Robando vuestro futuro

Sin la teoría de los gérmenes no habría ningún encierro, ni máscarillas ni ninguna conspiración extraña dirigida a eliminar los últimos vestigios de nuestra propia libertad. No habría ninguna industria de la vacuna que de repente exigiera el control de sus finanzas desde el interior de tu propio brazo.

Cuidado con los remedios inevitablemente ineficaces de los falsos diagnósticos.

Hablan de tu salud pero en realidad están tratando de robarte el futuro. Nunca te lo devolverán.

Considere la posibilidad de investigar el robo de tu futuro, que ya está en marcha.

Todas estos tests positivos (de pruebas que no funcionan y que no tienen ningún significado en relación con la identificación de cualquier enfermedad) permiten al gobierno hacer lo que quiera. Y en caso de que no lo hayas notado, realmente parece que quiere deshacerse de ti, de una manera u otra.

Si han podido salirse con las suyas con un confinamiento mundial por una enfermedad que diseñaron en la que tienes que hacer un test que no funciona, que determinará tu capacidad de acceder a tu propio dinero, entonces pueden salirse con la suya con cualquier otra cosa. Ellos lo saben, razón por la cual ignoraron la práctica médica sensata y cerraron el mundo con un viejo truco.

A saber, poner el miedo entre tú y los hechos reales.

El delirio de la teoría de los gérmenes (tema sobre el que ya se ha hablado en este blog) enmascara las verdaderas causas de las enfermedades, que luego se pretende curar con venenos en sus falsas mezclas conocidas como vacunas. ¿Es el contagio un mito? Tal vez es hora de que matemos la teoría de los gérmenes antes de que nos mate.

Sin la teoría de los gérmenes no habría ningún encierro, ni máscarillas ni ninguna conspiración extraña dirigida a eliminar los últimos vestigios de nuestra propia libertad. No habría ninguna industria de la vacuna que de repente exigiera el control de sus finanzas desde dentro de vuestro propio brazo.

La presencia de gérmenes no constituyen la presencia de una enfermedad”.

Se trata de un cambio radical en la práctica de la medicina, análogo a la época en que cesaron de hacer sangrar a los pacientes en un esfuerzo erróneo por curarlos.

Por la pura fuerza de la lógica, la teoría del terreno lógico de Andre Bechamp está tomando el control de la práctica de la medicina sobre la vacilante y no comprobable teoría de los gérmenes de Louis Pasteur.

No nos contagiamos de enfermedades”, se dice que dijo Bechamp. “Las construimos. Tenemos que comer, beber, pensar y sentirlas para que existan. Trabajamos duro para desarrollar nuestras enfermedades. Debemos trabajar igual de duro para restaurar la salud. La presencia de gérmenes no constituye la presencia de una enfermedad”.

https://www.pacificnaturalmedicine.com/post/the-germ-vs-the-terrain

La invención de falsos remedios basados en la teoría de los gérmenes ha permitido expoliar miles de millones de dólares a una población inculta y cada vez más enfermiza. De forma significativa, una de las áreas más lucrativas sería la de las vacunas, algo que el poder médico  establecido detesta que sea criticado  porque esa es su fuente de ingreso

El desacreditar la teoría de los gérmenes es la única forma de acabar con el encierro y las máscarillas, porque elimina la razón de ser de las vacunas, ya que se demuestra que son los remedios deliberadamente ineficaces para un diagnóstico falso.

Los gérmenes no causan enfermedades; los venenos en el medio ambiente causan enfermedades.

A. Firstenberg escribió el famoso libro El Arco Iris Invisible (2017) que pone de relieve el vínculo entre el electrosmog y todas las principales enfermedades de la civilización industrial (mi reseña en dos partes está enlazada a continuación).

Ya Rudolf Steiner había impulsado la advertencia de Firstenberg sobre las enfermedades causadas por la electrosensibilidad, incluyendo la gripe, que desafiaban  su  detección adecuada porque la profesión médica estaba atrapada en las garras de la teoría de los gérmenes con fines de lucro, y todavía lo está.

Abandonando la teoría de los gérmenes en favor de la teoría del terreno, automática e instantáneamente desaparece el confinamiento, las máscarillas y las espeluznantes nuevas vacunas y re-enfoca el objetivo de nuestras iracundas preocupaciones por la salud sobre las ondas de radio y  la siniestra implicación del impacto de los 5G sobre las moléculas de oxígeno de nuestro cuerpo – cuando ya no se unirán facilmente a nuestra sangre; es entonces cuando caeremos muertos dondequiera que estemos, sin necesidad de más explicaciones. Eso es lo que pasó en Wuhan, dicen.

Y el verdadero remate que detendrá el peligroso experimento 5G: las ondas de radio causan enfermedades porque interfieren con la calidad de las moléculas de oxígeno que interactúan con la sangre, produciendo un verdadero glosario de enfermedades, la mayoría de ellas mortales.

¿Los gérmenes no causan enfermedades? ¡Qué herejía! Los médicos que ganan todo ese dinero gracias a la casa registradora ni siquiera quieren renunciar a sus vacunas. Ahora los médicos deben admitir que los virus no causan enfermedades porque son el mecanismo del cuerpo que combate las enfermedades.

En palabras de Tom Cowan, autor del libro censurado El mito del contagio: “Los virus no causan enfermedades. Por lo tanto, mucho de lo que se nos dice es incorrecto”.

El controvertido teórico médico no sólo defendió la idea más odiada por las grandes empresas de que las enfermedades son causadas por ondas de radio y no por gérmenes, sino que hizo todo lo posible por subrayar el impacto que tiene el miedo -simple, constante e implacable, como con un encierro- sobre la salud.

El tema de las limitaciones y aplicaciones erróneas de la teoría de los gérmenes es muy importante para que el público lo entienda. Esta manipulación médica de nuestros cuerpos con “vacunas” diabólicas instalará un conector permanente con nuestros expertos  gubernamentales con una tecnología que sólo los genios pueden comprender realmente. Y sólo los locos intentarían tal intrusión en las mentes y cuerpos de sus conciudadanos.

 Cowan, siguiendo algunas de las lineas establecidas hace ya miles de años por todas las medicinas naturales del mundo, sostiene:

Es importante entender la mente, qué es y cómo funciona, porque la mente tiene un gran papel que desempeña en la experiencia del “contagio”. En otras palabras, si no exploramos la naturaleza de la mente y llegamos a una comprensión realista de cómo funciona la mente, no podremos entender el concepto de contagio en general y la experiencia de Covid-19 en particular. Esto se debe a que el miedo, el odio y las mentiras son componentes clave de los fenómenos que llamamos “enfermedad”; estas emociones y conductas negativas parecen ser “contagiosas”, y están presentes en el mundo a niveles casi sin precedentes en este momento. Es hora de integrar el concepto de la mente en un marco realista para la salud y la enfermedad.

No existe una dualidad cuerpo-mente; es una superstición de los científicos materialistas. Hay un ser humano, dividido en varios compartimentos de agua, cada uno trabaja en conjunto para crear esta experiencia que llamamos vida. El aporte a esta experiencia, como en una radio, viene del mundo, en realidad del universo, como un todo. Nuestros cuerpos (con sus respectivas mentes) son los receptores de esta entrada en forma de ondas electromagnéticas (lo que la Medicina Tradicional China llamó Qi)

Y, puesto que ahora sabemos que cada “sustancia” es también su propia forma de onda, hay una resonancia natural, se crea cuando la energía del mundo se encuentra con el cristal de agua organizado como el ser humano. El resultado de esa resonancia es la producción, dicho de otro modo, los pensamientos, los sentimientos y las acciones. La mente es simplemente un concepto creado para esta danza de la vida: una entrada del mundo, recibida en la forma de resonancia por nuestro organismo, que lleva a la creación de productos en forma de pensamientos, sentimientos y acciones.

Esta claro que, si uno no puede demostrar que el coronavirus siquiera existe y que los tests para este virus imaginario son fraudulentos, entonces el mundo ha sido completamente extraviado. Si el test para el coronavirus es inexacto y engañoso, como es el caso, entonces no hay ninguna razón para creer los informes acerca del número de casos de Covid-19, el número de muertes por Covid-19, o cualquiera otra estadística que venga de las instituciones médicas ortodoxas. Si los tests son fraudulentos, entonces el emperador coronavirus no tiene vestimentas”.

Como he estado diciendo durante muchos años, ésta es la batalla por todo, y cada uno tiene que participar.

Fuentes:

johnkaminski

www.verdadypaciencia.com