arma contra quienes plantean preocupaciones sobre la seguridad del pacienteLos datos son escalofriantes. De los 47 médicos que fueron investigados, 25 habían sido amenazados con ser reportados al GMC si denunciaban los efectos adversos, y 20 de ellos denunciaban que los reportes habían sido fabricados sobre la base de información falsa. Como vemos, si los sobornos y los regalos no  consiguen quebrar la honorabilidad de los profesionales, la industria siempre sabe encontrar métodos más expeditivos para ocultar sus actividades.  

Hemos buscado plasmar con la máxima fidelidad el modelo de conflicto de interés del que la OMS es la cúspide. La primera copa sobre la que derramar el champán de nuestra analogía, que fluye con dirección a la base de la pirámide hasta finalmente llenar todas las copas, ya sea mediante sobornos o amenazas. Como rezaba el icónico tema de QueenThe Show Must Go On, el negocio no puede parar, y por ello cabe tomar en serio las amenazas de Tedros Adhanom. El Tratado se acabará aprobando como se han aprobado las enmiendas al Reglamento  Sanitario Internacional. El entramado internacional articulado en torno al credo de One Health es demasiado grande para simplemente dejarlo caer. Demasiados millones de dólares invertidos en un modelo que necesariamente buscará amortizarse. En el próximo capítulo, hablaremos de la “Gran Narrativa” del Covid-19 y de todos sus puntos ciegos, que son muchos como los lectores podrán comprobar por sí mismos. Mientras escribo estas líneas, testifica en el Subcomité del Congreso de EEUU Anthony Fauci, director del NIAID, y uno de los principales personajes sobre los que reposa la narrativa de terror pandémica.

Carlos Sánchez

Pandemias X, el negocio de la OMS con sus inversores privados

Cienciaysaludnatural

Si bien la OMS ha afirmado que en sus convenciones se están redactando enmiendas para preparar a la población mundial para un futuro con una incidencia cada vez mayor de pandemias mortales ( “Enfermedad X” ), las políticas centrales de estos documentos: impulsado por la ideología de la doctrina de Seguridad Sanitaria Global y la agenda “Una Salud”, codificaría aún más medidas desregulatorias de emergencia y que crearían un mercado masivamente rentable y permanente para el nuevo arsenal biotecnológico de las grandes farmacéuticas. 

Al igual que durante la Operación Warp Speed, Estados Unidos permanece en la primera línea del esfuerzo para acelerar el proceso de lucrar con medicamentos biológicos bajo el pretexto de preparación para una pandemia. Esta misma semana (julio de 2024), la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA) del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos (HHS), cuyo objetivo es “responder a las amenazas a la seguridad sanitaria del siglo XXI”, otorgó 176 millones de dólares a Moderna para “ acelerar el desarrollo de una vacuna contra la influenza pandémica que podría usarse para tratar la gripe aviar en personas”). 

El mercado de la pandemia biotecnológica, no dependerá del libre albedrío de los consumidores para optar por comprar o no productos, sino que dependerá de tácticas de consumo forzado y manipulación de paradigmas regulatorios.

A la vanguardia de este impulso están los socios público-privados y las partes interesadas privadas de la OMS, quienes dan forma y se benefician directamente de esta política. De hecho, su influencia ha convertido a la OMS en un brazo de las grandes farmacéuticas, tan poderoso que ya demostró su capacidad para transformar todo el proceso regulatorio internacional en beneficio de la industria farmacéutica durante la pandemia de COVID-19. Estas nuevas leyes solidificarán aún más esa influencia y vincularán legalmente a toda la comunidad global con el mercado pandémico permanente que se está construyendo en nombre de las grandes farmacéuticas.

“Abismo de patentes”, situación actual de las grandes farmaceuticas

Las grandes farmacéuticas pronto deberán enfrentar un peligro que afecta a toda la industria y que alcanza magnitudes mucho mayores que las preocupaciones típicas sobre los márgenes de ganancias corporativas y la política empresarial. A lo largo de años de consolidación de la industria, esencialmente se ha vuelto “demasiado grande para quebrar”. Sólo que ahora, el modelo en el que alguna vez nunca pudo fallar (es decir, la práctica de obtener exclusividad de patente sobre medicamentos aprobados a través de ensayos clínicos y regulaciones) se ha vuelto obsoleto, incluso imposible, bajo las condiciones actuales de la industria. 

En este nuevo clima, las pruebas y regulaciones que las grandes farmacéuticas alguna vez superaron con éxito pueden conducir a su desaparición total. Sin embargo, el sector farmacéutico ha puesto sus ojos en la única solución que puede mantener intactos su dinero y poder; la toma total de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y del sistema regulatorio que ahora mantiene como rehén a todo el mercado. 

El problema comienza con la inminente amenaza financiera que enfrentan las 20 grandes empresas farmacéuticas: desde ahora hasta 2030, 180 mil millones de dólares en ventas estarán en riesgo. Esta amenaza, denominada abismo de patentes, (las patentes caducan ) es un problema que se presenta periódicamente en la industria farmacéutica. Las grandes farmacéuticas han ganado dinero durante mucho tiempo al lograr la exclusividad de patentes de ciertos medicamentos, monopolizando así todas las ganancias potenciales obtenidas con ellos durante un período de tiempo finito. Cuando termina la exclusividad de la patente, el medicamento cae de cabeza por un “abismo de patentes” y se ponen en riesgo decenas de miles de millones de dólares en ingresos. 

Normalmente, las empresas abordan los problemas de patentes mediante fusiones y adquisiciones de otras empresas farmacéuticas, a menudo más pequeñas, que producen productos con potencial de mercado. Sin embargo, esta vez, según Biopharma Dive , “después de años de consolidación de la industria, no quedan muchos grandes fabricantes de medicamentos que sean objetivos atractivos para una fusión”. En otras palabras, las grandes farmacéuticas se han vuelto “demasiado grandes para quebrar” y –en los próximos seis años– se enfrentan a una nueva ronda de abismo de patentes potencialmente desastrosos. Además, ya existen medicamentos químicos tradicionales para muchas enfermedades y los reguladores han aumentado los estándares de aprobación para ellos, retrasando el momento en que los nuevos productos obtenidos de fusiones y adquisiciones pueden llevarse al mercado. 

Como resultado, las empresas que enfrentan a «abismo» de patentes entonces han cambiado sus esfuerzos de respuesta al abismo o caducidad de patentes hacia la adquisición de compañías biotecnológicas y biológicas que producen productos que, en comparación con sus contrapartes químicas más típicas, son más complejos , impredecibles, difíciles y costosos de fabricar. Por lo tanto, la carrera por los futuros fármacos de gran éxito tendrá lugar “en los propios laboratorios de los grandes fabricantes de medicamentos o en los de las pequeñas empresas de biotecnología”, en lugar de fusiones con otras grandes corporaciones.   El acantilado de las patentes farmacéuticas – Ver Business Insider

Para comprender qué hace que los productos biológicos sean tan complejos e impredecibles, se debe comprender su gran diferencia en función y origen en comparación con los medicamentos de base química.

Medicamentos químicos Vs. Productos biológicos

Los productos biológicos se obtienen de diferentes fuentes naturales, como humanos, animales o microorganismos, y «pueden producirse mediante biotecnología… y otras tecnologías de vanguardia». Mientras que los medicamentos químicos activan todo el sistema inmunológico de manera general, los biológicos se dirigen a “ciertas proteínas o células del sistema inmunológico para crear respuestas específicas”, de ahí el uso de tecnología de punta para lograr estos objetivos médicos más específicos.  

Hay múltiples razones por las que las empresas farmacéuticas podrían estar interesadas en la biotecnología, pero hay tres que son claras desde una perspectiva de mercado.

Replicación

La naturaleza compleja de los productos biológicos hace que sea imposible replicarlos como lo sería un fármaco típico de base química, lo que obliga a las empresas a fabricar versiones «biosimilares» de los medicamentos en lugar de genéricos.

Esto significa que las versiones biosimilares de productos biológicos no pueden intercambiarse sin consecuencias durante el tratamiento de un paciente como podría serlo, por ejemplo, un genérico.

Costo de desarrollo

Su costoso desarrollo también hace que sus contrapartes no autorizadas sean más difíciles de vender con descuentos significativos, lo que hace que los biosimilares no sean tan atractivos financieramente para los consumidores como los medicamentos genéricos.

Obstáculos regulatorios complejos

También existen obstáculos regulatorios complejos para llevar biosimilares al mercado, incluso después de que hayan sido aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Estas atractivas características han convertido a la biotecnología en la alternativa al inminente abismo de patentes que las grandes empresas farmacéuticas se están preparando para enfrentar, con una serie de importantes corporaciones farmacéuticas adquiriendo empresas de edición de genes, conjugados anticuerpo-fármaco y otras empresas de biotecnología para compensar sus pérdidas potenciales (ver  aquí ,  aquí ,  aquí , aquí , aquí y aquí ). 

A primera vista, esta inversión en productos biológicos parece una típica respuesta al abismo de patentes; comprando nuevas empresas que produzcan medicamentos con potencial de “éxito de taquilla” y esperando que alivien las pérdidas entrantes.

Sin embargo, existen importantes obstáculos a los que se enfrentan los productos biotecnológicos y biológicos desde una perspectiva de mercado que hacen que la inversión de Pharma en ellos suponga un cambio significativo en la industria: se ha demostrado que la imprevisibilidad de los productos biológicos los hace consistentemente inseguros

Las inyecciones de ARNm contra la COVID-19, que son medicamentos biológicos, se asociaron con un  riesgo excesivo  de efectos adversos graves y pueden provocar   miocarditis mortal .

CRISPR, la biotecnología de edición de genes más popular, a menudo silencia y activa genes para los que no está destinado, lo que provoca efectos adversos como  el cáncer  (ver también  aquí ).

Los conjugados anticuerpo-fármaco inducen eventos adversos graves el 46,1% de las veces, según un estudio. estudio de Zhu et al. y están significativamente asociados con la sepsis en pacientes con cáncer, lo que aumenta la mortalidad. 

Por lo tanto, estas características poco atractivas hacen que sea más difícil que los productos biológicos/biotecnológicos tengan éxito dentro del marco regulatorio convencional bajo el cual opera actualmente la mayor parte del desarrollo de medicamentos.

Sin embargo, también puede resultar difícil persuadir a los consumidores de que un fármaco impredecible y altamente técnico es seguro y eficaz.

Para prevenir esto las grandes farmacéuticas, la Organización Mundial de la Salud y sus socios público-privados, están llevando a cabo un proceso legal sin precedentes para persuadir al mercado a usar algunas biotecnologías, que generan ganancias récord para las grandes farmacéuticas durante la pandemia de COVID-19, cuando se eliminaron los obstáculos regulatorios normales. 

Las inyecciones de ARNm contra la COVID-19 se convirtieron rápidamente en producto del mercado anual más vendido de la historia de las grandes farmacéuticas . Como resultado de las inyecciones COVID-19, Pfizer ganó 35 mil millones de dólares, mientras que sus competidores BioNTech y Moderna recaudaron 20 mil millones de dólares cada uno en 2021 y 2022 . Bill Gates convirtió su inversión de 55 millones de dólares en BioNTech en 550 millones de dólares .

El 70% de la población estadounidense está ahora completamente vacunada, al igual que el 70% de la población mundial . Esto se logró engañando a la población con porpaganda, desregulado y instigar el consumo obligatorio de los medicamentos experimentales (un plan que, en lo que respecta al desarrollo acelerado fue delineado en el Pentágono ), dirigió la Operación Warp Speed ​​y fue autorizado legalmente por la autorización de uso de emergencia de la FDA y la Lista de uso de emergencia de la OMS . 

La OMS, la FDA y el CDC intentan eliminar los estándares regulatorios

Estas etiquetas de “uso de emergencia” permitieron a las compañías farmacéuticas anular los estándares asociados regularmente con el endeble proceso de hacer que un medicamento pase por largos ensayos clínicos, que anteriormente casi causaron el colapso de la compañía biotecnológica Moderna antes de la pandemia. Esta historia demuestra perfectamente la maniobra que las empresas de biotecnología intentan, es decir, eliminar los estándares regulatorios típicamente requeridos para los productos médicos, y el precedente que estableció la falsa pandemia para esta ofuscación regulatoria. 

Moderna socia del National Institutes of Health (NIH) de EE.UU

Fundada aproximadamente diez años antes de la pandemia, Moderna, no había generado ningún producto hasta principios de 2020. Además , ni siquiera había podido demostrar en ensayos clínicos que pudiera producir productos de ARNm seguros y eficaces. 

Sus tecnologías farmacológicas estuvieron constantemente plagadas de problemas de toxicidad cuando se dosificaron en cantidades «efectivas», y fueron ineficaces cuando se dosificaron en cantidades supuestamente «seguras». Los problemas de seguridad eran tan graves que Moderna se vio obligada a abandonar su tratamiento biológico clave basado en ARNm que había utilizado para recaudar la mayor parte de su capital y que justificaba la alta valoración de la empresa después de que los denunciantes arrojaran luz sobre el hecho de que ni siquiera podía dar resultados positivos a ensayos en humanos. 

Estos problemas de seguridad, entre otros problemas políticos condenatorios, prepararon a Moderna para un colapso inminente justo antes de la pandemia, con la financiación agotándose y la empresa recibiendo instrucciones de reducir gastos, así como una caída del precio de las acciones. Esto se combinó con ejecutivos clave que abandonaron la empresa en momentos críticos en el período previo a 2020. 

Pero cuando a finales de 2019 surgió la noticia de un virus procedente de Wuhan, el director ejecutivo de Moderna, Stéphane Bancel, tuvo una oportunidad para su empresa en quiebra. En ese momento, el subdirector del Centro de Investigación de Vacunas de los Institutos Nacionales de Salud, Barney Graham, ya estaba preparando a los del National Institutes of Health (NIH) de EE.UU., para desarrollar inyecciones candidatas para el virus venidero.  https://www.bitchute.com/embed/2Gr1aYbiSYvg

Stephen Bancel director de Moderna miente ante el senado de EE.UU. al decir que el K0 B1T causa miocarditis. El senador Rand Paul arremete contra Stéphane Bancel director ejecutivo de Moderna. «Quieren justificar el aumento de miocarditis y pericarditis en niños y atribuirlas al covid de manera de justificar el aumento comprobado a través de los siguientes estudios serios que dejan sin dudas que el terrible aumento de estas patologías es por causa de las inyecciones covid19. https://cienciaysaludnatural.com/fda-autoriza-que-bebes-de-10-meses-puedan-recibir-4-inyecciones-k0-b1t/ »  https://www.bitchute.com/video/2Gr1aYbiSYvg/

Moderna, ya había estado trabajando para “llevar al mercado una clase completamente nueva de inyecciones” con Graham en los años previos a la pandemia. Esta relación, finalmente llevó a Graham a proponer al director ejecutivo de Moderna la oportunidad de utilizar el virus pandémico venidero «para probar las capacidades aceleradas de fabricación de las inyecciones de la compañía», antes de que los expertos lo hubieran hecho oficialmente. Declaró que una inyección era la solución a la pandemia. 

Quienes analizan la crisis del COVID-19 y sus efectos se han centrado principalmente en cómo su naturaleza disruptiva ha llevado a cambios y recalibraciones importantes en toda la sociedad y la economía.

Este acuerdo, que se manifestaría en los próximos meses, colocó a Moderna en la primera línea del programa acelerado de vacunas del gobierno de EE. UU., la “Operación Warp Speed”, y recompensó a Moderna con su primer y único producto; las inyecciones de ARNm contra el COVID-19, que generaron miles de millones de ganancias . La empresa que anteriormente estaba estancada y en quiebra solo pudo lanzar este producto debido a la eliminación de los mismos obstáculos regulatorios que previamente habían impedido que Moderna llevara al mercado cualquiera de sus candidatos a fármacos.   

Por lo tanto, las inyecciones contra la COVID-19 salieron al mercado en solo 326 días , una fracción de los 10 a 15 años que normalmente tardan las vacunas en salir al mercado. Este momento fue fundamental para el objetivo de la Operación Warp Speed ​​de vacunar a toda la población estadounidense: lanzar la inyección con campañas de terror, antes de que terminaran los bloqueos y las restricciones sociales, probablemente hizo que la gente se preocupara más por poner fin a la pandemia que por el criterio regulatorio de la droga.

Como resultado, ya sea por mandato estatal en países como Austria o dependientes del empleo en los EE. UU., muchas personas aceptaron los mandatos de inyección sin cuestionar este supuesto medicamento que se lanzó rápidamente al mercado.  https://www.bitchute.com/embed/OVX30LRVEzAB

Stefan Oelrich directivo de Bayer jefe de la División Farmacéutica admite que las inyecciones Ko B1T son inyecciones de terapia génica https://cienciaysaludnatural.com/diferencia-entre-las-vacunas-del-calendario-escolar-e-inyecciones-de-arnm/ https://www.bitchute.com/video/OVX30LRVEzAB

El rápido desarrollo y el consumo obligatorio de medicamentos experimentales, una estrategia que fue adoptada por primera vez por los militares para responder a los ataques con armas biológicas, ahora ha sido legitimado internacionalmente por la OMS, ya que recientemente aprobó revisiones críticas del Reglamento Sanitario Internacional y continúa redactando su Recientemente archivó el tratado CA+ de la OMS . 

La OMS esta prepararando aún más medidas desregulatorias de emergencia para crear un mercado masivamente rentable y permanente para ciertos productos del nuevo arsenal biotecnológico de las grandes farmacéuticas.  https://www.bitchute.com/embed/XIWb4Fks5KWI

James Roguski centra el problema del Tratado de Pandemias y las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional » las negociaciones de los países para firmar el tratado son por dinero, las naciones manejadas por el grupo Vanguard Black Rock dueños de todos los laboratorios, están queriendo firmar porque la OMS prometió un retorno de inversión de 35 a 1″. (Los aportes a la OMS los llaman oficialmente inversión) https://www.bitchute.com/video/XIWb4Fks5KWI

Al igual que durante la Operación Warp Speed, Estados Unidos permanece en la primera línea del esfuerzo para acelerar el proceso para lucrar con medicamentos biológicos bajo el pretexto de preparación para una pandemia.

Esta misma semana (julio de 2024), la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA) del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos (HHS), cuyo objetivo es “responder a las amenazas a la seguridad sanitaria del siglo XXI”, otorgó 176 millones de dólares a Moderna para “ acelerar el desarrollo de una vacuna contra la influenza pandémica que podría usarse para tratar la gripe aviar en personas, a medida que crece la preocupación por los casos en vacas lecheras en todo el país ”). 

Este es probablemente el primer contrato gubernamental otorgado a una empresa de biotecnología desde la pandemia de COVID-19 con la intención específica de “acelerar” el desarrollo de vacunas contra un virus pandémico supuestamente inminente (sin embargo, otras empresas de biotecnología han recibido contratos para la preparación para una pandemia ).

La táctica del desarrollo preventivo de medicamentos pandémicos y su camino acelerado hacia el mercado es un componente clave de las nuevas convenciones de la OMS y un factor esencial en la viabilidad del mercado biotecnológico pandémico, y ahora puede proporcionar a Moderna su segundo producto . 

El mercado de la pandemia biotecnológica, no dependerá del libre albedrío de los consumidores para optar por comprar o no productos, sino que dependerá de tácticas de consumo forzado y manipulación de paradigmas regulatorios.

¿Quién financia a la OMS? 

La OMS se financia mediante contribuciones periódicas de los Estados miembros (que representan el 20% de su financiación) y de partes interesadas privadas (que representan el otro 80% y, por tanto, la mayor parte de sus finanzas). La abrumadora dependencia de la organización a la financiación privada, la ha sometido a seguir los proyectos de sus partes interesadas, proporcionando una vía para que los actores privados dicten la política de la OMS y formen parte de comités cruciales, ejecuten programas completos de distribución e incluso ocupen altos cargos burocráticos. 

La influencia del sector privado en la OMS se materializó de manera más tangible y consecuente durante la pandemia de COVID-19, cuando los objetivos previos a la pandemia de los socios público-privados de la OMS, como la Coalición para Innovaciones en Preparación para Epidemias (CEPI), financiada por Bill Gates, de “acelerar el desarrollo de vacunas” y Gates (que abogó por desarrollar vacunas en 90 días o menos) influyeron mucho en la respuesta pandémica global de los estados miembros de la OMS. 

EL 84% del capital que ingresó a la OMS en 2022, fue de origen privado, otorgando a los “donantes” (aunque en realidad se les pueda definir como “inversores”) la capacidad de decidir en qué quieren que la OMS invierta esos fondos.Obviamente, la fundación Bill y Melinda Gates y la creación en su poder GAVI (Global Alliance for Vaccines and Immunisation o Alianza Global para Vacunas e inmunización) como donantes mayoritarios, (recordemos Gates es el dueño la vacuna de ModeRNA) elegirán que se inviertan sus donaciones en vacunas!

Y a ser posible, vacunas que ellos mismos y sus colegas de la industria farmacéutica fabricarán y venderán a los países a través de las “recomendaciones” de la OMS hasta ahora, y de las obligaciones que contraerán los países miembros si se aprueban las negociaciones en curso. https://apps.who.int/gb/ebwha/pdf_files/WHA76/A76_17-en.pdf Por eso es importantísimo oponerse a la OMS y a todos sus planesSTOP OMS Firma Petición de Rechazo a la OMS https://cienciaysaludnatural.com/firmar-peticion-rechazo-enmiendas-tratado-pandemias-oms/

En 2022, el 62% de las contribuciones voluntarias provino de los Estados Miembros, el 15% de entidades de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales, el 12% de fundaciones filantrópicas, el 7% de asociaciones y el 4% restante de diversas
categorías de actores no estatales. https://apps.who.int/gb/ebwha/pdf_files/WHA76/A76_17-en.pdf pag. 13, Advertencia: siempre estan cambiando las URL de estos datos…

Fuentes de financiación de la OMS- 2020-21 https://apps.who.int/gb/ebwha/pdf_files/WHA74/A74_28-en.pdf (siempre estan cambiando las URL de estos datos)

(siempre estan cambiando las URL de estos datos y uno luego no los puede encontrar)

De manera similar, burócratas del sector público como el Anthony Fauci, la ex comisionada de la FDA de Obama, Margaret Hamburg, y Rick Bright de BARDA y la Fundación Rockefeller , abogaron en un panel de octubre de 2019 por la creación de un nuevo sistema que enfatizara “la velocidad y la eficacia”. ” y vacunas “rápidas”. Fauci declaró la importancia de cambiar la percepción que la gente tiene de la influenza como una enfermedad leve y hacerlo de “una manera disruptiva que no este sujeta a condiciones ni procesos burocráticos’. Más tarde dijo muy directamente que por vacunas ‘más rápidas’ se refería a inyecciones de ARNm”.  https://www.bitchute.com/embed/PTqVnUWympSl

Anthony Fauci en octubre 2019 en un panel, planeado la vacuna universal contra la gripe, reconoce que una inyección de ARNm necesitaría un década de estudios para ser segura. https://cienciaysaludnatural.com/fauci-reconoce-que-una-inyeccion-de-arnm-necesita-un-decada-de-estudios-para-ser-segura/https://www.bitchute.com/video/PTqVnUWympSl

En particular, independientemente de que los estados miembros tuvieran o no leyes de autorización de uso de emergencia similares a las de EE. UU. y el Reino Unido, que permiten el desarrollo y la distribución acelerados de medicamentos experimentales no aprobados frente a emergencias como pandemias, los países miembros las adoptaron universalmente para desarrollar y/o distribuir las inyecciones contra la COVID-19, de una forma bastante “perturbadora” y “rápida” de llevar estas inyecciones al mercado, que se logra precisamente sin hacer que su desarrollo “no esté sujeto a condiciones y procesos burocráticos”. 

Antes de que se adoptara esta desregulación de emergencia, la OMS tuvo que otorgar legitimidad a este esfuerzo sin precedentes, y a las inyecciones no aprobadas, a través de su procedimiento de Listado de Uso de Emergencia (EUL), que utiliza para “evaluar y enumerar” medicamentos no aprobados“ con el objetivo final de acelerar la disponibilidad de estos productos para las personas afectadas por una emergencia de salud pública”. 

Si bien el procedimiento de Listado de Uso de Emergencia (EUL) es oficialmente una etiqueta de asesoramiento destinada a ayudar a los estados miembros a tomar sus propias decisiones, en realidad tiene consecuencias legales de facto que influyen significativamente en la economía global, principalmente a través del papel que desempeñael EUL en el programa global de distribución de vacunas e inyecciones génicas de la OMS, COVAX. Según el sitio web de la OMS , COVAX, “los programas de precalificación/EUL garantizaron una revisión y autorización armonizadas entre los estados miembros”, destacando la influencia legal y regulatoria del EUL de la OMS. 

Si bien COVAX funciona como un sistema crucial de entrega de productos médicos aprobados por la OMS durante las pandemias, también sirve como quizás el ejemplo más claro de la escala y el funcionamiento interno de la corrupción financiera en la OMS. COVAX, como muchas operaciones de la OMS, es una asociación público-privada o una colaboración a largo plazo entre la OMS y empresas privadas. 

Bill Gates, que describió su inversión de 10.000 millones de dólares en vacunas, que produjo un retorno de 200.000 millones de dólares, como su “ mejor inversión ”, está profundamente enredado financieramente en el COVAX de la OMS.  https://www.bitchute.com/embed/paqUl9Pm2QRy

En esta entrevista de 2019, Bill Gates estima que los 10.000 millones de dólares que ha invertido en vacunas durante un período de 20 años se han convertido en 200.000 millones de dólares de beneficio económico. Eso supone un beneficio del 1900%. https://www.bitchute.com/video/paqUl9Pm2QRy/

El objetivo declarado de COVAX durante la pandemia de COVID-19 fue «acelerar el desarrollo, la producción y el acceso equitativo a las pruebas, tratamientos e inyecciones de COVID-19». Fue codirigido por Gavi, fundada por Bill Gates, la OMS, la CEPI y UNICEF, financiada por Gates . Gavi , CEPI , la Fundación Gates y UNICEF han presionado para acelerar el desarrollo de vacunas antes de la pandemia. En particular, el objetivo declarado de Gavi es crear “ mercados saludables ” para las vacunas “ alentando a los fabricantes a reducir los precios de las vacunas para los países más pobres a cambio de una demanda predecible, de alto volumen y a largo plazo para esos países ” .  

Bill Gates «dona» a la OMS 10.000.000.000 de dólares para hacer la década de la Vacunación

COVAX también desarrolló un “ Programa de compensación sin culpa ” que trabajó para “[reducir] el riesgo de litigios para los fabricantes [de vacunas]” al “indemnizar a los fabricantes contra cualquier pérdida financiera en la que puedan incurrir por el despliegue y uso de estas vacunas”.

En otras palabras, la OMS trabajó para exonerar a las grandes farmacéuticas de responsabilidad legal y financiera por los eventos adversos producidos por sus inyecciones COVID rápidamente aprobadas. Así, las grandes farmacéuticas, con la ayuda de la OMS, no sólo pudieron lanzar al mercado productos problemáticos, sino que también pudieron hacerlo con total impunidad ante cualquier daño que esos productos pudieran causar.

Además, el fundador de CEPI y exdirector de Wellcome Trust (ambos grandes financiadores de la OMS), Jeremy Farrar, fue nombrado científico jefe de la OMS en diciembre de 2022, consolidando aún más los objetivos de Gates y CEPI en los objetivos de la OMS. agenda política. 

Incluso trece de los quince miembros del Grupo Asesor Estratégico de Expertos en Inmunización (SAGE) de la OMS provienen directamente de carreras en empresas que son partes interesadas privadas de la OMS, la mayoría de las veces el Wellcome Trust o ONG e instituciones financiadas por Bill Gates o los Gates.  

Las enmiendas en curso al RSI y la redacción del tratado CA+ de la OMS

Las enmiendas en curso al RSI y la redacción del tratado CA+ de la OMS reflejan el último esfuerzo de los socios público-privados de la OMS para solidificar su influencia global utilizando a la organización de las Naciones Unidas (ONU) como representante, codificando su agenda política bajo los auspicios de esta organización sanitaria internacional.

Si bien las convenciones pretenden promover el supuesto interés internacional de la preparación para una pandemia, las medidas que exigen (que ya demostraron que las grandes farmacéuticas obtuvieron ganancias récord durante la pandemia de COVID-19 a pesar de no haber ningún beneficio real para la salud pública) consagrarían los desastres de la era COVID y su política de inyecciones (productos farmacéuticos apresurados y poco probados impuestos al público mediante mandatos) como respuesta predeterminada a las preocupaciones de salud pública, ya sea que se consideren más peligrosas en comparación con el COVID-19. 

Consolidando las medidas COVID-19, allanando el camino para el mercado pandémico 

Las medidas políticas centrales de las enmiendas al RSI y el tratado CA+ de la OMS crearían un mercado financiero permanente centrado en la preparación y respuesta a una pandemia. La ideología central que recorre ambas convenciones es la agenda de “Una sola salud” (One Health). 

Según el sitio web de la OMS , un enfoque de “Una sola salud” para la preparación y respuesta ante una pandemia planea “[vincular] a los humanos, los animales y el medio ambiente” con el fin de “abordar todo el espectro del control de enfermedades: desde la prevención hasta la detección, la preparación y la respuesta” y gestión, y contribuir a la seguridad sanitaria mundial”. En otras palabras, requiere una vigilancia a gran escala del entorno humano-animal, tanto antes de las pandemias con fines de prevención y preparación, como durante las pandemias con fines de respuesta.

También es vital para el modelo One Health la interoperabilidad y accesibilidad de los datos (recopilados mediante vigilancia) o, como dice la OMS, “gobernanza, comunicación, colaboración y coordinación compartidas y efectivas”.

Desde una perspectiva empresarial, la agenda Una sola Salud crearía un mercado cíclico basado en dos principios dominantes: vigilancia constante de patógenos con “potencial pandémico” e investigación y desarrollo sobre contramedidas médicas para estos patógenos (ganacia de función). Esta I+D luego llega al mercado mediante la implementación de políticas regulatorias para el desarrollo y distribución de productos médicos experimentales no aprobados. Las enmiendas recientemente aprobadas al RSI ya han consolidado estos principios en el derecho internacional. La continuación de la redacción del CA+ de la OMS también pretende hacerlo. 

I. Biovigilancia de patógenos con potencial pandémico 

Ambas convenciones exigen específicamente que los estados miembros estén obligados legalmente a construir infraestructura para realizar biovigilancia en poblaciones enteras. Por ejemplo, el CA+ de la OMS requiere que los estados miembros “se comprometan a promover un enfoque de Una Salud para la prevención, preparación y respuesta ante pandemias que sea… integrado, coordinado y colaborativo entre los actores y sectores relevantes”, y a fortalecer la prevención de pandemias a través de una “vigilancia colaborativa” y “vigilancia y prevención de enfermedades transmitidas por vectores”, entre otras disposiciones similares. 

De manera similar, una nueva adición al Anexo 1 del RSI insta a los estados a “desarrollar, fortalecer y mantener las capacidades básicas para coordinar y apoyar al nivel local en la preparación y respuesta a los riesgos para la salud pública… incluso en relación con: vigilancia … implementación de medidas de control …[y] abordar la información errónea y la desinformación; y logística”.

Podría decirse que esto reitera una disposición ya establecida en el RSI previamente aprobado de 2005, que dice que los Estados miembros deben “desarrollar, fortalecer y mantener… la capacidad de detectar, evaluar, notificar e informar eventos de conformidad con este Reglamento”. Sin embargo, cabe destacar que el nuevo RSI vincula la vigilancia con varias otras “capacidades básicas”, incluida la “implementación de medidas de control” y “abordar [la información errónea/desinformación]”. 

Si bien el RSI aprobado no menciona directamente la vigilancia en la interfaz entre humanos y animales, la OMS sigue comprometida con su iniciativa Una Salud . Ambos estatutos juntos obligarían a los estados miembros a utilizar herramientas de biovigilancia para monitorear patógenos peligrosos. 

El último borrador del tratado CA+ de la OMS va más allá en este frente que el RSI, y uno de sus objetivos es reafirmar “la importancia de la colaboración multisectorial a nivel nacional, regional e internacional para salvaguardar la salud humana, incluso a través del enfoque Una Salud”.

Según el borrador, los estados miembros también deberían “promover un enfoque de Una Salud” para la preparación y respuesta a una pandemia que sea “coherente, integrado, coordinado y colaborativo entre todas las organizaciones, sectores y actores relevantes, teniendo en cuenta las circunstancias nacionales”. Además, deben identificar, presumiblemente mediante el desarrollo de capacidades de vigilancia, “los impulsores de las pandemias y la aparición o reaparición de enfermedades en la interfaz entre humanos, animales y medio ambiente…” 

Resulta que las partes interesadas privadas de la OMS comenzaron a financiar iniciativas con este fin años antes de la pandemia de COVID-19. Wellcome Trust, cuyo ex director Jeremy Farrar es ahora científico jefe de la OMS, y la Fundación Gates financiaron un esfuerzo de Declaración de la Industria sobre RAM en 2016 que incluía un “compromiso de la industria para compartir datos de vigilancia de la resistencia a los antimicrobianos”.

Como parte de este compromiso, las compañías farmacéuticas acordaron “seguir compartiendo los datos de vigilancia que generamos con organismos de salud pública y profesionales de la salud… informar sobre el uso adecuado de antibióticos y vacunas y, con el tiempo, ayudar así a aumentar las capacidades de vigilancia a nivel mundial”. 

Dr. Jeremy Farrar nuevo científico jefe para la salud global.  Como científico jefe, Farrar supervisará la división científica de la OMS.. Farrar se convirtió en cómplice del encubrimiento del origen del SARS-CoV-2 por parte de Fauci y Collins.

El Wellcome Trust afirmó, refiriéndose a esta iniciativa, que “Existe una clara necesidad de que los sectores público y privado compartan los datos que recopilan de los estudios de vigilancia de antibióticos locales y globales”. En un comunicado de prensa de 2016, Wellcome Trust emitió un comunicado de prensa abogando por que «los datos de investigación recopilados durante… futuras emergencias de salud pública se pongan a disposición de la manera más rápida y abierta posible».

De manera similar, en una declaración de 2017, Bill Gates enfatizó la importancia del intercambio de datos de biovigilancia: “También tenemos que asegurarnos de que cada país lleve a cabo una vigilancia de rutina para recopilar y verificar inteligencia sobre brotes de enfermedades… debemos asegurarnos de que los países compartan información de manera oportuna, y que existan recursos de laboratorio adecuados para identificar y monitorear patógenos sospechosos”.

Este tipo de biovigilancia no es algo novedoso ni tecnológicamente distante. El programa “Protect” de Palantir y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) supervisó las plantas de tratamiento de aguas residuales en todo Estados Unidos “para predecir nuevos casos de COVID-19 de cinco a once días antes de un brote” como parte de un plan de recopilación masiva de datos durante el pandemia. El programa fue en realidad una resurrección de un programa de vigilancia posterior al 11 de septiembre que había estado alojado en DARPA del Pentágono, pero que fue rápidamente descartado debido a preocupaciones de privacidad.

Bajo Protect, la administración Trump obligó a los hospitales estadounidenses a ingresar “todos los datos sobre los casos de Covid-19 y la información de los pacientes directamente en HHS Protect” amenazando con financiar Medicare y Medicaid a cualquier hospital que no cumpliera. Palantir, que obtuvo todos los datos de COVID del HHS, se creó con una importante participación de la CIA para obtener inteligencia predictiva de la vigilancia civil masiva para detener amenazas –desde ataques terroristas hasta emergencias de salud pública– antes de que sucedan.

Plataforma secreta de inteligencia artificial del HHS para predecir brotes de Covid-19 en EE. UU. con semanas de anticipación. Se ha agregado un nuevo módulo impulsado por inteligencia artificial conocido como HHS Vision al controvertido y secreto sistema HHS Protect para recopilar datos relacionados con Covid-19. Para finales de año, este sistema opaco, aunque cada vez más influyente, podrá predecir brotes de Covid-19 sin las pruebas tradicionales.

Predecir brotes mediante biovigilancia es crucial para impulsar la fase de investigación y desarrollo (I+D) de preparación y respuesta a una pandemia, y una oportunidad crítica para que los productos biotecnológicos se desarrollen y administren fuera del sistema regulatorio típico.

También permite que se desarrollen y comercialicen de manera preventiva, lo que significa que, en las manos equivocadas, los productos podrían acelerarse a través del desarrollo e imponerse al público sin ninguna amenaza material para la salud pública. La mera posibilidad de una amenaza podría desencadenar el mismo estilo de respuesta observado durante la COVID-19 o, peor aún, se podría incentivar la liberación intencional de los mismos patógenos a los que se dirige el desarrollo “preventivo” de medicamentos o inyecciones.

II. Investigación y desarrollo 

Si bien las enmiendas recientemente aprobadas al RSI no exigen que los Estados partes colaboren en “la cooperación en investigación y desarrollo [y] el intercambio tecnológico y de información”, como lo hacían los borradores anteriores , ahora se requiere oficialmente que el Director General de la OMS “apoye a los Estados partes, en… promover la investigación y el desarrollo y fortalecer la producción local de productos sanitarios pertinentes de calidad, seguros y eficaces, y facilitar otras medidas pertinentes para la plena aplicación de esta disposición ”.  

En el último borrador del CA+ de la OMS, los estados miembros deben “cooperar para construir, fortalecer y sostener capacidades e instituciones geográficamente diversas para la investigación y el desarrollo,… sobre la base de una agenda compartida” y “promover la colaboración en la investigación y el acceso a la investigación a través de canales abiertos”. enfoques científicos para el rápido intercambio de información y resultados, especialmente durante las pandemias”. 

Esto ampliaría el programa de la OMS de 2014 , asociado a la CEPI , Plan de Investigación y Desarrollo para Patógenos Emergentes (Plan de Investigación y Desarrollo), cuyo objetivo es «reducir el tiempo entre la declaración de una [pandemia] y la disponibilidad de pruebas, vacunas y medicamentos eficaces». 

Sin embargo, el Plan hace esto no sólo a través de la I+D como medio de respuesta a una pandemia, sino también de la prevención de pandemias mediante la realización de I+D sobre enfermedades que “probablemente causen epidemias en el futuro”. Por lo tanto, el Plan de Investigación y Desarrollo es una extensión de las medidas de biovigilancia de la OMS, ya que encargará la investigación y el desarrollo de productos médicos para patógenos que se detecten mediante vigilancia al estilo “Una sola salud”. 

Este tipo de I+D preventiva ha provocado que los expertos en CA+ de la OMS y el RSI expresen serias preocupaciones sobre su potencial para incentivar la investigación de ganancia de función (GoF). Dado que la investigación del GoF se considera de doble uso, lo que significa que puede usarse tanto para medidas preventivas contra una pandemia como para armas biológicas ofensivas, es posible que la investigación y el desarrollo supuestamente defensivo/pacífico que defiende la OMS también pueda usarse para desarrollar armas biológicas. 

La OMS es claramente consciente de este riesgo. En un documento de seguridad del BioHub de la OMS , por ejemplo, se recomienda que los laboratorios afiliados al programa de intercambio de datos sobre patógenos de la OMS desarrollen un plan de bioseguridad que “incluya las medidas a implementar para prevenir el robo, el uso indebido y la liberación intencional de productos biológicos peligrosos”. El último borrador del CA+ de la OMS también establece que los estados miembros deben implementar “la gestión de riesgos biológicos en el laboratorio para prevenir la exposición accidental, el uso indebido o la liberación inadvertida de patógenos”. 

Ya sea que estas fugas sean accidentales o intencionales o no, el origen muy probable de que el COVID-19 sea una fuga de laboratorio habla de la capacidad de estos patógenos de causar graves perturbaciones globales. Esto genera preocupación sobre si en realidad se está llevando a cabo más I+D preventiva sobre patógenos peligrosos con el propósito de “prepararse”, especialmente considerando que la I+D preventiva presumiblemente desempeñará un papel crucial para llevar al mercado los medicamentos pandémicos propiedad de las grandes farmacéuticas. 

Además, considerando el puesto del fundador de CEPI y ex director de Wellcome Trust, Jeremy Farrar, como científico jefe de la OMS, y el papel de liderazgo que desempeñó CEPI en la financiación de la investigación y el desarrollo de las vacunas contra el COVID-19, así como el papel que siguen desempeñando en la financiación de vacunas para el futuro. coronavirus y contra la supuestamente próxima «Enfermedad X » (además de su modelo de financiación único que reúne a «varios inversores», entre los que se incluyen la Fundación Gates, el Wellcome Trust y el Banco Mundial ), es muy probable que la I+D de estos futuros La CEPI y otras asociaciones público-privadas de la OMS con conflictos de intereses financieros llevarán a cabo investigaciones sobre patógenos con potencial pandémico. 

Wellcome Trust y la Fundación Gates también proporcionaron importantes fondos para iniciar CEPI , que se lanzó en 2017 con el objetivo de «acortar el tiempo que lleva desarrollar nuevas vacunas para proteger contra virus que surgen repentinamente como amenazas a la salud pública…» Clave para acortar el tiempo de desarrollo de las vacunas e inyecciones génicas está el proceso de desregulación, que permite el rápido desarrollo y distribución de productos médicos no aprobados, también un componente vital del nuevo RSI y del CA+ de la OMS. 

III. Vías regulatorias 

El nuevo RSI ofrece suficientes oportunidades regulatorias para que productos médicos no aprobados lleguen al mercado ante una pandemia sin los estudios de seguridad necesarios, condicion perfecta para los riesgosos productos biotecnológicos que conforman las nuevas adquisiciones de las grandes farmacéuticas. Según el nuevo convenio internacional, el Director General debe proporcionar, cuando lo soliciten los Estados miembros, documentos “relacionados con un producto sanitario relevante específico” que serían “proporcionados a la OMS por el fabricante [del medicamento]… con el propósito de facilitar evaluación regulatoria y autorización por parte del Estado Parte ” . 

Nota: Recordemos que Biopharma paga el 75% del presupuesto de la División de Medicamentos de la FDA. Para comercializar un medicamento, una empresa necesita la aprobación de la FDA lo que rara vez resulta en un rechazo total. Como resultado, cada vez hay un mayor número de aprobaciones.

Si bien las implicaciones exactas de esta disposición no están claras, el profesor de derecho internacional Dr. Amrei Müller, cofundador de la Agencia de Responsabilidad Sanitaria Global y experto en CA+ de la OMS y RSI, dijo a Unlimited Hangout que sospecha que esta “disposición una vez más tiene como objetivo acelerar aumentar las autorizaciones de emergencia a nivel nacional durante una pandemia de ‘productos sanitarios relevantes’ recomendados por la OMS que están en investigación”, señalando que la OMS no especifica si estos “productos sanitarios relevantes” deben tener licencia completa o no.

De manera similar, el Director General de la OMS ahora debe “apoyar a los Estados Partes, previa solicitud, en la ampliación y diversificación geográfica de la producción de productos sanitarios pertinentes…”. Los documentos no prohíben a la OMS influir en las leyes regulatorias nacionales para “[ ampliar] la producción de productos sanitarios. 

El CA+ de la OMS busca con más fuerza influir en la política de regulación nacional con este fin. Pide a los estados miembros que “tomen medidas para garantizar que [tengan] los marcos legales, administrativos y financieros establecidos para respaldar las autorizaciones regulatorias de emergencia para la aprobación efectiva y oportuna de productos sanitarios relacionados con una pandemia durante una pandemia” incluso a través de “asistencia técnica y cooperación con la OMS”, un intento de exigir que los estados miembros implementen políticas de autorización de uso de emergencia a nivel nacional para llevar a cabo la agenda de respuesta rápida de los socios público-privados de la OMS.  

Estas disposiciones amplían los objetivos del programa público-privado de la OMS, el Acelerador de Acceso a Herramientas COVID-19 (ACT) , “para acelerar el desarrollo, la producción y el acceso equitativo a las pruebas, tratamientos e inyecciones COVID-19” para enfermedades más allá de COVID-19.  

El Acelerador ACT , del que forma parte COVAX, actuó como una asociación que incluía a la OMS, la Fundación Gates, GAVI, Wellcome Trust y el Banco Mundial, todos ellos importantes financiadores de la OMS y socios de la Fundación Gates (incluidos el Banco Mundial y Wellcome Confianza ). En particular, el Banco Mundial y la Fundación Gates financiaron en 2017 un programa de la Organización Mundial de Sanidad Animal para desarrollar “bancos de vacunas” que buscaban “[permitir] el suministro rápido de reservas de vacunas de emergencia… para vacunar a poblaciones animales específicas en riesgo. »  Transporte vacunas COVAX, COVID-19 en 2021 – Ver: CNN Español

Un documento de política del Banco Mundial de 2018 , al que contribuyó la Fundación Gates, describe su “Fondo de Emergencia Pandémica”, que también incluía un “fondo fiduciario del CEPI” en el que el Banco Mundial financió al CEPI para desarrollar vacunas con el fin de “[acelerar] el desarrollo de vacunas contra patógenos con potencial pandémico…”

Parte de esta “aceleración” implicó ayudar a “ mejorar la capacidad regulatoria en los países de bajos ingresos y preparar a los países y sitios para realizar ensayos clínicos…” con el fin de garantizar que los países de bajos ingresos “ tengan acceso rápido y efectivo a vacunas.

Un ejemplo de esto es lo que ocurrió en Argentina cuando la Ministra de Salud, en ese entonces Carla Vizzotti, autorizó el uso de una vacuna dirigida a mujeres embarazadas contra el virus sincitial respiratorio, a pesar que tiene riesgo de partos prematuros que provocaran muertes neonatales, aumenta el riesgo de enfermedades neurologicas y han habido muchos casos de parálisis provocados por esta vacuna, informa el CDC. Y lo mas insólito es que es obligatoria para todas las madres que se encuentren en el período gestacional comprendido entre las semanas 32 a 36.

El acto de “mejorar la capacidad regulatoria” probablemente se refiere a alterar las leyes regulatorias de países que no cuentan con programas de desregulación de emergencia, como la autorización de uso de emergencia de EE. UU. o la Solicitud de Nuevos Medicamentos en Investigación de la FDA , que permite a las compañías farmacéuticas solicitar aprobación de la FDA para administrar productos biotecnológicos no aprobados a humanos. 

Wellcome Leap

Sin embargo, los financiadores de la OMS también están buscando otros métodos más “innovadores” para impulsar el desarrollo acelerado de fármacos. Cuando Jeremy Farrar todavía era director de Wellcome Trust, lanzó una iniciativa dirigida por dos ex directores de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA) llamada Wellcome Leap. Wellcome Leap, una iteración global de facto de DARPA, tiene como objetivo emplear órganos humanos creados sintéticamente para probar los efectos de productos farmacéuticos. Si tiene éxito, este método de prueba podría reemplazar los ensayos de medicamentos en animales (o tal vez incluso en humanos) utilizando “órganos cultivados o editados genéticamente”, reduciendo aún más el tiempo que llevaría llevar los medicamentos al mercado. 

Un “salto” hacia la destrucción de la humanidad la fundación de investigación médica más rica del mundo, Wellcome Trust, se ha asociado con un par de ex directores de DARPA que construyeron las fábricas de Silicon Valley para iniciar una era de vigilancia de pesadilla, incluso para bebés de tan solo tres meses de edad. Su agenda sólo puede avanzar si lo permitimos.

Sin embargo , parece que incluso el Comité de Revisión de la OMS encargado de criticar las enmiendas cree que las ambiciones regulatorias de la OMS pueden ir demasiado lejos considerando los poderes de la organización. Señaló que “puede ser desaconsejable desde una perspectiva legal exigir que la OMS desarrolle tales directrices regulatorias [nacionales] [para los estados miembros]”. Obviamente, estas recomendaciones no disuadieron a la OMS de implementar oportunidades de desregulación para los estados miembros en el nuevo RSI, ni tampoco del CA+ de la OMS. 

La  procedimiento de Listado de Uso de Emergencia (EUL) de la OMS para la inyecciones contra la COVID-19, que causó efectos secundarios graves, demostró las consecuencias de lanzar un medicamento al mercado con pretexto de emergencia. Pero esto incita más a los que manejan la OMS dado que proporcionar una opción regulatoria para medicamentos biológicos no aprobados que permite a los desarrolladores saltarse los procedimientos de prueba normales es enormemente rentable.

En medio del caos y campañas de miedo, los estándares de la mayoría de las personas se dejan de lado en nombre de la supuesta seguridad. 

IV. Exigir productos médicos no aprobados, sistema de Pasaporte digital

En julio de 2023, la Organización Mundial de la Salud (OMS) adoptó el sistema de pasaporte digital COVID-19 de la UE.

También conocido como “pase de inmunidad”, el pasaporte digital de la inyecciones COVID-19 de la UE dictaba la capacidad de viajar en función de tres criterios :

  • su historial de vacunación,
  • resultados negativos de las pruebas y
  • registros de infecciones previas.

Si bien no se requerían pasaportes de inyecciones digitalizados, todos contenían “’un código QR firmado digitalmente’ que [se escanearía] al ingresar a un país”. Antes de que la OMS adoptara el sistema, 51 países utilizaron el sistema de la UE para dictar quién podía ingresar a sus fronteras (y presumiblemente influir en muchas personas para que se vacunaran) desde julio de 2021 hasta junio de 2023. 

Si bien un pasaporte de vacunación digital no funciona como un mandato estricto en el que todos los ciudadanos de una población determinada se ven obligados a vacunarse, actúa como un mandato condicional, que ofrece la ilusión de elegir, pero que, en realidad, restringe el derecho civil y libertades de quienes no las cumplan. 

Por ejemplo, muchos países como Austria implementaron tácticas de mandato “suaves”, como prohibir a los no vacunados comer en restaurantes, cafeterías e ir a la peluquería. Estados Unidos aplicó tácticas similares, dejando en manos del sector privado y de ciertos organismos gubernamentales la tarea de hacer cumplir los mandatos de vacunación, lo que provocó que miles de estadounidenses perdieran sus empleos por negarse a vacunarse (ver también aquí ).

La administración Biden también hizo obligatoria la vacunación del personal de los hospitales de Medicare y Medicaid al amenazar su financiación federal, lo que provocó que al menos cientos de trabajadores de la salud fueran despedidos o suspendidos de sus trabajos.

Exigir una prueba de vacunación como requisito previo para derechos que de otro modo serían estándar (como tener un trabajo, comer en un restaurante o viajar) obliga a las personas que de otro modo no tomarían el medicamento a hacerlo y castiga a quienes expresan su libre albedrío. 

Como dijo el Dr. Fauci en una entrevista sobre un libro , “se ha demostrado que cuando se le pones las cosas difíciles a las personas en sus vidas, pierden sus tonterías ideológicas y se vacunan”. 

La coerción permitida por el mandato basado en viajes en realidad ya estaba establecida en el RSI de 2005, que permite a los estados miembros exigir “prueba de vacunación u otra profilaxis” para ingresar a un país “cuando sea necesario para determinar si existe un riesgo para la salud pública; como condición de entrada para cualquier viajero que busque residencia temporal o permanente”, o para “lograr el mismo o mayor nivel de protección de la salud que las recomendaciones de la OMS”, permitiendo esencialmente a los estados miembros hacer cualquier cosa en nombre de reducir la propagación de enfermedades. 

El nuevo RSI amplía esto al articular los detalles de la tecnología que presumiblemente se utilizará para verificar los registros médicos durante futuras pandemias. En concreto, señala que los “documentos de salud” pueden ser “expedidos en formato digital o no digital, sujeto a las obligaciones de cualquier Estado Parte ” (énfasis agregado). El RSI ahora también requiere que la OMS «desarrolle y actualice [con los estados miembros]… orientación técnica, incluidas especificaciones o estándares relacionados con la emisión y verificación de la autenticidad de los documentos de salud, tanto en formato digital como no digital».

Es de suponer que el científico jefe de la OMS, Jeremy Farrar, tendrá una gran influencia en la redacción de estas “normas” relacionadas con los pasaportes de vacunas e inyeccopnes de ARNm. Además, su empresa CEPI es un investigador central y desarrollador de tecnología de vacunas e inyecciones contra la «Enfermedad X», lo que aumenta la probabilidad de que las partes interesadas privadas de la OMS influyan en la toma de decisiones en torno a este proceso.  

https://cienciaysaludnatural.com/pasaportes-de-vacunas-id-digital-es-el-fin-de-la-privacidad-y-la-libertad-personal/ La GDHCN de la OMS – FUENTE : OMS en Twitter/X

La Red Mundial de Certificación de Salud Digital de la OMS (Global Digital Health Certification Network (GDHCN)), que se está desarrollando actualmente, es un buen indicador de cómo se llevarán a cabo estos controles de salud. La GDHCN amplía las “redes regionales” que utilizaba el sistema de Certificado Digital COVID-19 de la UE, presumiblemente a escala “global”.

La GDHCN tiene como objetivo digitalizar los certificados de vacunación “dentro y a través de las fronteras” y actuar como un centro de información digital para almacenar los registros médicos relevantes de los ciudadanos que viajan. En otras palabras, rastreará  credenciales de salud firmadas digitalmente (por ejemplo, tarjetas de vacunación, registros médicos)”, o qué medicamentos/vacunas desarrollados por las grandes farmacéuticas han tomado los ciudadanos del mundo, para que los estados miembros utilicen esos datos para dictar los derechos humanos de los viajeros. 

La OMS se jacta en su sitio web de la “interoperabilidad” del sistema, es decir, de su capacidad para trabajar con otras “redes regionales existentes” que ya se han establecido para verificar las credenciales sanitarias. La interoperabilidad, quizás el atributo más importante de la GDHCN, es un componente necesario del enfoque de “Una Salud” para la preparación ante una pandemia. 

Hace posible el objetivo del tratado CA+ de la OMS de “ colaboración multisectorial a nivel nacional, regional e internacional para salvaguardar la salud humana …” y el mandato para los estados miembros de “desarrollar, fortalecer [e] implementar…prevención nacional multisectorial integral de pandemias” a través de “ colaboración ” vigilancia ” al proporcionar una infraestructura digital para el intercambio masivo de datos. Con este nivel de colaboración, los gobiernos pueden acceder a los registros médicos relevantes de todos los ciudadanos con solo presionar un botón y potencialmente compartirlos con sus socios del sector privado. 

Si bien la interoperabilidad a menudo se vende como una forma de “descentralizar” un sistema global de vigilancia e identificación mediante la subcontratación de estas tareas a múltiples organizaciones, la interoperabilidad también permite que los datos de diferentes gobiernos y proveedores estén centralizados y accesibles en la misma base de datos global. En otras palabras, la interoperabilidad permite la centralización de facto a pesar de que haya muchos proveedores separados, lo que proporciona simplemente una ilusión de descentralización.

Convenientemente, la GDHCN se está desarrollando al mismo tiempo que la ONU busca imponer la identificación digital como un “derecho humano”, o más bien como una condición para acceder a otros derechos humanos, para toda la ciudadanía global para 2030, como lo establece su Objetivo de Desarrollo Sostenible 16.9 .

Los objetivos de identificación digital de la ONU se están llevando a cabo a través de asociaciones público-privadas globales, principalmente la Alianza ID 2020 (ahora parte de la Alianza de Impacto Digital). El Manifiesto de la Alianza ID2020 afirma que “las personas necesitan una forma confiable y verificable de demostrar quiénes son, tanto en el mundo físico como en línea”. Una de las formas en que busca hacerlo es “proporcionando una ruta hacia la interoperabilidad técnica”.

Curiosamente, esta “alianza” también cuenta con el respaldo de Gavi de Bill Gates, lo que plantea la cuestión de en qué medida la identificación digital, y por ende los pasaportes sanitarios digitales, son parte de la promoción de mercados de vacunas e inyecciones de ARNm “saludables”. Otros patrocinadores de ID2020 incluyen a Microsoft y la Fundación Rockefeller, que también es un importante financiador de la OMS.

La mayoría de los estados miembros de la OMS el 21 de julio de 2022, durante una reunión del Órgano de Negociación Intergubernamental (INB) de la OMS, (WHO’s Intergovernmental Negotiating Body INB), acordaron buscar un instrumento legalmente vinculante que contenga «elementos legalmente vinculantes y no vinculantes». Ver más en https://cienciaysaludnatural.com/la-oms-tratado-mundial-para-pandemias-mil-millones-para-pasaportes-de-vacunas/

Los sistemas de verificación de este tamaño pondrán el derecho de los ciudadanos a realizar actividades básicas (como viajar, comer en un restaurante o trabajar) en manos de los gobiernos y potencialmente de los empleadores. Los derechos de los civiles serán condicionales y estarán dictados por los datos almacenados en un enorme centro digital que es global en su capacidad de compartir. No sólo los gobiernos nacionales tendrán acceso a la información sanitaria de sus propios ciudadanos bajo este sistema, sino que también lo tendrá toda una burocracia global.   

Avaricia corporativa: una verdadera pandemia 

El precipicio de las patentes al que se enfrentan las grandes farmacéuticas es pronunciado, y las barreras de seguridad que anteriormente impedían que las empresas descendieran demasiado de la cima se han reducido como resultado por absorber su competencia y la consolidación de la industria por parte de los gigantes corporativos a lo largo de las décadas. 

Con muy pocas compañías farmacéuticas tradicionales que puedan fusionarse o adquirirse, ha comenzado el cambio hacia la biotecnología/productos biológicos, un tipo “impredecible” de tecnología farmacológica diseñada para apuntar a partes específicas de la anatomía humana.

La replicación aparentemente imposible de estos medicamentos, su costoso desarrollo y los difíciles obstáculos regulatorios para llevar sus versiones “biosimilares” al mercado han convencido a las compañías farmacéuticas de que la biotecnología puede protegerlas del cavernoso abismo de patentes que deben enfrentar. Sin embargo, los peligros que rodean a estos medicamentos crean obstáculos que los medicamentos típicos no tienen que enfrentar con tanta frecuencia para llegar al mercado y ganarse la confianza de los consumidores. 

Ahora que la OMS ha aprobado su RSI revisado y continúa redactando el CA+ de la OMS, estas políticas están abriendo un camino cada vez más probable para los medicamentos biotecnológicos, ya sea que se aprueben mediante procesos regulatorios tradicionales o no.

El modelo de preparación para una pandemia One Health crea todo un mercado pandémico dedicado a la producción de medicamentos experimentales, logrado mediante la biovigilancia constante de poblaciones enteras y la investigación y el desarrollo de patógenos con potencial pandémico.

Anteriormente, empresas de tecnología como Palantir habían realizado esta biovigilancia, y empresas como Google y Oracle participaban en el aparato de biovigilancia más amplio. La investigación y el desarrollo sobre patógenos peligrosos han sido realizados por ONG financiadas por Gates como CEPI, que realizaron trabajos con las vacunas COVID-19 enormemente rentables. 

Tanto el CA+ de la OMS como el RSI han normalizado y ampliado aún más lo que ya se consideraba la “nueva normalidad” durante la pandemia de COVID-19; específicamente, llevar a cabo una biovigilancia masiva para predecir y prepararse para brotes pandémicos, implementar una desregulación de emergencia para que los medicamentos experimentales se distribuyan en masa mientras se dice a la gente que son “ seguros y eficaces ” y mandatos condicionales que determinan los derechos humanos de cada uno en función de su estado de vacunación. 

La codificación del derecho de las naciones a exigir la verificación digital y la divulgación de los registros médicos de las personas durante una pandemia, así como la presión para proporcionar acceso masivo a esos datos a través de la interoperabilidad, permite a los países tomar de facto cualquier medida para “frenar la propagación ” de la enfermedad de un virus independientemente de cuán atrozmente pueda violar los derechos humanos.

La implementación de la GDHCN haría que el derecho de una persona a la autonomía corporal dependiera de su voluntad de sacrificar su derecho a viajar, y si la tecnología se reutiliza a nivel nacional, tal vez también se eliminen otros derechos. 

La corrupción financiera que infecta a la OMS la ha dejado sujeta a la influencia de sus accionistas privados, quienes crean políticas que enriquecen a las grandes farmacéuticas.

A medida que la línea entre el llamado sector público y privado se desdibuja, la codicia que impulsa a las grandes farmacéuticas ha alcanzado niveles completamente irracionales. El próximo mercado de pandemias biotecnológicas, el nuevo corazón de nuestro sistema de “salud pública”, funciona sobre la base del miedo, encarnado en la creación de un sistema global de biovigilancia supuestamente destinado a prevenir pandemias cada vez mayores y la manipulación, difundida a través de mandatos y control de la información.

Irónicamente, si bien este sistema se promociona como una forma de prevención de pandemias, potencialmente incentiva la investigación de ganancia de función que permite la militarización de las enfermedades naturales como arma.

Justificar la velocidad por encima del rigor y la autoridad por encima de la libertad parecen ser requisitos previos necesarios para el éxito empresarial en lo que se está convirtiendo en el mercado pandémico de la biotecnología.

Irónicamente, las grandes farmacéuticas llegaron a este punto de casi desaparición como resultado de su propio deseo de riqueza y expansión, y de su insistencia en que los productos médicos deben generar ganancias antes que resultados positivos para la salud.

Esta mentalidad cultural ha llevado al mundo hasta aquí, en un enfrentamiento final entre la captura corporativa globalizada de todas las instituciones de “salud pública” y la verdad: el tratamiento más potente para esta pandemia corporativa. 

Un gran apagón de Microsoft ha provocado el caos en todo el mundo

Un gran apagón de Microsoft ha provocado el caos en todo el mundo

El caos estalló en todo el mundo hoy (19 de julio de 2024) cuando una caída de Microsoft ha causado estragos en los servicios de salud, viajes, banca y supermercados. La crisis duró unas pocas horas, sin embargo, el apagón informático mundial de hoy puede tardar ” semanas ” en resolverse, ya que los expertos dijeron a The US Sun que, aunque se ha publicado una solución oficial, los problemas relacionados con el apagón informático masivo continuarán.

Es muy interesante ver cómo esta situación ha afectado al mundo entero y plantea la pregunta de qué pasaría si nuestras vidas dependieran de la TI (Tecnología de Información) y la IA (Inteligencia Artificial), como están planeando las élites globales.

Los principales aeropuertos, aerolíneas, ferrocarriles, bancos, hospitales y empresas se han visto afectados por el problema CrowdStrike que provocó perturbaciones internacionales.

Caos sanitario

Las consultas médicas de cabecera del NHS han confirmado que no pueden acceder a los registros de los pacientes ni reservar citas.

Los médicos británicos

Los consultorios informaron que no pueden acceder al sistema web EMIS. EMIS Web es el sistema clínico más utilizado para atención primaria en el Reino Unido. Muchas citas tuvieron que cancelarse o modificarse.

La Asociación Nacional de Farmacia (NPA) también confirmó que la interrupción de TI está afectando a las farmacias comunitarias.

Servicios sanitarios mundiales afectados

Hay informes de que dos hospitales alemanes se han visto obligados a cancelar operaciones de emergencia esta mañana.

Los hospitales de las ciudades de Lübeck y Kiel, en el norte de Alemania, cancelaron todas las operaciones programadas para hoy.

Mientras tanto, el servicio de urgencias del hospital Scheper de los Países Bajos ha cerrado debido a un fallo informático global.

Interrupción de los viajes

El gran apagón informático también ha provocado cancelaciones masivas de trenes y retrasos para los pasajeros que viajaban esta mañana.

Servicios ferroviarios afectados en el Reino Unido

National Rail ha confirmaddo que algunos operadores de trenes no pueden acceder a los diagramas de conductores en ciertos lugares, lo que genera posibles cancelaciones de trenes con poca antelación.

Otra importante empresa ferroviaria, TransPennine Express, informó cómo algunas estaciones y sistemas de TPE están teniendo problemas de TI y sugirió a los viajeros comprar billetes por innternet.

Trastornos internacionales

Hasta ahora ha habido informes de que el sistema MTA de la ciudad de Nueva York se ha visto afectado por el colapso el fallo informático.

Los viajeros que viajan en los trenes del Metro de Washington DC también sufren retrasos.

Retrasos y cancelaciones de vuelos.

Los turistas en los principales aeropuertos del mundo están furiosos ante las largas colas y las cancelaciones de vuelos que se han producido hoy.

Más de 100 aviones tuvieron que quedar en tierra en el Reino Unido a causa del apagón de Microsoft, mientras que más de 3.300 vuelos fueron cancelados en todo el mundo.

La popular aerolínea de bajo coste Ryanair simplemente recomendó a los pasajeros que se fueran a casa.

Los aeropuertos se han visto afectados por ‘pantallas azules de la muerte’ que han dejado a los pasajeros en medio de retrasos y cancelaciones.

Aeropuertos de todo el mundo afectados

Los aeropuertos de Australia, España, Ámsterdam, Alemania, India y Estados Unidos también se han visto afectados por el enorme problema informático.

Los pasajeros de American Airlines se vieron desolados esta mañana cuando se cancelaron todos los vuelos.

Incluso las aerolíneas más pequeñas se han visto afectadas, con Allegiant Air, Spirit Airlines, Frontier y SunCountry dejando en tierra sus aviones.

Mientras tanto, viajeros frustrados en el aeropuerto de San Francisco han informado de vuelos suspendidos.

En el aeropuerto metropolitano de Detroit se han visto escenas caóticas similares, y los pasajeros han compartido imágenes de colas cada vez mayores en las redes virtuales de comunicación.

Al otro lado del mundo, el aeropuerto de Bombay ha revelado que sus mostradores de facturación han cerrado para los vuelos de IndiGo, Akasa y Spice Jet.

En la India se han utilizado tarjetas de embarque de papel debido a los cortes de suministro.

Y la importante aerolínea australiana Qantas más tarde mantuvo todos los aviones en la pista.

El aeropuerto Schipol de Ámsterdam informó a los turistas que los vuelos hacia y desde los Países Bajos estaban afectados.

En el resto de Europa, la asociación aeroportuaria española AENA informó problemas en 42 aeropuertos, incluidos los aeropuertos de Ibiza y Palma Mallorca.

El aeropuerto Fiumicino de Roma también informó de colas más largas.

En Alemania, el aeropuerto de Hamburgo y el aeropuerto BER de Berlín también se vieron afectados por la interrupción del servicio informático.

El aeropuerto de La Haya, en Rotterdam, advirtió a los viajeros que los tiempos de espera serían más largos.

Por su parte, el aeropuerto internacional de Narita, al este de Tokio, pidió a los viajeros que tuvieran cuidado con los retrasos en la facturación.

Y el aeropuerto Suvarnabhumi de Bangkok informó de colas más largas, mientras que los pasajeros de Hong Kong Express Airways han sufrido retrasos en el aeropuerto internacional de Hong Kong.

Tiendas y supermercados

Como la caída mundial de la informática también afectó a los bancos, en muchas tiendas y supermercados los clientes tuvieron que confiar únicamente en los antiguos y seguros pagos en efectivo.

Según los informes, miles de personas también se han quedado sin acceso a sus bancos debido a la interrupción.

Los servicios y transacciones en línea entre bancos en Australia se han visto afectados y Beyond Bank Australia dijo que estaba ” experimentando problemas intermitentes “.

Advirtieron que los clientes pueden tener problemas para usar sus tarjetas y acceder a cuentas en línea.

La Bolsa de Londres también se ha visto afectada, según informes preocupantes.

En las pantallas de portátiles y ordenadores de todo el mundo han aparecido los denominados errores de pantalla azul de la muerte (BSOD) para los usuarios de Microsoft.

La pantalla azul obliga esencialmente a los portátiles y ordenadores a apagarse y reiniciarse de repente.

Sin embargo, los usuarios dicen que les aparece la pantalla varias veces seguidas, cerrándoles el PC por completo.

Las pantallas de autoservicio también muestran la BSOD en tiendas de toda Australia, como Woolworths y Coles.

Las tiendas se han visto obligadas a cerrar temporalmente debido a problemas tecnológicos.

Lo que ha ocurrido actualmente

Varios servicios de Microsoft en Europa, Asia, América del Norte y Oceanía han tenido problemas tecnológicos en las últimas horas.

El caos se produce en el que será el día de mayor tráfico aéreo de los últimos cinco años, con el comienzo de las vacaciones escolares de verano.

Los problemas tecnológicos han afectado la capacidad de las personas para acceder a las aplicaciones y servicios de Microsoft 365.

La empresa de software de ciberseguridad CrowdStrike, que depende en gran medida de la inteligencia artificial, afirma haber identificado el problema detrás de la interrupción global como una actualización antivirus defectuosa.

Al parecer, la empresa es utilizada por Microsoft para gestionar diversas actualizaciones de sus sistemas.

Desde entonces, Microsoft ha anunciado que está tomando ” medidas de mitigación ” contra estos problemas.

Declararon a través de X: “Nuestros servicios siguen experimentando mejoras continuas mientras continuamos tomando medidas de mitigación.

Seguimos comprometidos a tratar este evento con la máxima prioridad y urgencia mientras continuamos abordando el impacto persistente para las aplicaciones restantes de Microsoft 365 que se encuentran en un estado degradado”.

Un portavoz de Microsoft dijo a Bloomberg que una “resolución es inminente” está próxima.

CrowdStrike dijo en un post en su página web: “CrowdStrike es consciente de los informes de caídas en Windows relacionadas con el Falcon Sensor”.

Confirmaron que no fue un hackeo ni un ciberataque lo que causó los problemas.

El presidente y director ejecutivo, George Kurtz, dijo en X: “CrowdStrike está trabajando activamente con los clientes afectados por un defecto encontrado en una única actualización de contenido para los hosts de Windows. El problema ha sido identificado, aislado y se ha implementado una solución”.

Los pasajeros en el aeropuerto de Gatwick quedaron atrapados durante horas sin noticias sobre su viaje.

Senad Arun, fundador de la empresa de investigación cibernética Imperum, describió el caos como “ el día de CrowdStrike Doom ”. (el Día del Juicio Final de CrowdStrike”).

Otro destacado experto en ciberseguridad calificó el incidente de ” imperdonable “.

Alan Woodward, profesor de ciberseguridad en la Universidad de Surrey, dijo: “La gran pregunta es: ¿cómo pasó eso  las pruebas? ¿Cómo se lanzó al mundo?

Es simplemente imperdonable que algo tan incrustado como eso pueda causar tales problemas……. No puede haber sido probado exhaustivamente antes de su lanzamiento o lo habrían visto ”.

Los pasajeros se quedan mirando pantallas negras en el aeropuerto de Berlín-Brandeburgo

Sendero de destrucción

por Jamie Harris, editor asistente de tecnología y ciencia de The Sun

Este es probablemente uno de los mayores apagones que he presenciado en mi carrera como periodista tecnológico.

Ha tenido un alcance tan amplio que ha afectado a varios países y sectores: aviación, sanidad, viajes, ferrocarriles, bancos y grandes y pequeñas empresas.

Se trata de un apagón enorme que dura ya varias horas.

Hemos visto importantes cadenas de televisión fuera de antena y otras emisoras en dificultades, sistemas bancarios, médicos de cabecera, sistemas, aerolíneas, de todo.

Hemos visto importantes cadenas de televisión fuera de antena y otras emisoras con problemas, sistemas bancarios, GP, sistemas, aerolíneas… de todo.

Personas de todo el mundo han dicho que les ha aparecido la temida “pantalla azul de la muerte”, que todos hemos visto antes y que no es ideal para la gente que entra a trabajar un viernes por la mañana.

Los fallos se producen a menudo y suelen ser breves, pero en este caso han durado horas. Nadie parece saber realmente cuándo se solucionará por completo, por lo que sólo queda un rastro de destrucción a su paso.

La situación demuestra lo dependientes que somos de la tecnología hoy en día. La mayoría de los aspectos de nuestras vidas dependen de los sistemas informáticos, así que si uno se cae, se produce un efecto dominó que todos sufrimos.

 yogaesoteric

¿Qué es la gran inversión?

Para entender la locura de los acontecimientos geopolíticos actuales y futuros, es necesario entender La Gran Inversión.

Durante el último año comencé a utilizar la frase “La Gran Inversión” o, simplemente, El Falso Despertar. Todavía tengo que explicar por qué uso este término y qué significa exactamente, aunque estoy seguro de que los lectores/espectadores ya lo habrán comprendido en su mayoría.

Defino La Gran Inversión como:

“Un falso despertar mediante el cual las masas de amantes de la libertad, que se despiertan, son engañadas (una vez más) para que caigan en la trampa de falsos héroes y mesías, y manipuladas sigilosamente para que apoyen su propia esclavitud”.

Esencialmente, creo que el ascenso de actores como Elon Musk, Donald Trump, Tucker Carlson y otras figuras es parte de un falso despertar que está teniendo lugar donde muchos amantes de la libertad en todo el mundo miran a estas figuras como la última línea de defensa contra La Clase Depredadora y el Estado Tecnocrático.

A pesar de los ataques contra Trump y Musk, sus acciones revelan su verdadero carácter. He documentado ampliamente las formas en que Donald Trump sirve al pantano [probablemente a una de sus varias ramificaciones] y no es amigo de la libertad. Mientras escribo esto, Donald Trump acaba de anunciar que su elección para vicepresidente es JD Vance, un sionista cuyo ascenso se produjo como resultado de 15 millones de dólares aportados por Peter Thiel, el infame tech bro de PayPal, la empresa de vigilancia Palantir y un Miembro del comité directivo del Grupo Bilderberg.

Sé que a algunos les resultará difícil aceptar esto a la luz del intento de asesinato, pero siga leyendo.

Mientras tanto, Musk promueve chips cerebrales, el transhumanismo utiliza sus satélites Star Link para apoyar la guerra en Ucrania y, en general, promueve una visión del mundo que se parece mucho a la Cuarta Revolución Industrial del Foro Económico Mundial.

Creo que el panorama más amplio es que la Clase Depredadora quiere que Donald Trump gane las elecciones estadounidenses para crear más falsas esperanzas en los estadounidenses desilusionados, conservadores y libertarios que no han visto lo que Trump realmente representa. A partir de ahí, veremos la presión hacia más caos antes de que se implemente el orden.

Por ejemplo, tomemos el reciente cambio de los medios de comunicación para pedir que Biden renuncie como candidato debido a su horrible actuación en el debate. No hay manera de que la Clase Depredadora, los medios corporativos complacientes y los hackers del Partido Demócrata no supieran lo que millones de estadounidenses saben desde hace más de un año.

El Comité Nacional Demócrata (y sus controladores) podrían haber destituido a Biden hace mucho tiempo, pero es más interesante y mantiene la atención del público en las elecciones si cada dos días los titulares dicen: “¿Se presentará? ¿Se apartará?

Si Trump gana las elecciones (como parece muy probable), los poderes que desearían ganar serán capaces de pacificar a muchos amantes de la libertad que han caído en el engaño de Trump y desencadenar nuevamente la locura de la izquierda. Deberíamos esperar más disturbios, más peleas en las calles y más autoritarismo por parte de la administración Trump. 

Esbozando la gran inversión

Escuché por primera vez el término Gran Inversión por la creadora de contenidos cristiana Probably Alexandra. Aunque no comparto su perspectiva cristiana, creo que acierta en su análisis.

Tras el intento de asesinato, Alexandra recordó a sus lectores TGI:

“El concepto de “La Gran Inversión” sugiere que los principales acontecimientos sociales se manipulan o escenifican para crear una narrativa específica o lograr ciertos objetivos. Los incidentes de violencia, especialmente en los que participan figuras destacadas, infunden miedo e incertidumbre entre la población. Este miedo puede aprovecharse para introducir nuevas políticas, aumentar la vigilancia o justificar medidas autoritarias. En este caso, probablemente promoverá la “agenda del lado luminoso” de hacerse con el control de las instituciones actuales y lograr cambios. Quieren cambiar la narrativa y continuar fomentando ‘la inversión’”.

En un blog anterior, Alexandra define TGI con más detalle:

“La Inversión representa el cambio del orden mundial actual a un orden mundial más nuevo, pero no de la manera que la mayoría está condicionada a esperar. Es la inversión de la “oscuridad” a la “luz”.

El gran reinicio (oscuridad) versus el gran despertar (luz)

Los globalistas constituyen la mayor parte de lo que cae en el lado “oscuro”. Se les identifican por sus creencias. Por el bien de este artículo, cualquier persona (a la vista del público) que esté en contra de los ideales globalistas, se consideraría que está a favor de la agenda del lado de la “luz” y todo lo que conlleva; lo contrario.

En este momento, es“Globalismo”(centralización, censura masiva, el Gran Reinicio, etc.)versus“Nacionalismo”(descentralización, libertad de expresión, El Gran Despertar, soberanía, etc.).

Inversión: la palabra ‘inversión’ significa la acción de invertir algo o el estado de estar invertido; una reversión. 

En algunos casos, la inversión es lo opuesto: oscuridad y luz, calor y frío, etc. Estos opuestos son polos unos de otros. Los polos consisten en dos ideas opuestas que varían sólo en grado, unidas por un eje”.

Este debate sobre “polos” y las ideas que parecen opuestas pero que en realidad están alineadas de un modo a otro, es vital para nuestra conversación. Así como los partidos Republicano y Demócrata en Estados Unidos a menudo parecen diametralmente opuestos, a menudo vemos cómo se alinean en lo que respecta a la guerra, la vigilancia, el apoyo al sionismo y, en términos generales, la privación de los derechos del pueblo. Claro, hay ligeras diferencias, pero al fin y al cabo sirven a los mismos amos.

Alexandra cree que ha habido inversiones a lo largo de la historia de la humanidad, pero la actual representa un cambio mundial. Nuevamente, habla de los polos de la oscuridad y la luz.

“La Gran Inversión consta de dos polos: la oscuridad y la luz. También puedes pensar en los polos como la mano derecha o izquierda unida por el cuerpo (eje). No son independientes entre sí, ni enemigos. Trabajan en una relación simbiótica para lograr un objetivo compartido, sin importar cuán complicado parezca. Los polos están unidos por un eje, por lo tanto, los dos nunca pueden estar separados, sólo pueden variar en grado.

Se dividen para conquistar”.

Estoy de acuerdo con la evaluación de Alexandra y creo que podemos mirar más atrás para encontrar fuentes que advierten de un fenómeno similar.

Rudolf Steiner: Lucifer, Ahriman y la conciencia de Cristo

En la conferencia de Rudolf Steiner de 1919, Lucifer y Ahriman, el filósofo antroposófico esboza un concepto similar utilizando el nombre de Cristo, Lucifer y lo que él llama Ahriman. Nuevamente, aunque no soy cristiano, creo que el análisis de Steiner se puede aplicar a nuestras circunstancias actuales independientemente de las creencias religiosas (o la falta de ellas). Ya sea que uno crea o no que estas fuerzas representan seres físicos/espirituales literales o no, creo que este no es un tema que deba ignorarse.

Steiner creía que existen dos fuerzas del mal, una en la forma de Lucifer y otra en la forma de Ahriman. Aunque estas dos fuerzas aparecen y encarnan de manera diferente, en realidad están en el mismo plano de existencia, con la energía Crística por encima y más allá de ambas fuerzas.

La Steiner Online Library dice que Steiner advirtió que “la humanidad debe recorrer un camino intermedio consciente entre los dos poderes” tentadores “de Lucifer y Ahriman”. Mientras que se podría decir que Lucifer representa una luz falsa, con un enfoque en prácticas espirituales que alejan a las personas de la energía Crística, Ahriman representa el materialismo y una energía más mecánica y estática.

Aunque parezca que las dos fuerzas trabajan una contra la otra o en oposición, en realidad trabajan cada vez más juntas a medida que pasa el tiempo.

“Del mismo modo que se produjo la encarnación que culminó en el Gólgota, la encarnación de Cristo en el hombre Jesús de Nazaret, hubo una encarnación real de Lucifer en la lejana Asia, en el tercer milenio antes de Cristo”, afirmó Steiner durante su conferencia.  “Y la fuente de inspiración de gran parte de la cultura antigua fue lo que sólo puede describirse como una encarnación terrenal de Lucifer en un hombre de carne y hueso”.

Sin embargo, estas no fueron las únicas encarnaciones por venir. Steiner afirmó que “antes de que haya transcurrido sólo una parte del tercer milenio de la era poscristiana, habrá en Occidente una encarnación real de Ahriman: Ahriman en la carne”.

Si bien Steiner sostiene que las fuerzas de Lucifer y Cristo son más familiares para la humanidad, advierte que la humanidad está lamentablemente desinformada y mal preparada para la energía Ahrimánica.

“Si Ahriman fuera capaz de colarse en una humanidad que no estaba consciente de su venida, eso lo alegraría más que nnada. Es por esta razón que deben sacarse a la luz los acontecimientos y tendencias en las que trabaja Ahriman para su futura encarnación”, advierte Steiner.

“Y ahora ha llegado el momento de que los hombres sepan qué tendencias y acontecimientos a su alrededor son maquinaciones de Ahriman, ayudándole a prepararse para su próxima encarnación”.

Steiner también advirtió que en su época la gente “ya no valora el espíritu por el espíritu o el alma por el alma” y sólo queda fascinada por “lo que se considera ‘útil”. Afirmó que el nacionalismo también beneficiaba a Ahriman y representaba una oportunidad para que éste se apoderarse de la humanidad.

“Cualquier cosa que pueda separar a los hombres en grupos, cualquier cosa que pueda alejarlos del entendimiento mutuo en todo el mundo y abrir brechas entre ellos, fortalece el impulso de Ahriman”, afirmó Steiner. Dice que “la relación consanguínea ha dejado de ser el factor decisivo” en las relaciones humanas, pero si el nacionalismo persistiera sería “le estaría haciendo el juego directamente a Ahriman” . Steiner también advirtió que los intereses de Ahriman son promovidos por la captura de la humanidad por los partidos políticos.

Al igual que en el análisis de Alexandra sobre los polos, Steiner considera que estas dos fuerzas representan polos opuestos con objetivos y resultados similares.

“Ahriman y Lucifer siempre trabajarán de la mano. La única pregunta es cuál de los dos predomina en la conciencia del hombre en una época determinada. “

Finalmente, Steiner advirtió que las “actividades” de Ahriman estaban “adquiriendo prominencia” a principios del siglo XX cuando pronunció la conferencia.

Trump, Elon, Tucker y la gran inversión

En mi último artículo para The Last American Vagabond describo cómo creo que esta batalla entre la falsa luz y la oscuridad está jugando frente a nosotros. Creo que el ascenso de Trump, Elon, Tucker, etc. como escudo del pueblo, defendiéndonos contra la clase depredadora, es una falsa dicotomía entre la energía luciferina y ahrimánica.

“La Clase Depredadora quiere caos para poder implementar el orden. Crearán el caos de cualquier forma que puedan. Si eso significa matar a un candidato presidencial que cuenta con el apoyo de millones de estadounidenses (y detestado por millones de estadounidenses más), no dudarán en hacerlo.

Sin embargo, si el hecho de que Trump sobreviva a un intento de asesinato sirve mejor a sus objetivos, elegirán esa vía. No son omnipotentes ni invencibles, pero la historia muestra que la Clase Depredadora que dirige el gobierno en la sombra es absolutamente capaz de realizar eventos escenificados con elementos tanto reales como falsos.

Animo a los lectores a no caer en estas historias y creerlas como realidad. Esta narrativa trata de crear caos y arrastrar a más personas a la farsa de la política y las elecciones diseñadas.

El caos apenas comienza. Los fanáticos estatistas de izquierda y derecha seguirán luchando por el anillo del poder, cada uno jurando que Trump es la única manera de detener a Biden y los comunistas, o que Biden es la única apuesta segura para evitar que Trump regrese al poder. Ambas tienen razón y también venden una falsa dicotomía a los estadounidenses que aún no han comprendido que la política no es la respuesta a nuestros problemas.

Independientemente de quién esté detrás del intento de asesinato de Donald Trump, el incidente se utilizará para reforzar aún más el apoyo al sistema político corrupto y para avivar más división en el pueblo estadounidense”.

Animo a los lectores a aferrarse firmemente a sus valores y principios y a no dejarse llevar por falsos profetas que sólo se muestran ante ustedes para promover las mismas agendas que pretenden combatir.

theconsciousresistance

antiguas familias de la aristocracia gobiernan el mundo, y dos conglomerados de Éstas se repartirán el planeta

En una presentación reciente (1), el historiador Andrei Fursov analiza la aparición y el desarrollo históricos de dos grandes conglomerados (clústers) de élites que se disputan actualmente el control del mundo: el anglo-estadounidense occidental y el sino-asiático oriental. El conglomerado anglo-estadounidense se originó en la Edad Media con Venecia como cuna, mientras que el conglomerado sino-asiático oriental tiene una historia mucho más antigua, que se remonta a la dinastía Han. Fursov subraya la importancia de comprender el contexto histórico y la dinámica de poder entre estos dos grupos, así como sus distintas organizaciones y orígenes. El historiador aborda también el papel del capital financiero, los matrimonios mixtos y la planificación a largo plazo en la formación de estas élites. Además, analiza los retos y complejidades a los que se enfrentan las élites mundiales, incluido el ascenso de China como actor global y el desplazamiento del poder de los gobiernos a las empresas transnacionales.

Primera parte (estructura del poder occidental)

Hay una lucha de inteligencia muy seria entre los clanes británicos y los estadounidenses, que incluso se ve reflejada en sus agencias, afirma Andrei Fursov. El conglomerado británico es más antiguo y tradicional, con un mayor énfasis en mantener el control del Estado, mientras que el estadounidense es más joven y está más centrado en la liberalismo supranacional.

El Reino Unido tiene un proyecto para una Gran Bretaña Global, y quiere que Estados Unidos sea un elemento dentro de ese imperio, por lo que no acepta que Estados Unidos haya dejado de ser un elemento del imperio británico, y utiliza a Estados Unidos para cumplir sus propios objetivos, sobre todo a través de una guerra de inteligencia al interior de las agencias de inteligencia de ambos países.

Fursov descarta la idea generalizada de que hay una unidad total entre los clanes británicos y los estadounidenses, para lo cual cita la investigación de dos sociólogos que demostraron que desde el siglo X, el poder y la riqueza se han concetrado en manos del 1% de la población en Gran Bretaña, con la nobleza británica gobernando junto con capital judío. Desde el siglo décimo la aristocracia británica se entrelazó con el capital judío para formar un conglomerado de clanes. El capital judío también es un factor que eliminó la enemistad que existía entre Gran Bretaña y los Estados Unidos. Las relaciones entre ambos mejoraron especialmente a partir de Theodore Roosevelt, el primer presidente estadounidense con una orientación pro-británica que contribuyó a aliviar las tensiones entre ambos países.

Posteriormente, los roces entre Estados Unidos e Inglaterra volvieron con los Rothschild y los Rockefeller. Fursov enfatiza que los Rothschild son administradores del dinero de doce familias mucho más poderosas, y que el poder de los Rockefeller no se compara al poder del conglomerado de los Rothschild. Sin embargo, se acepta que el conflicto entre el Reino Unido y los Estados Unidos es un conflicto entre los Rothschild y los Rockefeller aunque, en realidad, los Rothschild tienen más aliados en Estados Unidos, y los Rockefeller tienen sus propios aliados en Gran Bretaña, afirma Fursov.

Es por ello que se requieren investigaciones serias sobre las nuevas relaciones entre los clanes en la actualidad, como las que llevó a cabo en su momento el cuerpo de inteligencia personal de Stalin en 1927 tras ser enviados a trabajar en archivos europeos para encontrar relaciones financieras entre las familias de poder en Europa.

Fursov identifica tres conglomerados (él los llama clústers) en Occidente:

1. El anglosajón, unido por el capital judío.

2. Las familias de la aristocracia y la monarquía del norte de Europa, especialmente la protestante.

3. El Vaticano más las familias italianas genealógicamente más antiguas, también conocidas como la “aristocracia negra”, como los Pallavicini, los Colonna y los Massimo, entre otros.

Igualmente se reconoce que los descendientes de la dinastía Rurikovich, los descendientes de Genghis Khan y los descendientes de los Merovingios forman parte se los siete linajes más antiguos.

Así, la estructura de poder del mundo es sumamente compleja y todo está entrelazado entre sí.

Por ello, aunque es bueno conocer todo esto desde el punto de vista teórico-histórico, también es indispensable investigarlo a través de las pugnas de poder y la información en el siglo XX y la actualidad, pues en un mundo asíntota como el actual, no hay espacio suficiente para todos estos linajes en las altas esferas del mundo, lo que dará lugar a una lucha encarnizada por el poder y el control de los recursos de cara al futuro.

“Por eso el conocimiento es importante para decidir cuáles de estos linajes pueden ser nuestros aliados y cuáles no, tal y como lo hizo Stalin en los años 1920s”, advierte Fursov.

La entrada a la élite suele producirse a través del control de esferas específicas, como las finanzas, la tecnología y otros ámbitos. Pero el núcleo estructural de las súper élites es muy restringido, y personajes como Mark Zuckerberg o Bill Gates nunca serán aceptados en lo más alto del poder. En la cúpula solo permanecerán linajes que hayan sido parte de la cima durante al menos 150 ó 200 años, afirma Fursov. Ni chinos, ni árabes ni japoneses serán aceptados. Puede que ocasionalmente hayan invitado al duque de Mónaco o a algún Kennedy a sus yates, pero nunca los aceptarían en el núcleo. Todo está controlado fuertemente a ese nivel.

Segunda parte (tribus globales e historia del poder occidental)

Durante 40 años, la Unión Soviética, con su fuerte economía y unidad social, fue capaz de mantener su poder y resistir al mundo occidental. Sin embargo, la nomenclatura soviética, o clase dirigente, acabó traicionando el sistema e integrándose a la élite occidental. Antes de la revolución, no existía un plan o proyecto claro por parte de la monarquía o la aristocracia rusas. Tras la muerte de Stalin, dejó de haber un pensamiento orientado a un proyecto y, en cinco días, Nikita Khrushchev anunció la coexistencia pacífica de los Estados. El ponente asocia a estas élites con el pensamiento orientado a proyectos y cree que el plan de la Unión Soviética era crear un sistema socialista mundial, empezando por una revolución global dirigida por Lenin y Trotsky, y un poderoso Estado soviético como núcleo.

El final de la Guerra Fría y del desplazamiento del poder de los gobiernos a las empresas transnacionales en Estados Unidos se concretó debido a la derrota de la Unión Soviética en la década de 1970, marcando el final de la era de la élite soviética, mientras que una nueva élite surgió en Estados Unidos a partir de las décadas de 1960 y 1970. Esta nueva élite, provocó cambios significativos en la sociedad, especialmente representados por la generación Clinton.

En el año 1991, tras la caída de la URSS, los periodistas occidentales lanzaron el término “tribus globales”. Estas tribus son cuatro:

Anglosajones, judíos, árabes y chinos.

Fursov extrae del esquema a los árabes, pues no están unidos. En cuanto a los anglosajones, en el siglo XX, la capital anglo estadounidense está tan entrelazada con la capital judía que es esencialmente un conglomerado.

Entonces, en lo que va del siglo XXI encontramos dos conglomerados de élites con sus organizaciones abiertas y cerradas. Uno es el anglo-estadounidense y el otro es el Asiático oriental – Chino.

La expansión de China en los últimos dos mil años se remonta a la dinastía Han, en torno a los siglos I y II de nuestra era, donde los chinos se expandieron activamente por regiones como el Turquestán. Sin embargo, se retiraron de la zona durante 300 años, durante la dinastía Tang. Desde el siglo XV, China ha vuelto a expandirse y se ha convertido en un actor global. China se enfrenta a serios retos que sólo puede abordar apoyándose en sus vecinos. A pesar de la competencia económica entre China y Estados Unidos, sus intereses coinciden en el momento actual.

“El conglomerado de élites de Occidente es un resultado del capitalismo. Y este conglomerado comenzó a formarse en el siglo X y Venecia fue su partera. Cuando los venecianos fueron bloqueados al Este por los otomanos en el siglo XV, surgieron contradicciones entre los clanes venecianos. Entonces surgió la idea de tomar algún Estado europeo para convertirlo en la nueva Venecia. Los viejos clanes optaron por el Vaticano. Los nuevos clanes optaron por Holanda. De hecho en algunos mapas Holanda es representada como un Leon. Pero con los años resultó que Holanda, un país anfibio, era muy vulnerable desde el continente. Por lo que decidieron trasladarse a Inglaterra, donde transplantaron toda su capacidad de inteligencia económica y política. Como siempre digo a mis alumnos: fueron tres instituciones las que jugaron un papel decisivo en la creación de la Europa moderna: la compañía británica de las indias orientales, el imperio británico y las estructuras supranacionales que surgieron de ellas. El hecho es que la compañía británica fue creada por representantes de familias europeas y de la llamada aristocracia negra. A fines del siglo XV hubo un conflicto entre dos grupos en el parlamento británico: uno estaba con el Estado y el otro con la compañía. Hay otro factor esencial. En el siglo XV ocurrió un giro muy importante en la historia: el surgimiento de una sociedad de masas. El capital financiero fue clave para manipular a las masas, y también la Enciclopedia de la Ilustración, que sirvió para divulgar la propaganda de la élite durante cuarenta años. A partir de ese momento, la historia empieza a tomar la forma de un personaje basado en un proyecto [y no en la aleatoriedad orgánica]. El caso es que la élite capitalista burguesa fue mas allá de la estructura nacional y creó sus propias estructuras supranacionales.”

“Durante todo el siglo XIX se dio el movimiento del capital financiero hacia el poder, porque los financieros financiaban la guerra y la industrialización. En un principio, la aristocracia y los financieristas no estaban de acuerdo, pues gran parte de la aristocracia se oponía a ese modus operandi. Pero a principios del siglo XX ocurrió un punto de inflexión. En 1901 la Reina Victoria murió y ella había sido una opositora a los matrimonios entre aristócratas y financieristas. Un año después de su muerte se autorizaron los matrimonios entre aristócratas y financieristas, sin importar la nacionalidad, y así inició una nueva etapa en la formación del conglomerado de la élite nor-atlántica. Así surgió el concepto de ‘establishment anglo-estadounidense’, con el objetivo de eliminar cualquier contradicción. Y aunque las contradicciones persistieron, el establishment tomó forma y la Guerra Fría jugó un papel importante en ello, pues la imagen de un enemigo común sirvió para engendrar la rusofobia que hoy une todavía al establishment anglo-estadounidense.”

“Más tarde, en la década de 1970, Kennedy fue asesinado y Nixon fue el último presidente de un Estado estadounidense, pues a partir de su destitución Estados Unidos se convirtió en un sistema dominado por un conglomerado de corporaciones trasnacionales.”

“En conclusión: La élite occidental moderna, en sí misma, es un logro de Occidente. No es un logro de civilizaciones locales. El hecho de que la élite china confronte a este conglomerado es excitante, pues por primera vez Occidente choca contra una élite no occidental con visión global. La élite china global es otra cosa. Es una élite global con rostro no europeo. La élite soviética fue reciclada por así decirlo. Y en la élite occidental hay un segmento muy poderoso que le da mucha fuerza: el capital financiero judío. En términos de su espectativa de vida, la elite china no es menos antigua que la élite judía. Y a este respecto, el conglomerado occidental no sólo se ha metido con una élite de alcance global sino con una realmente antigua que cuenta con mucha tecnología. Aunque también es cierto que la élite china sólo tiene veinte años de experiencia en el juego global. Así que hay pros y contras en ambos bandos. Ya veremos si ganan el león y el águila, o el dragón.”

Notas

1. Андрей Фурсов: Миром управляют древние семьи. Два элитарных кластера, которые разделят планету. Андрей Фурсов. 21 de junio de 2024.

Mente Aternativa

Detrás de la máscara verde de la ecología

La Agenda 21 se lanzó en 1992, durante la Cumbre de la Tierra en Río. En 2015, se convirtió en la Agenda 2030 . Como puedes ver, la tecnocracia ha estado hostigando la gente durante más de cincuenta años.

Detrás de la máscara verde de la ecología

¿Qué es la Agenda 21? Es una “hoja de ruta”, que representa una fracción de un plan inmensamente vasto para remodelar el mundo. La Agenda 21 fue concebida por la oligarquía tecnocrática mundial a través de las Naciones Unidas . Para abreviar la historia, este plan comienza (de forma visible para el público) en 1972, con la primera Cumbre de la Tierra de las Naciones Unidas en Estocolmo , Suecia (1972); seguida en 1992 por la Cumbre de la Tierra de Río (1992); Aquí tuvo lugar la Conferencia Agenda 21 , y donde las 178 naciones presentes, más el Vaticano [nota del editor – ¿ representado por el arzobispo de Canterbury , el reverendo George Carey?] acordaron este “plan de acción”. El actor principal y organizador, el primer secretario de estos dos grandes acontecimientos para el establecimiento de la gobernanza del futuro Nuevo Orden Mundial fue Maurice Strong (fue, entre otros, uno de los miembros fundadores del IPCC (grupo de Expertos Intergubernamentales sobre Cambio Climático) creado en noviembre de 1988 a petición del G7 por dos organismos de la ONU: la Organización Meteorológica Mundial  (OMM) y el  Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Nota: la tercera Cumbre de la Tierra que tuvo lugar en Nairobi (Kenia), en 1982, fue un fracaso, hasta el punto de que ni siquiera se menciona como cumbre oficial de la Tierra.

Esta agenda, que es esencialmente totalitaria, fue expuesta durante muchos años por la difunta Rosa Koire. Explicó la realidad de la expresión “desarrollo sostenible”, término puro de neolengua utilizado por los actores de este plan. El plan de desarrollo sostenible de la ONU fue diseñado para ser aplicado en todo el planeta.Hoy, a la luz de los acontecimientos mundiales que literalmente nos explotan en la cara, todo lo que proclamó Rosa Koire tiene sentido.

Koire dirigió las tasaciones de bienes de inmuebles rcomerciales de California durante 28 años. Testigo privilegiado de los diversos usos del suelo individual o públio, expone abiertamente los impactos del desarrollo sostenible sobre los derechos de los propietarios y las libertades individuales. Fue en el transcurso de las batallas legales donde descubrió la fuente del caos creado por los planes de reestructuración territorial en los municipios de su región y en todo el mundo: la Agenda 21 de las Naciones Unidas. La hoja de ruta para organizar en el siglo XXI lo que la élite tecnocrática llama: el Nuevo Orden Mundial. Denominado por los medios de comunicación como un mito, un producto de la imaginnación… Sólo que si se presta un poco la atención, está claro que estas agencias engañan a gran escala (al igual que los supuestos verificadores de datos , por cierto).

Su libro Detrás de la máscara verde: Agenda 21 de las Naciones Unidas describe su enfoque y los resultados de su investigación.

 En su blog advertía:

Puede parecer ciencia ficción o teoría de la conspiración, pero no es así. Agenda 21 – Desarrollo Sostenible de la ONU es el proyecto de acción implementado en todo el mundo para enumerar y controlar todas las tierras, todos los mares, todos los minerales, todas las plantas, todos los animales, todos los edificios, todos los medios de producción, toda la energía, toda la educación, toda la información y todos los seres humanos del mundo. Es un inventario de existencias así como su control.”

En 2005, fue elegida para formar parte de un comité de supervisión ciudadana en Santa Rosa, en el norte de California, para revisar un proyecto de reurbanización de 1.300 acres en el que vivían y trabajaban 10.000 personas. Su investigación sobre los documentos que justificaban los planes la llevó, junto con su socio Kay Tokerud, a cuestionar la base fraudulenta del enorme plan de reurbanización “Gateways” y a denunciarlo ante los tribunales . Durante el proceso judicial, Koire tomó conciencia del origen de la revolución urbanística que había que llevaba más de 10 años observando:  la agenda 21 de las Naciones Unidas.  A través de su investigación, descubrió que gran parte de la financiación para implementar los programas locales de uso dl suelo de la Agenda 21 proviene del desvío de los impuestos sobre la propiedad a las agencias de reurbanización.

Koire básicamente explica que la aristocracia bancaria globalista utiliza al Partido Comunista Chino para tomar el control total del planeta. (profession-gendarme.com ).

El Partido Comunista Chino es el frente a través del cual la aristocracia bancaria totalitaria globalista ha implementado su plan para tomar el control total de este planeta.”

El gran reinicio del Foro Económico Mundial

  • La cuarta revolución industrial,
  • La Agenda 2030 de las Naciones Unidas y, por supuesto, el plan más amplio en el que gira todo esto, que es una agenda de desarrollo sostenible de la Agenda 21 de las Naciones Unidas, donde podemos estar de acuerdo en que estamos siendo testigos de la gran purga. Es la gran concentración de riqueza y poder; la gran revelación de dictadores voluntariosos; la gran reasignación de recursos; la gran revolución digital del estado de vigilancia. Esta es la agenda para el siglo XXI y más allá. Esta es la gran revisión del antiguo plan, así que empezaré por ahí.

El desarrollo sostenible de la Agenda 21 de las Naciones Unidas es el modelo global. Es el “plan de acción”, como lo llama la ONU, para inventariar y controlar toda la tierra, el agua, los minerales, las plantas, los animales, la construcción, los medios de producción, la energía, la educación, el transporte, la información y todos los seres humanos del mundo. Es un plan de inventario y control. Éste es el programa para el siglo XXI.

Es un plan a 100 años y hay hitos en 2020, 2030, 2035 y 2050.

La Agenda 2030 es sólo un hito en el principal plan de 100 años. Entonces, la Agenda 21 para el Desarrollo Sostenible es el plan global de inventario y control, abarca todos los aspectos de tu vida y está destinada a ser una transformación desgarradora de tu vida. Eso es lo que pidió el senador Al Gore cuando dirigió al grupo de Estados Unidos a la reunión más grande de jefes de estado y representantes nacionales que jamás se había convocado hasta ese momento. Fue en Río de Janeiro, Brasil, en 1992, para la Conferencia Agenda 21 que representantes de 178 naciones más el Vaticano acordaron este “plan de acción”.

Sé que verá en Wikipedia que se trata de un “acuerdo voluntario no vinculante” , excepto que la Agenda 21 te vincula. 

Esto ha sido inscrito en las leyes de sus países, desde China, todas las naciones occidentales y del Medio Oriente, en todo el mundo, a través de la colaboración de gobiernos, empresas, organizaciones y fundaciones. Es un plan global pero no es un plan internacional. “Internacional” significa “entre naciones”, pero este plan borra las naciones. Es global. Es un plan global que se implementa localmente, por lo que tiene un nombre diferente en todas partes, pero es el mismo plan. Cada aspecto de tu vida se ve afectado, está en los programas escolares, en los departamentos de planificación y construcción, en el sistema de justicia, en el sistema de salud. Está en todas partes pero nunca la llamamos “Agenda 21”. Lo verás como planes regionales. A menudo se les llama “Plan Área de la Bahía” o “Cuatro Estados, Una Visión” o “México 2030” o “Hanoi 2030” o “Horizonte 2050” en Canadá, por ejemplo. Todos siguen el  mismo plan. Elevan los principales centros de poder económico a un estatus supragubernamental que está fuera y por encima del modelo tradicional de gobierno representativo. Estas son las megaregiones. Impulsan la economía y dominan el Estado-nación. Combinan partes de ciudades, estados, incluso combinan partes de naciones.

Destruyen las fronteras e ignoran las jurisdicciones legales al crear nuevos principios económicos. Éstas son nuevos feudos. No es el gobierno. Esto es gobernanza.

Gobernanza: Es un sistema compuesto por agencias del sector público, organizaciones sin fines de lucro, organizaciones comerciales, grupos de defensa, fundaciones y corporaciones. ¿Qué tienen en común? No se vota a ninguna de ellas. Cuanto más grande es la entidad, cuanto más lejos está de ti, menos poder tienes. Estás literalmente fuera de juego.

Es el nuevo Estado Mundial, donde eres ciudadano del mundo, ¿vale? Entonces el nuevo Estado es el medio por el cual se debe servir a los demás para el “bien común” y está definido por el Estado. Se supone que es de abajo hacia arriba. Es algo que quieres, pero en realidad es una carrera final contra ti, en torno a tu soberanía. Tu soberanía está siendo erosionada, pieza a pieza.

La pregunta es: “¿Cuál es el plan Agenda 21?”  Cuando lo ves en público, es ante todo un plan de ordenamiento territorial. Es el grito de guerra del “desarrollo sostenible”. ¿Qué dicen? Que estamos “matando el planeta” con nuestras emisiones de CO₂. El plan está diseñado para encerrar a las poblaciones en lo que la ONU llama “islas de habitación humana”. Asentamientos humanos [ciudades de 15 minutos]

Por supuesto, una vez que estás en esta concentrada “isla de habitación humana” anteriormente llamada “ciudad”, eres más fácil de manejar, controlado y vigilado. Podría ser una ciudad, como la que Sidewalk Labs, filial de la empresa matriz de Google, Alphabet, planeó para un barrio de Toronto. Esta ciudad tenía que tener sensores incrustados en todas partes, literalmente. Y los residentes verían sus servicios limitados a menos que revelen digitalmente todos los aspectos de sus vidas.

Si, por ejemplo, como residente, se negara a que sus datos se vinculen con su identidad, tendría menos derechos que los demás. Es una ciudad inteligente . Esta es una ciudad donde creo que la realidad virtual y aumentada reemplazará la vida real y, de hecho, será más atractiva. En última instancia, las personas pueden pasar toda su vida viviendo virtualmente y esas vidas serán cortas.

¿Cuál es entonces la justificación de esta distopía? La historia es que las emisiones de gases de efecto invernadero se reducirán consolidando a las poblaciones en estos densos centros urbanos, donde el consumo de energía y agua puede ser limitado. Esto te sacará de las zonas rurales, donde básicamente puedes hacer lo que quieras, criar ganado, cultivar alimentos con el agua de tu pozo, conducir tu camión agrícola y tener un arma.

Pero para aplicar la Agenda 21, tu país, estado, condado, parroquia, municipio, ciudad -da igual- impone este plan de ordenación territorial a nivel local, porque piénsalo: el lugar donde vives tiene mucho que ver con cómo vives.

Por lo tanto, vuestra antigua vida debe ser transformada. Es el código para “destruir y reconstruir” [El famoso eslogan: Construir, reconstruir, mejorar”] Es la nueva normalidad. Esto incluye tanto lo que ellos llaman el “entorno construido” como el uso que se hace de ese espacio físico. Es necesario transformar y reconstruir tus creencias y expectativas, así como tu consumo de energía, tu consumo de agua, tu consumo de alimentos, tu estructura social, tu trabajo, tu salud y tus puntos de vista sobre la esperanza de vida; todo esto debe transformarse. Y mucho de eso está determinado en el plan regional que tienes, donde vives. Te sugiero que lo consultes. 

Entonces, ¿cómo destruyen tus derechos? No votas por eso. Aunque pagas por ello. Este plan regional está financiado por subvenciones federales y estatales que pagan a consultores, quienes básicamente están comprometidos a imponerlo esto en la comunidad. Y los pocos ciudadanos preocupados que asisten a las “reuniones de visión” y “charettes”, como ellos las llaman para oponerse, los consultores están ahí para bloquear la oposición. Básicamente están ahí para adoctrinar al público. Los consultores son “agentes de cambio” capacitados y líderes organizacionales. Están ahí para dar la impresión de que han escuchado al público y que el público aprueba el plan. 

Es toda una actuación. Creo que estarás de acuerdo en que esto es realmente importante. Es difícil de vender y un enorme problema de gestión, incluso con el engaño y la connivencia de los medios corporativos. Debería decir asociación, propiedad.  No es fácil destruir casi 500 años de Estado-nación, por lo que debe hacerse gradualmente, utilizando todo el poder y la influencia de las corporaciones y organizaciones gubernamentales, incluida toda la tecnología, el entretenimiento, los medios y la educación.

Es un plan totalmente megacorporativo. Es una asociación conjunta.  Es una asociación público-privada entre el gobierno, las corporaciones más grandes del mundo, conglomerados bancarios, importantes fundaciones financieras, como las fundaciones Ford y Rockefeller, grupos como World Wildlife Fund y la Asociación Religiosa Nacional para el Medio Ambiente. Es un círculo cerrado. Esto solo te incluye a ti cuando estás de acuerdo con su plan.

Por supuesto, eso es lo que significa obtener la aprobación de “la comunidad”. “La comunidad” es cualquiera que esté de acuerdo con el plan. Si no estás de acuerdo, no eres “la comunidad”. No se permite la disidencia. Estas importantes fundaciones otorgan subvenciones a miles de organizaciones emergentes. Forman y financian grupos derivados que se asemejan a asociaciones vecinales benévolas y sin fines de lucro.

Todo este sistema actúa como la burocracia inferior del nuevo sistema y es básicamente el enemigo final del individuo. Entonces, para hacer realidad la Agenda 21, es necesario que haya una integración completa de los sistemas para poder controlarlos de manera centralizada. Es la estandarización de todos los sistemas y la nueva moneda es la información y la energía.

Para tener un control centralizado, una globalización total, es necesario estandarizar todas las leyes, toda la educación, toda la cultura, todas las finanzas.  Para fusionarse hay que estandarizarse. Esto era imposible hasta la llegada de la era de la informática. Ahora es inevitable. Esta es la razón por la que cada escolar recibe un ordenador y ahora Internet se encuentra en las pequeñas aldeas de todos los países. Tu sistema educativo se utiliza para alentarte a verse a sí mismo como un “ciudadano global”. Espero que no, porque un ciudadano del mundo no es ciudadano en absoluto y no tiene derechos. Como parte de la Agenda 21 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible. Lo que llamamos un “derecho” es en realidad un “privilegio” y puede ser concedido o quitado en cualquier momento.

Por supuesto, por otro lado, se puede imponer una sanción sin reparación. Esto explica por qué la ONU puede llamar a la conectividad universal a Internet un “derecho humano”. Durante el COVID, Unicef del Fondo de las Naciones Unidas para la Educación de la Infancia, crearon un proyecto llamado GIGA y el objetivo es lograr que todas las escuelas del mundo den clases en línea y el término para eso es “instrucción directa”. Nada se interpone entre el niño y el ordenador. Esto hace que el adoctrinamiento estandarizado sea realmente fácil.

Y por supuesto, todos sabéis que, como startupGoogle fue financiada por la comunidad de inteligencia, con el fin de espiar a las personas que buscaban temas específicos en Internet. Entonces podrían identificar a estas personas. Básicamente estamos cambiando las tornas y nos exponen a la vigilancia [?]. Ahora, miles de millones de personas usan voluntariamente un dispositivo de vigilancia en todo momento.

Cuando escuchas el término “Smart”, ya sea un teléfono inteligente, un auto inteligente, una casa inteligente o cualquier otra cosa, es un acrónimo [En inglés.]:

SMART: Sostenibilidad, Supervisión, Evaluación, Calificación y Seguimiento.

GIGA, el proyecto de conectividad universal para niños, ha digitalizado más en 10 semanas de lujuria […] que en los últimos 10 años. Para ello necesitan 5G y para ello necesitan una generación de energía descentralizada que permita la experimentación digitalizada y el espionaje de grandes poblaciones sin su consentimiento ni conocimiento. Una especie de colonización digital.

Las megacorporaciones están ahí fuera, buscan personas que agreguen valor, que sean innovadoras. Las empresas quieren apropiarse de la innovación. No todo el mundo tiene valor en este sistema, este nuevo sistema. La mayoría de ustedes no. Lo más probable es que usted vale menos que su préstamo estudiantil. Tu valor, tu puntuación de crédito social se basa en si produces más de lo que consumes y si sirves o entorpeces al Estado.

El gobierno ha superado nuestros derechos constitucionales al fusionarse con corporaciones privadas que pueden operar sin restricciones en secreto, castigando, purgando y haciendo desaparecer a los disidentes. Facebook, Google, Twitter y Amazon lo hicieron virtualmente; es la globalización. La globalización está borrando fronteras, de la ciudad a la nación. Este es el fin del gobierno representativo.

Ahora, sé que puedes pensar que el gobierno es un obstáculo, es un peligro y, de todos modos, no te representa, entonces, ¿a quién le importa, verdad? Bueno, sé con quién estoy hablando y de hecho estoy de acuerdo. Pero al menos en Estados Unidos, el gobierno se concibió originalmente como representativo. Era como si fueras un agricultor o un tendero muy ocupado y eligieras a un representante que aceptara dedicar unos años de su vida a dirigir este tipo de cosas, para que tú no tuvieras que hacerlo.

Ahora personas como Pelosi y McConnell llevan 50 años en el gobierno. ¿Por qué? Esto se debe a que les siguen votando. El dinero que los elige los mantiene allí. Arriba, el poder no tiene partido.

Entonces, ¿qué quieren los controladores globalistas? La Agenda 21 está diseñada para una gestión eficaz. Las megacorporaciones quieren tener leyes y regulaciones armonizadas e integradas, lo menos posible, para no tener que cambiar de actividades o reorganizarse para vender en diferentes mercados. No quieren fronteras ni mercados abiertos.  Quieren acabar con la competencia, por pequeña que sea, y con la demanda de ingenieros. Quieren tratar con la menor cantidad posible de tomadores de decisiones, idealmente solo uno. Quieren fusionarse con el gobierno. Quieren trabajadores aptos para el trabajo requerido y fácilmente descartables.  Quieren apropiarse de la innovación, por eso quieren un vínculo directo con las universidades. Quieren controlar todos los recursos, humanos y naturales, porque ya saben, los humanos son un recurso o, más probablemente, son un obstáculo.

Las megacorporaciones necesitan control total e información total. Es la revolución digital. Esta es la cuarta revolución industrial. Este es el gran reinicio. Las tres revoluciones industriales anteriores se centraron principalmente en la energía y el hardware. Ya sea vapor, gas o electrónica, estas nuevas energías han reestructurado radicalmente la sociedad, desde la familia al trabajo, desde las ciudades al gobierno, todo completamente reestructurado.

Estamos ahora en la cuarta revolución industrial, la revolución digital. Es la explosión de la tecnología la que avanza más rápido que la velocidad de la ética y la vigilancia y eclipsa las tres revoluciones anteriores. Desde la inteligencia artificial con el potencial de cambiar la naturaleza del ser humano, hasta la robótica utilizada para la vigilancia policial, pasando por edificios inteligentes y sensores que nos monitorean constantemente.

Esta revolución permite un futuro incierto. La cuarta revolución industrial, en el contexto de las tres primeras, representa una aceleración fenomenal, en términos de tiempo y capacidad para controlar a las masas, transformar y perturbar, “Reconstruir Mejor”. Cuando escuchas esto, sepa que no podrás reconstruirlo a menos que primero lo rompa.

Lo llaman el “nuevo contrato social”, ¡ese que no aceptaste! El concepto del Gran Reinicio , que no poseerás nada, alquilarás todo lo que necesites, tienes que verlo a través del prisma de la propiedad privada.

Tú eres tu propiedad privada más importante. Perder la propiedad de tu libertad de expresión, de movimiento –básicamente, tu libre albedrío– significa que pierdes lo que es más importante para ti.

Esto reduce tus expectativas de una vida plena y te obliga a entrar en una nueva era de austeridad, de escasez. No es fácil hacer eso. La pérdida de la libertad en el sentido más vital, la independencia y privacidad de cuerpo y mente que exige lo que llaman la “nueva normalidad”, no se llega a este lugar sin una crisis importante.

¿Han considerado los autoproclamados controladores globalistas que tenían la intención de perturbar totalmente el futuro qué tipo de crisis sería necesaria para hacer realidad la gobernanza global? ¿El que se extiende más allá de las corporaciones y llegue hasta nuestros hogares y cuerpos? En mi opinión, la crisis global requiere una respuesta global –y eso justifica la gobernanza global.

Realmente se necesita una crisis importante –una crisis global– para romper la identificación con tu nación y tu cultura –algo como el cambio climático, ¿verdad? Esto crea un temor existencial de que “estamos destruyendo el planeta” y que toda nuestra forma de vida es una amenaza a su existencia continua. ¡Oye, no es ciencia! La ciencia está hecha para adaptarse al resultado deseado, en esta situación es la máscara verde. Entonces, detrás de esta máscara de preocupación ambiental, se encuentra la sed de un control global, centralizado y totalitario.

La amenaza del cambio climático es una etapa, es una fase. Está diseñado para prepararnos para más restricciones y limitaciones y ahora nos enfrentamos, por supuesto, a una amenaza mucho más generalizada y restrictiva. Lanzaron el Big Gun , la nueva amenaza existencial es el C19.

De hecho, el Fondo Mundial para la Naturaleza dice que el COVID es, cito: “La respuesta de la naturaleza al abuso del medio ambiente por parte del hombre”, fin de la cita. ¿Hablan en serio? ¿La naturaleza es terrorista? Así, invisible, incolora, inodora, apenas detectable, la “C” es la nueva mascarilla de la Nueva Normalidad.

El 11 de septiembre fue la reivindicación del Estado de seguridad. la “C” activa el estado de vigilancia. La “C” justifica una aplicación global. Verdaderamente hecho a medida para el Nuevo Orden Mundial, la “C” emitió purgas de arresto domiciliario para quienes dicen la verdad, colapso económico y pleno empoderamiento de estas megacorporaciones.

Y claro, ¿cómo podría olvidarlo? La lista de dictadores voluntarios, desde Macron en Francia, hasta Ardern en Nueva Zelanda, Trudeau en Canadá, Harris en Estados Unidos, Cuomo, Newsom, Whitmer, Garcetti, Lightfoot y decenas de otros, en todo el mundo.

En la competencia por el reinado de las megarregiones, los colaboradores dispuestos también se están movilizando localmente, por supuesto, y de eso se han tratado realmente los últimos cuatro años: de separar el trigo de la paja, los fieles de los disidentes. Así se hace en China. Mao Zedong lo hizo con su campaña Que florezcan 100 flores” . Animó a sus seguidores a criticar sus programas para mejorarlos, pero lo hizo para identificar y purgar a sus críticos, lo cual hizo.

Así que de lo que estoy hablando aquí es de poder. Quienes tienen el poder quieren conservarlo. Los que no lo tienen lo quieren. Siempre ha habido gente que quiso controlar el mundo. Lo que ha cambiado es que la capacidad de control ha aumentado en velocidad y alcance de una manera que nunca antes había sido posible.

Así que ahora, para concluir, quiero animarte. Quiero animarte a que seas valiente; a que encuentres la alegría simplemente en estar vivo. Pregúntate: “¿Qué valoro?” » Reconoce que tú mismo eres parte de la razón por la que estamos en esta situación. ¿Elegirás la comodidad antes que la libertad? El mundo Libre exige Libertad con responsabilidad, requiere trabajo. El trabajo que hacemos puede estar lleno de trampas, lleno de oposición controlada, que parece ser la respuesta, pero más bien una especie de círculo retorcido de propaganda pintada de verde y recubierta de caramelo que se remonta a la máscara verde. Entonces necesitas detenerte y pensar. Nunca me malinterpretes. Sepan que no habrá Suiza en este Nuevo Mundo, ni lugar donde esconderse. Entonces es hora de resistir. Negarse a colaborar. No lleves un teléfono inteligente. No te ofrezcas como voluntario para dar tus datos biométricos o tu ADN. No cooperes. Desactívate mientras puedas y prepárate para trabajar para mantenerte libre. Todos necesitamos trabajar para que esto suceda.

Sobre todo, amigos míos, recordad quiénes sois, reíd, bailad y amad y uníos

margueriterothe

Consejo para la Cumbre del Futuro de la ONU: gobernanza global para controlar la vida en el planeta

Recientemente me enteré de un informe de políticas con recomendaciones para la Cumbre del Futuro de 2024, que expone en términos claros lo que nuestros “Señores Supremos” nos tienen reservado. Parece la trama de una película de Bond. Para evitar “puntos de inflexión irreversibles”, se recomienda administrar todos los sistemas que sustentan la vida: “la atmósfera (aire), la hidrosfera (agua), la biosfera (vida), la litosfera (tierra) y la criosfera (hielo)”. colectivamente por un “órgano de gobernanza global”. Esto significa el control total del sistema terrestre (Planetary Commons) y el establecimiento de un gobierno global.

Como se indica en el informe de política:

La gobernanza de los bienes comunes planetarios requeriría un cambio desde los actuales enfoques nacionalistas y aislados hacia la protección ambiental, reconociendo el hecho central de que nuestro planeta está compuesto de sistemas interconectados e interdependientes. En lugar de un sistema fragmentado basado en tratados, el enfoque de los bienes comunes planetarios propone una estructura de gobernanza “anidada” que involucra múltiples niveles de regulación que promulgan respuestas locales altamente adaptadas, todas supervisadas por un organismo de gobernanza global.

También significa que ninguna nación tendrá el derecho soberano de explotar sus propios recursos porque puede tener consecuencias para el conjunto planetario.

El sistema actual se basa en el derecho soberano de los Estados-nación a explotar los recursos dentro de sus fronteras nacionales sin tener en cuenta las consecuencias globales. Un concepto de administración global de los bienes comunes planetarios como recursos ambientales de los que todos dependemos iría directamente en contra de esta comprensión fundamental del derecho internacional y se enfrentaría a una fuerte resistencia, incluso de los países en desarrollo que podrían considerar que tal paso afecta su capacidad de desarrollarse rápidamente. Sin embargo, la ciencia es cada vez más clara e incontrovertible: sin un cambio importante en los marcos de gobernanza, nuestro planeta se volverá cada vez más inestable, impredecible e inhabitable. Los bienes comunes planetarios pueden ser la única forma de gestionar el cambio sistémico en el Antropoceno.

Por tanto, debemos ser gestionados desde arriba.

¿Y quién está detrás de las recomendaciones para la Cumbre del Futuro de 2024?

El informe de políticas, “Hacia un enfoque planetario común para la gobernanza ambiental”, es publicado por la Global Challenges Foundationel Centro de Investigación de Políticas de la Universidad de las Naciones Unidas y el  Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (PIK).

Significa que los mismos actores que han definido el problema nos ofrecen la solución. Como dijo el profesor Johan Rockström, director de PIK y miembro de la junta directiva de Global Challenges Foundation, en 2015: 

No veo otra manera que la de que 200 naciones tengan que ceder parte de su soberanía en la toma de decisiones a una administración institucional global. Tenemos que trabajar con las instituciones que tenemos, y sólo hay una institución que es global: las Naciones Unidas.

La Fundación Sueca para los Desafíos Globales tiene, como escribí en un artículo anterior, una gran influencia en la agenda de la ONU (con apoyo financiero del Consejo Asesor de Alto Nivel sobre Multilateralismo Eficaz y la  Oficina Ejecutiva del Secretario General ) . 

También tienen algunas creencias maltusianas y futuristas problemáticas (como analicé en un artículo anterior).

Racismo científico, elitismo malthusiano y peligrosas ideas tecnoutópicas.

Jacob Nordangard

La excusa pandémica para un golpe corporativista (2007)

Acabamos de encontrar un documento alojado por el Departamento de Seguridad Nacional, publicado en marzo de 2023, pero escrito en 2007, que equivale a una imposición corporativista en toda regla a Estados Unidos, aboliendo cualquier cosa que se parezca remotamente a la Declaración de Derechos y la ley constitucional. Está ahí, a la vista de cualquiera que tenga la curiosidad de excavar. 

No hay nada en él que no hayas experimentado ya con los confinamientos. Lo que lo hace interesante son los participantes en la forja del plan, que es prácticamente la totalidad de las empresas estadounidenses tal como era en 2007. Fue una iniciativa de George W. Bush. Las conclusiones son sorprendentes.

La cuarentena es una declaración legalmente ejecutable que un organismo gubernamental puede instituir sobre personas potencialmente expuestas a una enfermedad, pero que no presentan síntomas. Si se promulgan, las leyes federales de cuarentena se coordinarán entre los CDC y los funcionarios de salud pública estatales y locales y, si es necesario, el personal encargado de hacer cumplir la ley… El gobierno también puede promulgar restricciones de viaje para limitar el movimiento de personas y productos entre áreas geográficas en un esfuerzo por limitar la transmisión y propagación de enfermedades. Actualmente, las autoridades están revisando posibles planes para restringir los viajes internacionales ante la aparición de una pandemia en el extranjero. 

Limitar las oportunidades de reuniones públicas también ayuda a limitar la propagación de enfermedades. Las salas de conciertos, cines, estadios deportivos, centros comerciales y otros grandes lugares de reunión pública podrían cerrar indefinidamente durante una pandemia, ya sea debido a cierres voluntarios o impuestos por el gobierno. De manera similar, los funcionarios pueden  cerrar escuelas y negocios no esenciales  durante las olas pandémicas en un esfuerzo por reducir significativamente las tasas de transmisión de enfermedades. Estas estrategias tienen como objetivo prevenir la interacción estrecha entre individuos, principal conducto de propagación del virus de la gripe. Incluso tomar medidas como limitar las interacciones de persona a persona a una distancia de tres pies o evitar casos de contacto cercano casual, como darse la mano, ayudará a limitar la propagación de la enfermedad”.

Ahí lo tenemos: los planes pandémicos. Antes parecían abstractos. En 2020, se volvieron muy reales. Tus derechos fueron eliminados. Ya no hay libertad ni siquiera para tener invitados en casa. En aquellos días, la regla era imponer sólo tres pies de distancia en lugar de seis pies de distancia, ninguno de los cuales tenía ninguna base científica. De hecho, la literatura científica actual, incluso en ese momento, desaconsejaba cualquier intervención física diseñada para limitar la propagación de virus respiratorios. Se sabía que no funcionaban. Toda la profesión de la salud pública lo aceptó.

Por lo tanto, durante muchos años antes de que los confinamientos arruinaran el funcionamiento económico, había dos vías paralelas en funcionamiento, una intelectual/académica y otra impuesta por los administradores estatales/corporativos. No tenían nada que ver la una con la otra. Esta situación se mantuvo durante casi 15 años. De repente, en 2020, hubo un ajuste de cuentas y los gerentes estatales y corporativos ganaron. Aparentemente de la nada, la libertad tal como la conocíamos desde hacía mucho tiempo había desaparecido.

En 2005, me encontré por primera vez con un plan de la administración Bush, un borrador inicial del anterior, que habría acabado con la libertad tal como la conocemos. Era un plan para combatir la gripe aviar, que en aquel entonces los funcionarios imaginaron que implicaría cuarentenas universales, cierres de negocios y eventos, restricciones de viaje y más.

Escribí: “Incluso si llega la gripe y los contribuyentes han tosido, el gobierno seguramente se divertirá imponiendo restricciones de viaje, cerrando escuelas y negocios, poniendo en cuarentena ciudades y prohibiendo reuniones públicas… Es un asunto serio cuando el gobierno pretende planear abolir toda libertad y nacionalizar toda la vida económica y poner todos los negocios bajo el control de los militares, especialmente en nombre de un insecto que parece restringido en gran medida a la población de aves. Quizás deberíamos prestar más atención. Quizás tales planes para todo el Estado deberían incluso alterarnos un poco”.

Durante años escribí sobre este tema, intentando que otros se interesaran. Estaba todo ahí en blanco y negro. En un abrir y cerrar de ojos, bajo la apariencia de una pandemia que sólo los administradores estatales pueden declarar, real o inventada, la libertad misma podría ser abolida. Estos planes nunca fueron legislados, debatidos o discutidos públicamente. Simplemente fueron publicados como resultado de varias consultas con expertos, quienes elaboraron sus fantasías totalitarias como si estuvieran escribiendo el guión de una película de Hollywood.

El anteproyecto de 2007 es más explícito que cualquier cosa que haya visto. Proviene del Consejo Asesor Nacional de Infraestructura, que “incluye líderes ejecutivos del sector privado y del gobierno estatal/local que asesoran a la Casa Blanca sobre cómo reducir los riesgos físicos y cibernéticos y mejorar la seguridad y resiliencia de los sectores de infraestructura críticos de la nación. El NIAC se administra en nombre del presidente de conformidad con la Ley del Comité Asesor Federal bajo la autoridad del Secretario del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos”.

¿Y quién formó parte de este comité en 2007 que decidió que los gobiernos “pueden cerrar escuelas y negocios no esenciales”? Dejanos ver.

Sr. Edmund G. Archuleta, Gerente General de El Paso Water Utilities

Sr. Alfred R. Berkeley III, presidente y director ejecutivo de Pipeline Trading Group, LLC, y ex presidente y vicepresidente de NASDAQ

Jefa Rebecca F. Denlinger, Jefa de Bomberos, Servicios de Emergencia y Bomberos del Condado de Cobb (Ga.)

Jefe Gilbert G. Gallegos, Jefe de Policía (retirado), Departamento de Policía de la Ciudad de Albuquerque, Nuevo México

Sra. Martha H. Marsh, presidenta y directora ejecutiva, Stanford Hospital and Clinics

Sr. James B. Nicholson, presidente y director ejecutivo de PVS Chemical, Inc.

Sr. Erle A. Nye, Presidente Emérito, TXU Corp., presidente de NIAC

Sr. Bruce A. Rohde, presidente y director ejecutivo emérito de ConAgra Foods, Inc.

Sr. John W. Thompson, presidente y director ejecutivo de Symantec Corporation

Sr. Brent Baglien, ConAgra Foods, Inc.

Sr. David Barrón, Bell Sur

Sr. Dan Bart, TIA

Sr. Scott Blanchette, Healthways

Sra. Donna Burns, Agencia de Manejo de Emergencias de Georgia

Sr. Rob Clyde, Symantec Corporation

Sr. Scott Culp, Microsoft

Sr. Clay Detlefsen, Asociación Internacional de Alimentos Lácteos

Sr. Dave Engaldo, The Options Clearing Corporation

Sra. Courtenay Enright, Symantec Corporation

Sr. Gary Gardner, American Gas Association

Sr. Bob Garfield, American Frozen Foods Institute

Sra. Joan Gehrke, PVS Chemical, Inc.

Sra. Sarah Gordon, Symantec

Sr. Mike Hickey, Verizon

Sr. Ron Hicks, Anadarko Petroleum Corporation

Sr. George Hender, The Options Clearing Corporation

Sr. James Hunter, Ciudad de Albuquerque, NM Manejo de Emergencias

Sr. Stan Johnson, Consejo Norteamericano de Confiabilidad Eléctrica (NERC)

Sr. David Jones, Corporación El Paso

Inspector Jay Kopstein, División de Operaciones, Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD)

Sra. Tiffany Jones, Symantec Corporation

Sr. Bruce Larson, American Water

Sr. Charlie Lathram, Ejecutivos Empresariales para la Seguridad Nacional (BENS)/BellSouth

Sr. Turner Madden, Madden y Patton

Jefa Mary Beth Michos, Bomberos y Rescate del Condado de Prince William (Va.)

Sr. Bill Muston, TXU Corp.

Sr. Vijay Nilekani, Instituto de Energía Nuclear

Sr. Phil Reitinger, Microsoft

Sr. Rob Rolfsen, Cisco Systems, Inc.

Sr. Tim Roxey, Constellation

Sra. Charyl Sarber, Symantec

Sr. Lyman Shaffer, Pacific Gas and Electric,

Sra. Diane VanDeHei, Asociación de Agencias Metropolitanas del Agua (AMWA)

Sra. Susan Vismor, Mellon Financial Corporation

Sr. Ken Watson, Cisco Systems, Inc.

Sr. Greg Wells, Aerolíneas Southwest

Sr. Gino Zucca, Cisco Systems, Inc.

Recursos del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS)

Dr. Bruce Gellin, Fundación Rockefeller

Dra. María Mazanec

Dr. Stuart Nightingale, CDC

Sra. Julie Schafer

Dr. Ben Schwartz, CDC

Recursos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS)

Sr. James Caverly, Director, División de Asociaciones de Infraestructura

Sra. Nancy Wong, Oficial Federal Designada (DFO) del NIAC

Sra. Jenny Menna, Oficial Federal Designada (DFO) del NIAC

Dr. Til Jolly

Sr. Jon MacLaren

Sra. Laverne Madison

Sra. Kathie McCracken

Sr. Bucky Owens

Sr. Dale Brown, contratista

Sr. John Dragseth, abogado de propiedad intelectual, contratista

Sr. Jeff Green, contratista

Sr. Tim McCabe, contratista

Sr. William B. Anderson, ITS América

Sr. Michael Arceneaux, Asociación de Agencias Metropolitanas del Agua (AMWA)

Sr. Chad Callaghan, Marriott Corporation

Sr. Ted Cromwell, American Chemistry Council (ACC)

Sra. Jeanne Dumas, American Trucking Association (ATA)

Sra. Joan Harris, Departamento de Transporte de EE.UU., Oficina del Secretario

Sr. Greg Hull, Asociación Americana de Transporte Público

Sr. Joe LaRocca, Federación Nacional de Minoristas

Sr. Jack McKlveen, United Parcel Service (UPS)

Sra. Beth Montgomery, Wal-Mart

Dr. J. Patrick O’Neal, Oficina de EMS/Trauma/EP de Georgia

Sr. Roger Platt, The Real Estate Roundtable

Sr. Martin Rojas, American Trucking Association (ATA)

Sr. Timothy Sargent, Senior Chief, Economic Analysis and Forecasting Division, Economic and Fiscal Policy Branch, Finance Canada  

En otras palabras, todo a lo grande: alimentos, energía, comercio minorista, ordenadores, agua y lo que se te ocurra. Es un dream team corporativista.

Considere la propia ConAgra. ¿Qué es eso? Es Banquet, Chef Boyardee, Healthy Choice, Orville Redenbacher’s, Reddi-Wip, Slim Jim, Hunt’s Peter Pan Egg Beaters, Hebrew National, Marie Callender’s, P.F. Chang’s, Ranch Style Beans, Ro*Tel, Wolf Brand Chili, Angie’s, Duke’s, Gardein, Frontera, Bertolli, entre muchas otras marcas aparentemente independientes que en realidad son una sola empresa.

Ahora, pregúntese: ¿por qué todas estas empresas podrían estar a favor de un plan de confinamiento? ¿Por qué WalMart, por ejemplo? Es lógico. Los confinamientos son una interferencia masiva con el capitalismo competitivo. Proporcionan la mejor subvención posible a las grandes empresas al tiempo que cierran pequeños negocios independientes y los ponen en una enorme desventaja una vez que se produce la apertura.

En otras palabras, es un tinglado industrial, muy parecido al fascismo de entreguerras, una combinación corporativista de grandes empresas y grandes gobiernos. Si añadimos la industria farmacéutica a la mezcla, veremos exactamente lo que ocurrió en 2020, que supuso la mayor transferencia de riqueza de las pequeñas y medianas empresas y la clase media a los ricos industriales de la historia de la humanidad.

El documento es abierto incluso en cuanto a la gestión de los flujos de información: “Los sectores público y privado deben alinear sus comunicaciones, ejercicios, inversiones y actividades de apoyo absolutamente tanto con el plan como con las prioridades durante un evento de influenza pandémica. Continuar con la recopilación de datos, el análisis, la presentación de informes y la revisión abierta”.

No hay nada en todo esto que encaje con alguna tradición occidental de derecho y libertad. Nada. Nunca fue aprobado por ningún medio democrático. Nunca formó parte de ninguna campaña política. Nunca ha sido objeto de ningún examen serio por parte de los medios. Ningún grupo de expertos ha rechazado jamás tales planes de manera sistemática.

El último intento serio de desacreditar todo este aparato fue el de DH Henderson en 2006. Sus dos coautores de ese artículo finalmente aceptaron los confinamientos de 2020. Henderson murió en 2016. Uno de los coautores del artículo original me dijo que si el Dr. Henderson hubiera estado presente, en lugar del Dr. Fauci, los confinamientos nunca se habrían producido.

Aquí estamos, cuatro años después del despliegue de esta maquinaria de confinamiento, y somos testigos de lo que destruye. Sería bueno decir que todo el aparato y la teoría detrás de esto han sido completamente desacreditados.

Pero eso no es correcto. Todos los planes siguen en marcha. No ha habido cambios en la ley federal. No se ha hecho ni un solo esfuerzo para desmantelar el estado de planificación corporativista/de bioseguridad que hizo todo esto posible. Cada parte está en su lugar para la próxima vez.

Gran parte de la autoridad para todo este golpe se remonta a la  Ley de Servicios de Salud Pública de 1944, que fue aprobada en tiempos de guerra. Por primera vez en la historia de Estados Unidos, le dio al gobierno federal el poder de poner en cuarentena. Incluso cuando la administración Biden buscaba alguna base para justificar su mandato de usar mascarillas en el transporte, recurrió a esta única ley.

Si alguien realmente quiere llegar a la raíz de este problema, es necesario tomar medidas decisivas. Es necesario derogar la indemnización de la responsabilidad por daños a las empresas farmacéuticas.  Es necesario derribar el precedente judicial de las inyecciones forzadas en  Jacobson . Pero aún más fundamental es que el propio poder de cuarentena tiene que desaparecer, y eso significa la derogación total de la Ley de Servicios de Salud Pública de 1944. Ésa es la raíz del problema. La libertad no estará segura hasta que sea desarraigada.

Tal como está ahora, todo lo que ocurrió en 2020 y 2021 puede volver a suceder. De hecho, existen planes exactamente para eso.

Jeffrey A. Tucker

brownstone

El principal vacunólogo del mundo admite que las vacunas no son seguras

Después de décadas de afirmar que la seguridad de las vacunas se estudia exhaustivamente, el Dr. Stanley Plotkin, el principal vacunólogo del mundo, admitió que no es así, ni antes ni después de la licencia. el artículo de Plotkin: https://nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMp2402379… 

Es sorprendente que después de décadas en las que el Dr. Stanley Plotkin y sus discípulos vacunólogos insistieran en que las vacunas son los productos mejor estudiados del planeta, acaban de escribir un artículo que admite precisamente lo contrario.

Simplemente admitieron que las vacunas no se estudian adecuadamente, ni antes ni después de la aprobación. Admitieron, por ejemplo, que “los ensayos clínicos previos a la autorización tienen tamaños de muestra y duraciones de seguimiento limitados” y que “no hay recursos destinados a estudios de seguridad posteriores a la autorización”.

Durante décadas, la comunidad médica insistió en que las vacunas son el producto más estudiado jamás; por ejemplo, el Dr. Paul Offit dijo: «Creo que deberíamos estar orgullosos de las vacunas como posiblemente las cosas más seguras y mejor probadas que ponemos en nuestro cuerpo».

Durante décadas, los padres de niños y adultos lesionados por vacunas y otras partes interesadas impugnaron estas afirmaciones sólo para ser rechazados y atacados por la comunidad médica y las agencias de salud.

En 2018, el abogado Aaron Siri tuvo oportunidad sin precedentes de destituir al arquitecto del programa de vacunación y padrino de la vacunología, el Dr. Plotkin, y dejó al descubierto la evidencia que demostró lo que estos autores ahora finalmente admiten sobre la total falta de ensayos y estudios de seguridad de las vacunas.

El Dr. Stanley Plotkin asesor de laboratorios fabricantes de vacunas admitió bajo declaración jurada que la Vacuna de Hepatitis B, solo tuvo 4 dias de estudios de seguridad, lo indaga el abogado Aaron Siri bajo juramento https://www.bitchute.com/video/0ojBNV0Z19PA/

Después de que esta declaración se hace pública, el Dr. Plotkin lanzó un escrito que exigia que la FDA agregue “información faltante sobre seguridad y eficacia” en los prospectos de las vacunas y que los CDC excluyan los daños de sus hojas de información sobre vacunas, “presionando a la Fundación Gates para que apoye organizaciones pro-vacunas”, trabajando para que la OMS incluya la vacilación sobre las vacunas como una amenaza global, presionando a la AAP, IDSA y PIDS para “apoyar la capacitación de testigos” para respaldar la seguridad de las vacunas, etc.

Ver https://icandecide.org/article/dr -stanley-plotkin-el-padrino-de-las-vacunas-reacción-al-ser-cuestionado/…. El problema es que no existen estudios de seguridad adecuados. Por lo tanto, no hay datos de seguridad que agregar a los prospectos de la FDA, y ocultar los daños eliminándolos de los prospectos de los CDC no los hace desaparecer.

Los padres y otros adultos no dejan de creer lo que han visto con sus propios ojos simplemente porque los CDC, la OMS, las Fundaciones Gates, etc., no los reconocen o, peor aún, los atacan.

Eso nos lleva al presente en el que Plotkin y sus discípulos no pueden ocultar la verdad. Entonces, su única opción es intentar cooperar con la verdad sobre la que han mentido durante décadas al admitir ahora que los estudios que demuestren que las vacunas son seguras no existen.

Pero al hacer esa admisión, convenientemente no admiten que durante décadas mintieron, engañaron y defraudaron al público al afirmar que las vacunas son probablemente los productos más probados en materia de seguridad en el planeta y que la gente debe estar segura de que no quedó nada sin remover en materia de seguridad de las vacunas.

Así, en el artículo que acaban de publicar, pretenden no haber mentido nunca sobre la seguridad de las vacunas. Pretenden que ahora simplemente señalan que la seguridad de las vacunas nunca se ha llevado a cabo realmente, como si eso no lo supieran antes.

Su verdadera agenda es clara y no es estudiar la seguridad de las vacunas, sino confirmar lo que ya creen. Esto queda muy claro por el hecho de que, si bien su artículo admite que no se han realizado estudios, escriben al mismo tiempo que los daños graves de las vacunas son “raros”.

Pero si no se han hecho los estudios ¿cómo lo saben? La respuesta es que no les importa y no les importa saber la verdad. Su objetivo es proteger los productos que han defendido durante sus carreras y que les han traído fama y riqueza.

También ignoran la montaña de estudios y datos que ya existen y que muestran claramente los graves daños de las vacunas. Tómese un momento para revisar el gran conjunto de conocimientos científicos sobre uno de los adyuvantes utilizados en las vacunas que, según muestran múltiples estudios, puede causar daños graves. Consulte por ejemplo el estudio Un «placebo» reactógeno y la ética del consentimiento informado en los ensayos clínicos de la vacuna Gardasil contra el VPH: un estudio de caso de Dinamarca https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/38788092/ .

Por ejemplo, hay dos vacunas de hepatitis B autorizadas para bebés recién nacidos,  en EEUU: una fabricada por Merck y el otra por GlaxoSmithKline. Merck. La vacuna contra la hepatitis B fue autorizada por la FDA después de ensayos que estudiaron reacciones adversas por solo cinco días después de la vacunación. https://www.fda.gov/downloads/BiologicsBloodVaccines/Vaccines/ApprovedProducts/UCM110114.pdf

De similar manera, la vacuna contra la hepatitis B de Glaxo-Smith-Kline fue licenciada por la FDA después de ensayos que estudiaron reacciones adversas por solo cuatro días después de la vacunaciónhttps://www.fda.gov/downloads/BiologicsBloodVaccines/Vaccines/ApprovedProducts/UCM224503.pdf

El congresista Bill Posey ante el Congreso de EEUU (29/07/2015), leyó la denuncia del Dr William Thompson, científico senior de la división de vacunas del CDC sobre como ocultaron información sobre la vacuna SRP contra de Sarampión, Rubeola y Paperas (MMR) y su asociación con el autismo. El tema sigue sin investigar aún. En agosto del 2014, surgio un denunciante del Centro de Control de Enfermedades, CDC, el Dr William Thompson que es un científico senior de la división de vacunas del CDC. Thompson declaró que científicos de la división de vacunas del CDC ocultaron la conexión entre el autismo y las vacunas en un estudio sobre el impacto de la vacuna SRP de Sarampión, Paperas, Rubeola. Thompson uno de los autores del estudio tuvo cargo de conciencia y en agosto del 2014 decidió confesar este fraude y quiere presentarse ante el congreso bajo declaración jurada y confesar la corrupción de CDC. El Congreso aún no lo llama a declarar… https://www.bitchute.com/video/NVOUYV6oPb3G

Después de llegar a la conclusión a priori de que los daños son “raros”, ignorando todos los estudios existentes que demuestran los daños, estas personas tienen la audacia de querer atacar el fondo federal de compensación por lesiones causadas por vacunas para presumiblemente pagarse a ellos mismos y a sus compatriotas cientos de millones de dólares para llevar a cabo los estudios que, sin duda, buscarían confirmar su conclusión anterior de que los daños de las vacunas son “raros”, ignorando los estudios que ya muestran daños graves.

Entonces, con eso en mente, aquí están las cosas que admiten en este artículo quizás por primera vez: En negrita lo que escribe Plotkin “La vacilación generalizada sobre las vacunas observada durante la pandemia de Covid-19 sugiere que el público ya no está satisfecho con el objetivo de seguridad tradicional de simplemente detectar y cuantificar los riesgos asociados después de que se ha autorizado el uso de una vacuna”. 

Sigue Plotkin «Se necesitan estudios posteriores a la autorización para caracterizar completamente el perfil de seguridad de una nueva vacuna, ya que los ensayos clínicos previos a la autorización tienen tamaños de muestra, duraciones de seguimiento y heterogeneidad de la población limitados». 

Los ensayos clínicos en los que se basan para autorizar las vacunas infantiles son inútiles con respecto a la seguridad, ya que prácticamente nunca tienen un control con placebo, generalmente revisan la seguridad durante días o semanas después de la inyección y, a menudo, tienen muy pocos participantes para medir algo de valor, basta con ver http://icandecide.org/no-placebo ;

Sigue Plotkin: «Es fundamental examinar los eventos adversos posteriores a la inmunización (AEFI) que no se han detectado en ensayos clínicos, para determinar si están relacionados causal o coincidentemente con la vacunación». 

Luego de haber anunciado al público que las vacunas eran perfectamente seguras, la Dra. Soumya Swaminathan, científica jefa de la Organización Mundial de la Salud OMS, admitió (en privado ante los expertos) que no hay estadísticas para saber la cantidad y cuales son los efectos adversos que las vacunas causan. Sucedió durante la Cumbre Mundial de Seguridad de Vacunas de la OMS en diciembre pasado en Ginebra, Suiza. https://www.bitchute.com/video/uFT0zjelbgNT

 Sigue Plotkin “Cuando son causadas por vacunas (reacciones adversas a las vacunas), se debe conocer el riesgo atribuible a la vacunación y el mecanismo biológico. Esa ciencia se convierte en la base para desarrollar vacunas más seguras, si es posible, y para determinar las contraindicaciones de la vacunación y la compensación que se debe ofrecer a los AEFI”. 

Sigue Plotkin “Actualmente en los Estados Unidos, cuando el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) recomienda una nueva vacuna de rutina, las únicas asignaciones legales automáticas de recursos que siguen son para la adquisición de vacunas por parte de Vacunas para Niños (VFC) y para el Programa de Compensación por Lesiones por Vacunas ( VICP). Aunque el ACIP reconoce la necesidad, actualmente no hay recursos destinados a estudios de seguridad posteriores a la autorización más allá de las asignaciones anuales, que deben ser aprobadas por el Congreso cada año”. 

“Es comprensible que el progreso en la ciencia de la seguridad de las vacunas haya sido lento, a menudo dependiendo de evidencia epidemiológica que se retrasa o es inadecuada para respaldar conclusiones causales y de una comprensión incompleta de los mecanismos biológicos, lo que ha afectado negativamente la aceptación de las vacunas”.

“En 234 revisiones de diversas vacunas y resultados de salud realizadas entre 1991 y 2012, el IOM encontró evidencia inadecuada para probar o refutar la causalidad en 179 (76%) de las relaciones que exploró, lo que ilustra la necesidad de una ciencia más rigurosa”. 

El documento técnico de ICAN de 2017 ya había mencionado este punto https://icandecide.org/wp-content/uploads/2019/09/ VaccineSafety-Version-1.0-October-2-2017-1.pdf… . 

Sigue Plotkin «Identificar los mecanismos biológicos de las reacciones adversas (cómo y en quién ocurren) es fundamental para desarrollar vacunas más seguras, prevenir reacciones adversas ampliando las contraindicaciones y compensar equitativamente a los vacunados por las verdaderas reacciones adversas». 

“El presupuesto para el seguimiento de la seguridad de las vacunas en los CDC (que es responsable de la mayoría de los esfuerzos federales de EE. UU.) ha permanecido estancado… en unos 20 millones de dólares al año”, lo que, según ellos, es un “nivel inadecuado de financiación”. 

“El público ahora también quiere que las autoridades de salud pública mitiguen y prevengan eventos adversos raros pero graves, que ya no parecen raros cuando se administran vacunas a millones o miles de millones de personas”.

Comentario: Siempre se han administrado a millones o miles de millones de personas, y los estudios que muestran los daños que causan no son raros y ya existen. Si están realmente interesados ​​en la verdad sobre los daños que causan las vacunas y el ritmo al que se producen, entonces deberían acoger con agrado la convocación de un panel bipartidista que podría revisar primero todos los estudios muy preocupantes y los datos concretos que ya existen sobre este tema (a menudo por científicos que no reciben subsidios de la industria farmacéutica) y podríamos diseñar estudios adicionales juntos y realizarlos abiertamente para que todos tengan que vivir con el resultado.

Utilizando datos históricos de seguros, se demostró que los niños vacunados tenían varias veces la tasa (muchas de las cuales son enfermedades inmunomediadas) por 12% de los niños a principios de la década de 1980 (cuando los CDC recomendaban 7 inyecciones infantiles de rutina) a más del 50% de los niños ahora (cuando los CDC recomiendan más de 90 inyecciones infantiles de rutina).

La realidad es que ya existen estudios que demuestran que las vacunas contribuyen a este aumento. Pero su objetivo, en cualquier caso, no es estudiar realmente la seguridad. Más bien es para demostrar su suposición previa de que las vacunas son seguras y los daños son “raros”.

Este enfoque es como diseñaron VAERS, V-SAFE, VSD y cualquier otro sistema de “seguridad”. Como se desprende claramente de su artículo, la única razón por la que pretenden siquiera preocuparse por la seguridad de las vacunas es que quieren evitar una reducción en la absorción de vacunas, en lugar de garantizar su seguridad.

Desde hace ya decadas que se ignora a los niños más susceptibles que tienen problemas geneticos:

El  Instituto de Medicina de la Academia Nacional de Ciencias de EEUU, IOM, ya ha comprobado que hay grupos de niños más vulnerables desde el nacimiento y aun así los vacunan con vacunas que no han sido controladas en los últimos 30 años, sin hacerles estudios previos de su potencial vulnerabilidad.  De acuerdo al Instituto de Medicina de la Academia de Ciencias de EEUU, IOM:  “Tanto las investigaciones epidemiológicas como las mecanicistas sugieren que la mayoría de los individuos que experimentan una reacción adversa a las vacunas tienen una susceptibilidad preexistente. Estas predisposiciones pueden existir por varias razones: variantes genéticas (en el ADN humano o microbioma), exposiciones ambientales, comportamientos, enfermedades intermedias o etapa de desarrollo, por nombrar solo algunas, todas las cuales pueden interactuar entre ellas. Algunas de estas reacciones adversas son específicas de la vacuna en particular, mientras que otras pueden no serlo”. https://www.nap.edu/read/13164/chapter/5#82

De acuerdo a estudios realizados, el 25% de la población hispana tiene mutaciones genéticas del tipo MTHFR es decir que son vulnerables a ser dañados por las vacunas y sufrir autismo o enfermedades crónicas peores que las enfermedades que la vacuna en cuestión intente prevenir. Si en verdad la intensión es la de proteger nuestra salud se debería contemplar esta realidad.

El Dr. Andrew Zimmerman dijo en una declaración jurada firmada a los abogados del Departamento de Justicia (DOJ) con los que trabajó para defender las vacunas, que había descubierto «excepciones en las cuales Las vacunas podrían causar autismo e inmediatamente fue retirado de su cargo como médico experto del gobierno, defendiendo las vacunas en el tribunal federal de vacunación». https://www.bitchute.com/video/3EJilPT1qt5E/

Ver además: https://cienciaysaludnatural.com/inseguridad-de-las-vacunas/

cienciaysaludnatural

Cumbre Internacional sobre Gripe Aviar: “Planificación de la Gestión de Fatalidades Masivas”

Que comience el alarmismo…

Parece que se avecina otra plandemia, a juzgar por la obsesión que tantas élites parecen tener con la cepa H5N1 de la gripe aviar.

Todos hemos oído hablar del sacrificio de millones de aves de corral. Incluso de ganado.

Y ahora han convocado una “Cumbre Internacional sobre la Gripe Aviar” que se celebrará en Washington DC del 2 al 4 de octubre y, según el folleto oficial en línea del evento, discutirán  “una cepa altamente virulenta de gripe aviar que afecta a ambos países”. ganado y humanos” …

Este parece ser un ejercicio de simulación para simular una próxima pandemia de gripe aviar, y tiene prácticamente el mismo propósito que el Evento 201 en octubre de 2019 en la ciudad de Nueva York para la pandemia Covid que se aproximaba.

La gripe aviar, por supuesto, promete ser mucho peor, con una tasa de mortalidad de entre el 25 y el 50 por ciento, al menos eso es lo que nos dicen.

El alarmismo está aumentando rápidamente, justo cuando nos acercamos a las elecciones presidenciales de noviembre. Ya sea que esta próxima pandemia se programe para noviembre o en algún momento de 2025, no es una buena señal que las élites hayan programado este ejercicio teórico.

La Cumbre sobre la gripe aviar parece estar buscando patrocinadores corporativos, pero en su página no aparece ningún nombre de patrocinadores a fecha de 9 de julio cuando lo comprobé.

En la lista de temas para esta cumbre, según el sitio web de la conferencia, el primer tema es   “planificación de la gestión de muertes masivas …

Otro tema destacado será “Vigilancia y gestión de datos”, bajo el cual se encuentra esta descripción: “Discutir estrategias para mejorar los sistemas de vigilancia, los mecanismos de alerta temprana y los protocolos de respuesta rápida”.

Suena como otra justificación para los pasaportes sanitarios digitales, que es una forma de identificación digital para rastrear el movimiento humano (y prohibir la entrada a ciertos lugares a menos que pueda demostrar que ha sido vacunado).

Finlandia se ha convertido recientemente en el primer país en empezar a vacunara su población con un suero de ARNm contra la gripe aviar.

Finlandia ha comprado vacunas contra la gripe aviar para 10.000 personas, cada una de las cuales consta de dos inyecciones, como parte de una adquisición conjunta de la Unión Europea de hasta 40 millones de dosis para 15 países del fabricante CSL Seqirus.

Mientras tanto, informa la revista Wired, el gobierno de Estados Unidos ha otorgado a Moderna un contrato de 176 millones de dólares para producir una vacuna de ARNm contra la gripe aviar .

Aquí está la lista completa de temas según el sitio web de Bird Flu Summit:

Planificación de gestión de fatalidades masivas

Vigilancia y Gestión de Datos

Preparación de estrategias comunitarias

Asociación y participación local

Entrega de vacunas y medicamentos antivirales

Contramedidas médicas

Impacto socioeconómico en las industrias avícolas y ganaderas

Evaluación de riesgos y beneficios: salud pública, industria y perspectivas regulatorias

Esfuerzos de educación preventiva y comunicación de riesgos

Mando, Control y Gestión

Gestión de respuesta a emergencias

Planificación basada en negocios

Planificación basada en la escuela

Planificación basada en la comunidad

Bajo el título “Quién debería asistir”, el sitio web de la conferencia enumera lo siguiente:

Funcionarios de salud pública

Veterinarios y profesionales de la salud animal.

Epidemiólogos y especialistas en enfermedades infecciosas.

Veterinarios y profesionales de la salud animal.

Responsables políticos y representantes gubernamentales

Industria farmacéutica

Profesionales Académicos, Investigadores y Científicos

Actores de la industria en producción avícola, ganadería, diagnóstico, seguridad alimentaria y atención médica

Organizaciones No Gubernamentales (ONG)

Organizaciones y agencias internacionales

¿Soy sólo yo o parece que los globalistas se están preparando para otro gran evento?

leohohmann