Los efectos dañinos de las vacunas se multiplican mientras se estrecha la censura contra sus críticas

3150 personas que recibieron la vacuna contra la covid-19 han tenido que recibir atención médica.

 

Según los Centros de Control de Enfermedades de EE.UU., CDC, 3150 personas de 112.807, que recibieron la vacuna [1] contra COVID -19 están tan enfermas que no pueden trabajar, realizar actividades diarias, y han tenido que recibir atención del hospital/médico. Esto no incluye los efectos secundarios a medio y largo plazo. Recuerde que las personas están teniendo pruebas positivas para detectar el VIH después de recibir las vacunas en algunos estudios. Hay un componente germinal de malaria codificado en algunas de las vacunas también. Se puede esperar infertilidad causada por algunas de las vacunas.

De acuerdo a la Doctorada en Inmunología Roxana Bruno PhD [2]: “Las autoridades están cerrando contratos de riesgo con las empresas de biotecnología, a través del compromiso de adquisición prematura de dosis y están implementando medidas para la autorización de inoculaciones masivas en la población, sin que se hayan completado los tiempos mínimos de experimentación requeridos internacionalmente. Esto significa que están habilitando una terapia que se encuentra en la etapa experimental, antes de haber completado las fases pre-clínicas y clínicas mínimas requeridas para garantizar la seguridad y la eficacia de las mismas.”

El caso más espectacular y mediático (y aun así censurado) de reacción adversa fue el de la enfermera Tiffany Dover quien se desmayó en la televisión 17 minutos después de recibir la vacuna de Pfizer [3]

La Dra Bruno continúa afirmando:

“El desarrollo de vacunas tiene un camino científico largo. La vacuna más rápida que se ha autorizado en respuesta a un nuevo patógeno humano de preocupación sanitaria, es la vacuna contra el virus del Ébola, cuya investigación llevó casi 6 años. Por este motivo, sería ingenuo pensar que en tiempo récord alguna de las empresas podría ofrecer una vacuna contra COVID-19 que sea científicamente comprobada segura y eficaz [4].

Hay vacunas cuya reacción inmunitaria puede dañar, e incluso matar, si se ponen en personas con inmunidad previa. Este es el caso de las vacunas contra la fiebre Q [5], el virus sincitial respiratorio [6] y el dengue [7]. Antes de vacunar, [nos dice la propia ciencia oficial, la misma que ahora se pasa todos sus preceptos por el forro en defensa de sus amos y su vacuna] es importante determinar quién ha tenido contacto natural con el virus, para evitar las graves complicaciones que puede provocar una vacuna cuando ya hay inmunidad natural previa.

[Según los protocolos médicos, teóricamente aun en vigor] antes de realizar la inoculación masiva experimental de la población con cualquiera de las diversas variantes de vacunas contra el SARS-CoV-2, es condición necesaria haber descartado la ocurrencia de una reacción inmunitaria paradójica, tal como la observada en los modelos animales en hurones, felinos, ratones y conejos en experimentos pre-clínicos, en los cuales la inmunización previa con coronavirus no los protegieron de la infección, sino que, de manera paradójica, quedaron expuestos a padecer una enfermedad peor. Este efecto no debería ser minimizado debido a que dicho fenómeno ya se observó en otros virus de RNA -además de los coronavirus- como se mencionó, también se observó en virus sincitial respiratorio y virus del Dengue.

La posibilidad de ocasionar daños irreversibles en los seres humanos con terapias preventivas en etapa de experimentación, es violatoria de los tratados internacionales de bioética, y conlleva el riesgo potencial de generar enfermedades autoinmunes y neurodegenerativas entre otros efectos adversos graves ya comprobados en voluntarios, así como de ocasionar efectos adversos a mediano y largo plazo -que aún deben ser evaluados- tales como alergias y anafilaxis, toxicidad, mutagénesis, teratogénesis, carcinogénesis y afectación de la fertilidad en los ciudadanos inoculados. Procedimientos éticamente inaceptables”

Los riesgos de la vacuna superan los beneficios de acuerdo a la Administración de Drogas y Alimentos, FDA: Posibles resultados de eventos adversos de las vacunas COVID-19

Según la FDA la vacuna ha demostrado provocar numerosos efectos adversos y ser potencialmente causante de otros terribles efectos secundarios (Vaccines and Related Biological Products Advisory Committee October 22, 2020 Meeting Presentation:  https://www.fda.gov/media/143557/download) tales como:

 Síndrome de Guillain-Barré
 Encefalomielitis diseminada aguda
 Mielitis transversa
 Encefalitis / mielitis / encefalomielitis / meningoencefalitis / meningitis /
encefalopatía
 Convulsiones / convulsiones
 Accidente cerebrovascular
 Narcolepsia y cataplejía
 Anafilaxia
 Infarto agudo de miocardio
 Miocarditis / pericarditis
 Enfermedad autoinmune
 Muertes
 Resultados del embarazo y el nacimiento
 Otras enfermedades desmielinizantes agudas
 Reacciones alérgicas no anafilácticas
 Trombocitopenia
 Coagulación intravascular diseminada
 Tromboembolismo venoso
 Artritis y artralgia / dolor articular
 Enfermedad de Kawasaki
 Síndrome inflamatorio multisistémico en niños
 Enfermedad potenciada por la vacuna

 

En medio de esta debacle para la salud que es la vacuna, nos encontramos la histeria destada por los medios de comuniación, los gobiernos y sus amos – la gran banca y las grandes organizaciones de poder -, para adoctrinar a la población y presionarla para que se vacune, aunque le pueda ir la vida en ello.

Una de las secuelas de la ola de histeria ha sido la imposición de un nuevo tipo de censura que se suma a las que ya existían. Esta censura significa la liquidación de un principio médico secular: la posibilidad de obtener una “segunda opinión”.

En lo sucesivo ya no habrá “segundas opiniones”; el mundo deberá conformarse con la primera, convertida en única. La medicina, que históricamente fue un terreno abonado para la proliferación de escuelas y prácticas terapéuticas diferentes, se ha fosilizado en un “corpus” de doctrinas avaladas por el poder político, por quienes fungen como “autoridad científica” y, finalmente, por los grandes monopolios digitales.

Lo ha advertido expresamente Twitter, que esta semana estrecha el dogal de la censura en materia de salud pública en su más amplio sentido, que va desde los virus, hasta las enfermedades, pasando por las vacunas y los reglamentos jurídicos que aprueben los gobiernos.

Las redes sociales se convertirán en el sustituto de la telebasura. Sólo se admiten contenidos anodinos y repeticiones de las circulares ministeriales.

A partir de hoy la censura se convertirá en una tarea prioritaria, dice Twitter, y consistirá en eliminar “información engañosa sobre la vacunación”. Pronto empezarán a etiquetar los mensajes, quedando los verídicos a un lado y los falsos al otro.

Después de lograr separar la verdad de la mentira, la humanidad se puede dar por satisfecha. Uno de nuestros grandes sueños se ha cumplido por fin y para ello no sólo surgirá una legión de amanuenses que, como en los tiempos de franquismo, se encargarán de leer los contenidos y tachar unos con el lápiz rojo y los otros con el verde, sino que las empresas tecnológicas contarán con la ayuda de eso que llaman “inteligencia artificial”.

“El mayor peligro potencial para la salud y el bienestar humanos”, dice Twitter, no son las vacunas ni la industria farmacéutica, sino las mentiras, que la red social se encargará de separar de las informaciones verídicas, que son aquellas que tienen una sanción oficial, un membrete de autenticidad.

El elenco de mentiras se amplía con los “rumores”, que tampoco tendrán cabida, las “opiniones controvertidas” y las informaciones “fuera de contexto”. Los censores de Twitter se encargarán de suministrar un “contexto adicional” a la información que introduzcan los usuarios para “completarla”.

Twitter llevará a cabo la censura “en estrecha consulta con las autoridades de salud pública”, lo que convierte a las redes sociales en una prolongación del poder político, casi a la misma altura que el Boletín Oficial del Estado.

No habrá “segundas opiniones” en la medicina y pronto en ningún otro asunto. En el mundo del futuro solo podrán opinar los “expertos” de la tele.

 

Referencias

1 Anaphylaxis Following m-RNA COVID-19 Vaccine Receipt https://www.cdc.gov/vaccines/acip/meetings/downloads/slides-2020-12/slides-12-19/05-COVID-CLARK.pdf

2 Roxana Bruno PhD, Informe Pericial, Diciembre 12 del 2020

3 Reacciones alérgicas graves de la vacunas COVID-19 de Pfizer BioNTech https://cienciaysaludnatural.com/reacciones-alergicas-graves-de-la-vacunas-covid-19-de-pfizer-biontech/

4 Tortoises, hares, and vaccines: A cautionary note for SARS-CoV-2 vaccine development. Gregory A.Poland. Vaccine. 2020 Jun 2;38(27):4219-4220. doi: 10.1016/j.vaccine.2020.04.073. PMID: 32387011; PMCID: PMC7252125. https://doi.org/10.1016/j.vaccine.2020.04.073

5 https://www.health.nsw.gov.au/Infectious/factsheets/Pages/q-fever-vaccine.aspx

6 Brief History and Characterization of Enhanced Respiratory Syncytial Virus Disease. Acosta PL, Caballero MT, Polack FP. Clin Vaccine Immunol. 2015 Dec 16;23(3):189-95. doi: 10.1128/CVI.00609-15. PMID: 26677198; PMCID: PMC4783420. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26677198/

7 https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0895435617309721

VIDEO: Tiffany Dover, Enfermera se desmaya mientras habla para presionar sobre recibir la vacuna COVID-19 https://nypost.com/2020/12/18/nurse-faints-while-talking-to-press-about-getting-covid-19-vaccine/

 

Fuentes:

Sobre los efectos de la vacuna – cienciaysaludnatural

Sobre la censura en RRSS – mpr21