La OMS le dijo a Ucrania que destruyera los ‘patógenos de alta amenaza’ en los laboratorios para prevenir la propagación de enfermedades
La Organización Mundial de la Salud aconsejó a Ucrania que destruya los “patógenos de alta amenaza” en los laboratorios de salud pública del país para evitar “cualquier derrame potencial” que pueda infectar a la población durante la invasión rusa, informa Reuters .
El informe llega después de un tenso intercambio entre funcionarios estadounidenses y rusos sobre biolaboratorios “peligrosos” en el país, con Rusia, y luego China , acusando al ejército estadounidense de estar involucrado en los biolaboratorios de Ucrania.
Estados Unidos ha negado las acusaciones, emitiendo (entre otras cosas) una declaración el jueves de que “Estados Unidos no tiene laboratorios de armas químicas o biológicas en Ucrania”, y agregó que Estados Unidos “no desarrolla ni posee armas químicas y biológicas en ninguna parte”.
El martes, la subsecretaria de Estado de EE. UU., Victoria Nuland, reconoció que Ucrania ” tiene instalaciones de investigación biológica, de las cuales, de hecho, ahora estamos bastante preocupados por las tropas rusas, las fuerzas rusas pueden estar tratando de hacerse con el control. Así que estamos trabajando con los ucranianos en cómo pueden evitar que cualquiera de esos materiales de investigación caiga en manos de las fuerzas rusas en caso de que se acerquen”.
La respuesta de Nuland dejó en claro que lo que sea que haya dentro de los biolaboratorios de Ucrania es una preocupación seria, sin embargo, debe tenerse en cuenta que no hay, de momento, evidencia pública de armas biológicas en sí mismas (si bien sí la hay de la existencia en esos laboratorios de patógenos modificados artificialmente que se usan en armas biológicas), ni la declaración de la OMS hizo referencia a la guerra biológica, que es una cuestión separada de si los laboratorios contienen patógenos peligrosos que podrían usarse en un arma biológica.
En respuesta a la afirmación del miércoles 9 de marzo de la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, de que Estados Unidos está operando un laboratorio de guerra biológica en Ucrania, un portavoz presidencial ucraniano dijo: “Ucrania niega estrictamente cualquier acusación de este tipo”.
No obstante, según una página web eliminada recuperada por GreatGameIndia, el ex presidente Barack Obama impulsó un acuerdo que resultó en el desarrollo de biolaboratorios que procesan “patógenos especialmente peligrosos” en Ucrania.
Los titulares llegan el mismo día en que la agente de la administración Biden, Victoria Nuland, informó al Senado de los Estados Unidos que el gobierno estadounidense está ansioso por que los centros de investigación biológica caigan en control ruso como consecuencia de la escalada de los combates en Europa del Este.
Ahora, tenemos la confirmación oficial del Subsecretario de los Estados Unidos de que Rusia planeaba atacar los laboratorios de Armas Biológicas en Ucrania y que Washington estaba trabajando con Kiev en patógenos peligrosos en esos laboratorios autorizados por el propio ex presidente de los Estados Unidos, Barack Obama.
El artículo “Biolab opens in Ukraine”, que se publicó originalmente el 18 de junio de 2010, describe cómo Obama, cuando era senador de Illinois, ayudó a asegurar un acuerdo para crear un laboratorio de bioseguridad de nivel 3 en la ciudad ucraniana de Odessa.
La historia, que enfatizó notablemente los esfuerzos del ex senador Dick Lugar, también se publicó en el número No. 818 del Outreach Journal del Centro de Contraproliferación de la USAF.
Lugar dijo que los planes para la instalación comenzaron en 2005 cuando él y el entonces senador Barack Obama se asociaron con funcionarios ucranianos. Lugar y Obama también ayudaron a coordinar los esfuerzos entre los investigadores estadounidenses y ucranianos ese año en un esfuerzo por estudiar y ayudar a prevenir la gripe aviar”, se lee en el informe.
El laboratorio con sede en Odessa “es responsable de la identificación de patógenos biológicos especialmente peligrosos”, según un informe de 2011 del Comité de Anticipación de los Desafíos de Bioseguridad de la Expansión Global de Laboratorios Biológicos de Alta Contención de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos.
“Este laboratorio fue reconstruido y actualizado técnicamente hasta el nivel BSL-3 a través de un acuerdo de cooperación entre el Departamento de Defensa de los Estados Unidos y el Ministerio de Salud de Ucrania que comenzó en 2005. La colaboración se centra en prevenir la propagación de tecnologías, patógenos y conocimientos que pueden utilizarse en el desarrollo de armas biológicas”, continúa el informe.
“El laboratorio actualizado sirve como Laboratorio Central de Referencia Provisional con un depozitarium (colección de patógenos). De acuerdo con las regulaciones ucranianas, tiene un permiso para trabajar tanto con bacterias como con virus del primer y segundo grupo patógeno”, explica el informe.
El informe complementario del Proyecto de Prevención de Armas Biológicas que documenta la red de biolaboratorios de Ucrania entra en detalles considerables sobre los patógenos con los que la institución ha realizado investigaciones.
El ébola y los “virus del grupo de patogenicidad II mediante el uso de virología, molecular, serológica y métodos expresos” se encontraban entre los patógenos examinados por el laboratorio.
La instalación también ofreció “capacitación especial para especialistas en temas de bioseguridad y bioseguridad durante el manejo de agentes patógenos biológicos peligrosos”.
El descubrimiento de la planta de biolaboratorio se produce después de que el gobierno de Estados Unidos enfrentara severas críticas por financiar peligrosos experimentos de “ganancia de función” en Wuhan en una instalación administrada por el Partido Comunista Chino con cooperación militar y económica del Pentágono, de la ONG Eco Alliance y participación de científicos franceses.
En medio de estos descubrimientos, anunciados (hay que tenerlo en cuenta) en su mayoría por el gobierno ruso, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá el viernes 18 de marzo a pedido de Rusia para discutir los reclamos. El representante enviado adjunto de Rusia ante la ONU, Dimitry Polyanskiy así lo ha confirmado a través de sus redes sociales.
En su publicación se cita también el informe presentado por el Ministerio de Defensa, donde se afirmó que Estados Unidos y los aliados de la OTAN ejecutan «programas militares biológicos» en Ucrania.
Según informa RT, «El informe militar continuó afirmando que la Agencia de Reducción de Amenazas de Defensa del Pentágono está “financiando y realizando investigaciones biológicas militares en el territorio de Ucrania”, citando documentos que dijo que capturó en varias instalaciones durante el ataque en curso de Rusia contra el país. Entre otras actividades, el ministerio dijo que se llevaron a cabo investigaciones en laboratorios en Kiev, Kharkov y Odessa para “estudiar la posibilidad de propagación de infecciones particularmente peligrosas a través de aves migratorias”«.
Estas declaraciones rusas son el motivo por el que desde la administración norteamericana, después de haber negado la existencia de estos laboratorios durante años, esta semana han reconocido su existencia, aunque han señalado que «Estados Unidos cumple plenamente con sus obligaciones en virutd de la Convención sobre Armas Químicas y la Convención sobre Armas Biológicas, y no desarrolla ni posee tales armas en ninguna parte». Por contra, señalan que ha sido Rusia quien ha estado operando «programas activos de armas químicas y biológicas». Qué iban a decir.
El presidente de Ucrania, Zelenskyy señaló que estos laboratorios están «centrados en la ciencia civil», y que no tienen dimensión militar.
Desde el ministerio de Defensa ruso se afirmó el pasado jueves 10 de marzo que los documentos incautados por las tropas militares enviadas en «misión especial» a Ucrania, sugieren que EEUU planeaba «trabajar con patógenos de aves, murciélagos y reptiles» y potencialmente estudiar si estos animales podrían transmitir enfermedades tan peligrosas como el virus de la peste porcina africana y el ántrax.
El Gobierno de China ha exigido que Estados Unidos dé explicaciones sobre los 336 laboratorios en los que participa en 30 países de todo el mundo.
Fuentes